Teorías Teleológicas y Ética Kantiana: Un Estudio Comparativo
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Principales Teorías Teleológicas
La Ética Cristiana
Los dos grandes pensadores de la ética cristiana son San Agustín y Santo Tomás de Aquino, quienes integran ideas de los filósofos griegos en sus doctrinas. San Agustín, influenciado por Platón, adapta la noción del Bien a la cosmovisión cristiana. Considera que la máxima felicidad humana se alcanza mediante la contemplación de la verdad divina. Para lograr esta contemplación, es necesario seguir los mandamientos, priorizando a Dios sobre todas las cosas y amando al prójimo como a uno mismo. El pecado se entiende como desobediencia, y el castigo se asocia con los pecados capitales.
Santo Tomás de Aquino, por su parte, afirma que la felicidad consiste en la contemplación de Dios, fuente de toda verdad. Sin embargo, reconoce que esta contemplación plena no es posible en la vida terrenal, y que todas nuestras acciones tienen una finalidad última.
El Utilitarismo
El utilitarismo, una teoría ética surgida en Inglaterra en el siglo XVIII, fue desarrollada principalmente por Jeremy Bentham y John Stuart Mill. Esta corriente teleológica postula que el bien se identifica con la maximización de la felicidad para el mayor número posible de seres vivos. Este es el principio de utilidad, que establece que las acciones o reglas son buenas si incrementan la felicidad general. El utilitarismo guarda similitudes con la ética de Epicuro, aunque este último se centraba en la felicidad individual. El criterio moral utilitarista es, por tanto, hedonista, pudiendo considerarse como un hedonismo social.
La Relación entre Felicidad Colectiva e Individual
Como en otras teorías teleológicas, las consecuencias de las acciones son cruciales para determinar su valor moral. El principal desafío reside en conciliar la felicidad individual con la felicidad general. Un individuo podría actuar egoístamente para satisfacer sus propios deseos a expensas del bien común, lo que aparentemente imposibilitaría la coexistencia de ambos tipos de felicidad. Los utilitaristas abordan este problema de dos maneras:
- Jeremy Bentham concibe la felicidad individual como una cantidad que, sumada a la de los demás, resulta en una cantidad total de felicidad colectiva.
- John Stuart Mill, en cambio, presenta la felicidad como una cualidad más que como una cantidad. Argumenta que la felicidad de cada ser humano depende de la felicidad de los demás, de modo que un individuo no puede ser feliz si los demás no lo son.
La Ética Kantiana
Fundamentos de la Obligación Moral
La ética de Kant es una ética del deber, o deontológica. Según Kant, la bondad de una acción no puede depender de sus consecuencias, ya que cada persona podría interpretar el bien de manera diferente según sus experiencias. Kant introduce el concepto de "buena voluntad", que se refiere al uso de la razón para determinar cuándo una acción es buena en sí misma, independientemente de sus resultados.
El Imperativo Categórico
Para Kant, la ley moral se expresa como un imperativo, ya que impone una obligación. Sin embargo, no se trata de una orden para alcanzar un fin específico o un bien supremo. Las acciones no son medios para lograr fines, como en las éticas teleológicas, sino que deben realizarse porque así lo dicta nuestra razón práctica.
Los imperativos categóricos se distinguen de los imperativos hipotéticos en que estos últimos ordenan algo como medio para alcanzar un fin propuesto. El imperativo categórico, por el contrario, no busca un fin más allá de su propio cumplimiento, por respeto a la ley moral misma. Es un fin en sí mismo.