Tendencias Narrativas en la Literatura Española: 1940 hasta hoy

Enviado por Chuletator online y clasificado en Lengua y literatura

Escrito el en español con un tamaño de 6,76 KB

Años 40: Posguerra y Diversidad de Corrientes

Conformismo y Tradición

Se observa una corriente conformista, tradicional en estética e ideología, que se manifiesta en la novela rosa y el realismo tradicional. Esta tendencia no refleja el malestar social de la época.

Existencialismo y Desencanto

La corriente existencial expresa, de forma intimista, el malestar del momento. Los personajes se muestran desorientados y disconformes con el mundo que les toca vivir. Obras como La familia de Pascual Duarte (con tintes tremendistas) y Nada (existencial) son ejemplos de esta tendencia. El tema fundamental de la narrativa es la incomunicación y el desencanto en los hechos cotidianos, similar a lo que ocurre en la poesía desarraigada. Carmen Laforet, con Nada, destaca en esta corriente. Los factores que influyen en esta época son la censura y el exilio de autores como Ramón J. Sender y Max Aub. El Premio Nadal, por otro lado, sirve como estímulo para la creación literaria.

Tremendismo y Sordidez

El tremendismo refleja los aspectos más sórdidos de la sociedad, proponiendo una reflexión sobre la condición humana. Camilo José Cela, con La familia de Pascual Duarte, es un exponente de esta corriente. La obra narra la vida de un condenado a muerte que justifica sus actos a través de su relato.

Años 50: La Novela Social

Se produce una leve apertura en España, lo que da lugar a un nuevo modelo narrativo. Participan escritores que no vivieron la Guerra Civil y que tienen un compromiso de denuncia frente a la censura que sufre la prensa. Muchas novelas se publican en el extranjero. Se observan referencias a novelistas italianos e ingleses. Hay dos grupos de autores: Madrid y Barcelona. La colmena, de Camilo José Cela (1951), marca la transición entre la novela existencial y la social. Se caracteriza por:

  • Concentración espacio-temporal: la acción transcurre en pocos días y en espacios limitados.
  • Personaje colectivo representativo.
  • Narrador objetivo.
  • Lenguaje sencillo.

Temas recurrentes:

  • Mundo rural: Dos días de septiembre (1962).
  • Vida urbana: La colmena (1951).
  • Vida burguesa: El Jarama (1956).
  • Conflicto obrero: Central eléctrica (1968).

Años 60: Experimentación y Renovación

Contexto Histórico

Entre 1960 y 1975 se da una transformación que marca la transición de la dictadura a la democracia. Se caracteriza por la emigración, el turismo, el progreso económico, el auge de la clase media y la modernización de la Iglesia. En 1966 se promulga la Ley de Prensa, que suaviza la censura.

Transformaciones Literarias

  • Agotamiento de la literatura social.
  • Referencias a autores innovadores de la literatura universal (Joyce y Kafka).
  • Auge de la literatura hispanoamericana.

Como consecuencia, surge la narrativa experimental. A partir de 1975, se observa:

  1. Caída del experimentalismo.
  2. Vuelta a un estilo más realista.
  3. La literatura como objeto de consumo.

La Novela Experimental

La apertura del país posibilita el conocimiento de otras literaturas:

  1. Innovadores de principios de siglo (Joyce, Kafka y Proust).
  2. Novela hispanoamericana (Cortázar, García Márquez, Juan Rulfo).

Nuevas Técnicas y Estilo

  • Novelas de argumento reducido y final abierto.
  • Unión de lo real y lo fantástico.
  • Nuevos puntos de vista narrativos (narrador múltiple, perspectivismo, monólogo interior, narrador en segunda persona).
  • Alteración del orden lineal.
  • Juegos con el lenguaje.
  • Tiempo de silencio, de Luis Martín Santos (1961).

Autores

Se distinguen diversos grupos de edad:

  • Autores que participaron en tendencias anteriores: Generación del 36 (Gonzalo Torrente Ballester, Miguel Delibes, Camilo José Cela).
  • Autores de medio siglo (Luis Martín Santos, Juan Marsé, Carmen Martín Gaite).
  • Generación del 68 (Eduardo Mendoza).

Características desde 1975: Diversidad de Géneros

  • Ambientes urbanos.
  • Personajes con conflictos individuales.
  • Influencias extranjeras: anglosajona e hispanoamericana.
  • Observación de subgéneros para enriquecer las tramas (policíaco).

Poemática

  • Combinación de la narración con el intimismo de la lírica: recreación lírica de espacios, tiempos y objetos.
  • Narración en primera persona, presencia del monólogo interior.
  • Profundidad psicológica.
  • Los recuerdos y la memoria como refugio ante el paso del tiempo.
  • Lenguaje simbólico.
  • Lluvia amarilla, de Julio Llamazares.

Novela Histórica

Es uno de los géneros que más atrae a los lectores en la actualidad. Estas novelas parten de una base histórica que se combina con la ficción. Las épocas más recreadas son la antigua Roma, la Edad Media y, en España, la Guerra Civil, contribuyendo a la memoria histórica reciente y a la comprensión del presente. Ejemplos:

  • Inés y la alegría, de Almudena Grandes.
  • La catedral del mar, de Ildefonso Falcones.
  • Dime quién soy, de Julia Navarro.
  • Yo, Julia y El circo máximo, de Santiago Posteguillo.

Memorias

Estas narraciones parten de la experiencia vital y la recreación de los recuerdos del protagonista, que busca encontrar o dibujar su identidad. Rasgos:

  • Combinación de autobiografía y ficción, rompiendo las reglas del género.
  • Recreación del mundo interior de los personajes, con reflexiones existenciales.
  • Mezcla con otros géneros, como la metanovela o la novela de testimonio.
  • El cuarto de atrás, de Carmen Martín Gaite.
  • Tiempo de vida, de Marcos Giralt.

Intriga y Suspense

Este subgénero narrativo se inicia con La verdad sobre el caso Savolta, que recupera la trama como elemento central de la novela, tras la experimentación de los años 60. Las novelas policíacas tienen estos rasgos:

  • Todo gira en base a la investigación de un caso criminal.
  • El protagonista es el investigador o policía al que se le asigna el caso. Suelen ser personajes que viven una crisis personal, irónicos, observadores e inteligentes.
  • Se ambientan en espacios urbanos y realistas.
  • Ambigüedad moral.
  • La verdad sobre el caso Savolta, de Eduardo Mendoza.
  • El alquimista impaciente, de Lorenzo Silva.
  • El guardián invisible, de Dolores Redondo.

Entradas relacionadas: