Temas y Corrientes de la Poesía Renacentista Española

Enviado por Chuletator online y clasificado en Griego

Escrito el en español con un tamaño de 3,6 KB

El Paisaje Ideal y las Fuentes Clásicas en la Poesía Renacentista

El paisaje renacentista es apacible, agradable, armoniosa, poéticamente idealizada con arreglo a los presupuestos estéticos del Neoplatonismo.

Los elementos que conforman ese paisaje (locus amoenus) son: espesa arboleda poblada de sauces, robles; espesa arboleda poblada de sauces, robles y encinas por cuyos troncos trepa la hiedra hasta lo más alto y a cuya sombra crecen flores. De una fuente cercana brota un arroyo de agua cristalina que discurre lentamente por el prado produciendo un manso ruido.

Referencias Clásicas: Virgilio y Ovidio

Los referentes más directos están en las Bucólicas y las Geórgicas del poeta latino Virgilio (sufrimiento pastoril). La mitología impresionó al hombre renacentista por su desbordante vitalismo y belleza, y así se descubre en las Metamorfosis de Ovidio.

Los mitos clásicos cumplen función estética, ornamental, pero no solo eso: cuando acude a ellos para inspirarse, el poeta escoge aquellos episodios cuyo significado mantenga alguna relación con su propio conflicto sentimental (función simbólica), como Apolo y Dafne u Orfeo y Eurídice.

Corrientes Poéticas del Renacimiento Español

Poesía Petrarquista

El primer Renacimiento (reinado de Carlos I, primera mitad del siglo XVI), y encabezados por Boscán y Garcilaso, destacan Diego Hurtado de Mendoza, Gutierre de Cetina y Hernando de Acuña.

En el segundo (reinado de Felipe II, segunda mitad del siglo XVI) sobresale el sevillano Fernando de Herrera (1534-1597), hombre culto e introvertido. Destacan asimismo, Francisco de Figueroa, Francisco de la Torre, Francisco de Aldana y Luis Barahona de Soto.

Poesía Ascético-Moral

Durante el segundo Renacimiento (segunda mitad del siglo XVI) se produce, favorecida por el clima de espiritualidad que vive la época, la cristianización de las tendencias paganizantes que habían inspirado las creaciones literarias de la primera mitad del siglo.

Como consecuencia de ello aparecen dos manifestaciones poéticas de carácter religioso: la mística y la poesía ascético-moral. Confluyen, cristianizadas, una amalgama de corrientes filosóficas cuyo tratamiento literario se centra en la huida del hombre de este mundo y en su deseo de trascender.

La Prisión del Mundo y el Camino a la Trascendencia

El hombre vive encarcelado en la prisión del mundo, donde imperan el caos y la discordia, los vicios y los bienes engañosos.

Para evadirse de la cárcel terrenal debe iniciar un recorrido purificador a través de:

  • La práctica de la virtud,
  • la dedicación al estudio,
  • el contacto directo con la naturaleza que constituye el refugio acogedor.

El Motivo del Beatus Ille

La expresión beatus ille, con la que el poeta latino inicia esa conocida obra, y cuyo significado es 'feliz aquél', ha dado nombre a un motivo que cobró rápidamente gran auge en la España del siglo XVI (Garcilaso, Fray Luis de León).

Neoplatonismo y Contemplación

Todas estas realidades participan de la divinidad; son destellos de las realidades supremas y absolutas. De esa manera, cuando el hombre se desentiende del mundo, ejercita la virtud y cultiva su espíritu, atisba, vislumbra esas realidades supremas que le hacen recordar su esencia última, su origen divino.

Ese proceso de purificación ascética que conduce a un apacible estado de quietud, propicia la elevación del espíritu hasta la contemplación de las ideas de bien, verdad, belleza y...

Entradas relacionadas: