Tectónica de Placas: El Rompecabezas de la Tierra y la Evidencia Fósil

Un Puzle Interactivo: La Teoría de la Deriva Continental y la Tectónica de Placas

A principios del siglo XX, el científico alemán Alfred Wegener se sorprendió no solo por la manera en que parecen encajar las costas sudamericanas y africanas, sino también por las coincidencias existentes en sus registros fósiles. En 1912, presentó su teoría de la deriva continental, en la que proponía que ambos continentes se estaban separando. Tres años más tarde, publicó su obra "El origen de los continentes y océanos", donde sugería que los continentes se habían formado a partir de un único supercontinente primitivo al que llamó "Pangea". Este supercontinente se fue fracturando en diversos trozos, dando lugar a los continentes actuales.

Los continentes se mueven, pero no de la forma que Wegener creía. Sus propuestas y otras aportaciones han dado lugar al modelo que hoy conocemos como "tectónica global", la respuesta que buscábamos sobre el suelo que pisamos.

Los Fósiles: Testigos del Pasado

Los fósiles son evidencias petrificadas que nos indican qué otras especies han poblado nuestro planeta. Los fósiles más frecuentes son restos del cuerpo, como huesos, pero también hay de plantas, partes blandas del cuerpo, huellas o excrementos. Se estima que se fosiliza un hueso de cada mil millones y solo una de cada diez mil especies ha dejado restos.

Y Sin Embargo, Se Mueven: La Litosfera y las Placas Tectónicas

La corteza y el manto superior forman una capa fría y rígida que resulta quebradiza ante las deformaciones, lo que le ha valido el nombre de litosfera (esfera rocosa). El grosor de la litosfera supera los 200 km. La litosfera no está constituida por una única pieza, sino que se encuentra fracturada en algo más de una docena de grandes trozos, o placas, de diferentes tamaños.

Procesos de Convergencia y Divergencia

• Convergencia: Si dos placas se aproximan entre sí, sus bordes presionan enérgicamente el uno contra el otro. De este modo, una placa acaba por hundirse debajo de otra mediante un proceso de subducción, destruyendo parte de la litosfera de una de las placas, la cual se hará cada vez más pequeña. También puede ocurrir que las dos placas choquen y una de ellas se arrugue contra la otra, originando así grandes cadenas montañosas.
• Divergencia: Si dos placas se separan entre sí, es necesario el aporte de material magmático para llenar el hueco que queda entre ambas. Esto permite generar nueva litosfera. Es lo que ha ocurrido estos últimos 160 millones de años entre las placas sudamericana y africana, provocando la formación del océano Atlántico.
• Fallas transformantes: Las placas se mueven de lado, rozándose, de modo que ni se destruye ni se crea litosfera.

Los bordes de las placas son zonas muy inestables y están sometidas a enormes tensiones. Por ello, son frecuentes los volcanes y los terremotos en estas áreas.