El Teatro en la Edad Media: La Celestina y el Sintagma Nominal

El Teatro en la Edad Media: La Celestina

Hasta el siglo XV, periodo en el que surgen autores como Juan del Encina, apenas existen textos teatrales en lengua castellana. La obra dramática más antigua que se conserva es el Auto de los Reyes Magos, escrito hacia el siglo XII. A finales del siglo XV se publica La Celestina, una de las obras maestras de la literatura castellana.

Autoría de La Celestina

La Celestina es fruto de dos autores: un autor desconocido que escribió el primer acto y Fernando de Rojas, que compuso el resto. Esta obra narra los amores entre Calisto y Melibea, favorecidos por Celestina, una vieja alcahueta y hechicera.

Argumento de La Celestina

Calisto queda prendado de la belleza de Melibea, que lo rechaza en su primer acercamiento. Aconsejado por su criado Sempronio, Calisto recurre a los servicios de Celestina, una vieja hechicera quien consigue unir a los jóvenes con sus artimañas. Como pago, Calisto regala una cadena de oro a la vieja. Celestina se niega a repartir las ganancias con los criados que le han ayudado y estos la matan; poco después son ajusticiados. Los jóvenes amantes siguen viéndose en secreto hasta que una noche Calisto cae de una escalera y muere. Melibea, al verlo, se suicida y deja a sus padres sumidos en el llanto.

Personajes de La Celestina

Tienen una naturaleza compleja, a veces contradictoria, y están llenos de matices característicos que anuncian la literatura renacentista.

• Celestina: alcahueta y hechicera. Su comportamiento y forma de hablar muestran a una mujer persuasiva y astuta que convence y manipula hábilmente a los personajes que la rodean.
• Calisto: pese a que representa al enamorado, es un ser pasivo y egoísta cuyo único fin es disfrutar del amor de Melibea.
• Melibea: aunque al principio se resiste a las pretensiones de Calisto, tiene una actitud resuelta. Ella dispone los encuentros con Calisto, le entrega su amor y finalmente decide terminar con su vida.
• Pármeno y Sempronio: ambos criados se mueven por intereses materiales; de hecho, no dudan en matar a Celestina. Solo Pármeno pretende proteger a su señor al principio, pero desiste al ver que va contra sus intereses.
• Elicia y Areúsa: son prostitutas y deben obediencia a Celestina. Se unen a Pármeno y Sempronio a instancias de esta, pero al morir los criados y Celestina, promueven la venganza.
• Pleberio: es un padre que vive entregado a su familia y que confía en su hija. El desenlace le mueve a pronunciar un monólogo final que recoge las ideas esenciales de la obra.

La Celestina como Comedia Humanística

La Celestina es una obra de difícil clasificación en un género concreto. Aunque tiene una estructura teatral evidente, su gran extensión y el tratamiento del tiempo y del espacio hacen muy difícil su representación. Se trata de la adaptación de un género cultivado en latín, la comedia humanística, un tipo de teatro pensado para ser leído en lugar de representado.

Finalidad de La Celestina

La finalidad de La Celestina es, en apariencia, moralizante: se pretende mostrar los efectos del amor irresponsable. Fernando de Rojas afirma en el prólogo haber escrito la obra para criticar los actos irracionales de los enamorados. Esta idea coincide con el amor pasional e irreflexivo que encarna la figura de Calisto. Quizás por eso los personajes se convierten en víctimas de sus propias acciones. Además, ofrece una visión pesimista de la existencia. El autor expresa su concepción de la vida, una lucha continua que causa dolor y desventura. Nada existe, según sus palabras, que no esté regido por los enfrentamientos y el dolor.

El Sintagma Nominal: La Función de Complemento

Los complementos son los constituyentes que acompañan al núcleo del sintagma nominal y completan o precisan su significado. Puede ser:

• Un adjetivo, ya sea determinativo o calificativo.
• Un sintagma preposicional.
• Un sintagma nominal en aposición.

El Adjetivo Calificativo

El adjetivo calificativo es una clase de palabras que expresa cualidades, estados, características o propiedades de los sustantivos. Cuando el adjetivo calificativo acompaña a un sustantivo dentro del sintagma nominal, es complemento del nombre. Cuando no forma parte del sintagma nominal, puede desempeñar la función de atributo o de complemento predicativo.

Concordancia de los Adjetivos Calificativos

Los adjetivos toman el género y el número del sustantivo al que acompañan. Algunos adjetivos tienen una única terminación para el masculino y el femenino.

Tipos de Adjetivos Calificativos

• Adjetivos explicativos o epítetos: señalan una cualidad propia del sustantivo y tienen un valor simplemente descriptivo.
• Adjetivos especificativos: indican una cualidad añadida, no propia del sustantivo, que permite distinguirlo de entre otros de su misma clase.

Posición del Adjetivo Calificativo

Los adjetivos que expresan origen, pertenencia o relación van obligatoriamente detrás del sustantivo. Los adjetivos que nombran una cualidad pueden anteponerse o posponerse al sustantivo.

Grados del Adjetivo Calificativo

Indica la intensidad con que el adjetivo expresa una cualidad.

• Grado positivo: solo se enuncia la cualidad.
• Grado comparativo: se compara esa cualidad con otra o se compara esa misma cualidad con otro sustantivo distinto. Puede ser de superioridad (más que), igualdad (tan como), inferioridad (menos que) o excelencia (el más).
• Grado superlativo: se eleva al máximo esa cualidad. El superlativo se construye añadiendo al adjetivo las terminaciones -ísimo o -érrimo, o anteponiéndole un adverbio o un prefijo de valor intensivo.

Superlativos en -érrimo

Algunos adjetivos poseen un superlativo acabado en -érrimo, de origen latino. Estas formas cultas prácticamente solo se emplean en la lengua escrita, y algunas conviven con las construidas mediante el sufijo -ísimo.

La Grafía H

• Se escriben con h inicial las palabras que empiezan por hia-, hie-, hue-, hui- y las que empiezan por herm-, horm-, horr-, hosp- y hum- ante vocal, excepto ermita y sus derivados.
• Se escriben con h inicial las palabras que contienen los elementos hidro-, helio-, hiper-, hipo-, hetero-, homo-, hexa-, hepta-, hecto- y hemi-.
• Se escriben con h los compuestos y derivados de palabras que empiezan por h, excepto algunos derivados de huevo, hueso, huérfano y hueco.