Spinoza: Democracia, Libertad y Estado Natural

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Autor: Spinoza es un filósofo moderno (del siglo XVII) que defiende la democracia como forma de gobierno y tiene influencia de Descartes, aunque también criticó el cartesianismo.

Tema: La democracia es la mejor forma de gobierno, ya que respeta la libertad de opinión y expresión, y es acorde con la naturaleza.

Ideas Principales:

  1. Es necesaria la libertad de pensamiento y expresión del hombre para conservar el poder del Estado y vivir en concordia entre las distintas opiniones.
  2. La mejor forma de gobierno es la democracia porque es la más compatible con la naturaleza.
  3. La ley está establecida y bajo la responsabilidad de los hombres que más votos obtuvieran de forma democrática.
  4. La falta de libertad aleja al hombre de lo natural, obligándole a gobernar con más violencia.

Relación entre las Ideas:

Existen dos requisitos de la democracia (ideas 1 y 2): la libertad de pensamiento y expresión y la necesidad de la elaboración de unas leyes que permitan la convivencia. También se presenta una tesis fundamental del pensamiento político de Spinoza (idea 3): la democracia es la forma de estado que nos viene dada por la naturaleza. De todo esto se saca una conclusión (idea 4), y es que la carencia de libertad de expresión necesita la violencia porque esto es contrario a la naturaleza.

Explicación de las Ideas

Para Spinoza, la forma más justa de gobernar es la democracia porque es la más racional, mientras que la más injusta y arbitraria es la tiranía. Spinoza no solo defiende la tolerancia religiosa, sino principalmente la libertad de expresión: a todo el mundo se le debe permitir expresar su opinión. La tolerancia debe permitirse hasta un límite: el bienestar público. No se pueden permitir palabras que inciten a la rebelión, incumplir leyes y perturbar la paz. Puesto que es inevitable la libertad de pensamiento, el Estado debe conceder la libertad de expresión, que no supone un riesgo para el Estado, sino que lo completa, siendo la base de la concordia entre los ciudadanos. De ahí que, según Spinoza, el Estado más violento sea el que niega la libertad de expresión. El contenido del texto es vigente en tanto que hoy en día la libertad de pensamiento junto con la de expresión son concreciones irrenunciables de la libertad individual. En este sentido, esa necesidad de libertad de la que hablaba Spinoza ha sido recogida en la Declaración Universal de los Derechos Humanos. También el texto es vigente en tanto que los estados autoritarios son los más violentos, pues ejercen una represión sobre los ciudadanos no permitiendo opiniones contrarias y acallando a los disidentes.

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