El Soldado Cristiano: Estrategias para la Batalla Espiritual

Algunas personas son inteligentes en conocerse a sí mismas, pero no tan inteligentes en conocer a sus oponentes, y hay otros que son de la otra manera. La victoria está asegurada cuando se conoce al enemigo y se conoce a uno mismo.

Parte del ejercicio instalado en los mandatos para la familia real de Dios envuelve una disciplina rigurosa. Cada creyente es un **soldado cristiano** de tiempo completo que se está moviendo hacia adelante en el plan de Dios. Dios no es el único general con una estrategia. El enemigo tiene una estrategia muy buena también. La estrategia es la teoría y los planes de las operaciones hacia un objetivo. El objetivo divino para el creyente es ejecutar el **plan de Dios** y glorificar a Dios. El objetivo malvado de Satanás es oponerse, impedir y desbaratar el plan de Dios a todo costo y rendir al enemigo impotente. Las tácticas enseñan el uso de la fuerza armada en la batalla, mientras que la estrategia enseña el uso de la batalla como el objetivo de la guerra. La estrategia decide dónde actuar, la logística trae la tropa a este punto, y las tácticas deciden la manera de ejecución y colocación de las tropas. Por ejemplo, la cruz es donde Cristo Jesús ganó su victoria estratégica. La estrategia preparó el terreno para que todos sus discípulos, de allí en adelante, puedan ejecutar la victoria en la etapa táctica. Por lo tanto, al creyente está asignada la responsabilidad de la victoria táctica.

Su posición no es solamente la compañía y estar bajo los colores de su batallón, pero también su fila y posición. Él no se tiene que extraviar ni hacia la izquierda ni hacia la derecha de su fila; si no, él deja un espacio para que el enemigo se infiltre sigilosamente en sus posiciones. No hay ninguna excusa para desertar, ya que no solamente le pone a uno en peligro, sino también al batallón, la compañía, y el país. No hay armamento para cubrir la espalda, significando que el voltear y correr trae la muerte. Así es como el soldado sabe en qué dirección ir cuando está en medio del combate y la confusión. Él siempre debe ser el foco del creyente en todas las circunstancias de la vida. Si nosotros quitamos la vista en tiempo de confusión, vamos a acabar perdiéndonos en una masa de humo, análogo a la subjetividad. Una vez que tenemos nuestros ojos enfocados sobre nosotros, la batalla empieza a hundirse. ¡Ser subjetivo agrega a las fuerzas contra nosotros, ya que no solamente estamos combatiendo las fuerzas externas, sino que ahora vienen los adversarios internos que solamente pueden ser combatidos con la **sabiduría y el poder de Dios**!

Nuestro enemigo, **Satanás** y su reino de oscuridad, nos impide seguir adelante apuntando a nuestros pecados y fracasos de nuestra vieja y pecaminosa naturaleza. Y Satanás es muy inteligente en seleccionar el tiempo más ventajoso para su ataque y usted puede estar seguro de que él sabe cuándo es más probable prevalecer. El enemigo va a venir y va a colgar colores falsos para extraviar al creyente. Por lo tanto, ¡Satanás conoce el mejor tiempo para ejecutar un ataque contra el creyente positivo! Nuestro enemigo gradualmente se acerca hacia el alma para hacer su ataque. Por lo tanto, nosotros también necesitamos un conocimiento íntimo de cómo trabaja nuestro enemigo para que podamos resistir su oposición. El enemigo va a emplear cualquier cosa para poder sacar lentamente al creyente positivo del plan de Dios. Puede empezar con solamente un pensamiento destructivo en un tiempo oportuno, disparado hacia el interior de la mente por un amigo, una duda, etc. Una vez que esté permitida la libertad de errar en la mente, este pensamiento empieza a crecer rápidamente y se mueve de la mente hacia la lengua, volcándose hacia el interior del alma de otra persona, siguiendo el proceso. La supervivencia, el crecimiento, el avance y la continuación parecen como una enfermedad infecciosa y mortal. El enemigo no solamente intenta proyectar cosas hacia el interior de la mente del creyente, sino que su trabajo más grande es tener cuidado de que el punto de vista doctrinal quede fuera de nuestra mente. Satanás es el maestro en usar a otros y, por lo tanto, siempre tiene tropas frescas para traer a las líneas del frente. Usted nunca piense que el enemigo se ha retirado porque las cosas están yendo bien. Actualmente, esto es lo que el enemigo desea que el creyente piense, que él se ha retirado y también que ha sido derrotado. Pensar así solamente le da la ilusión al creyente de que él ha asegurado una victoria que realmente no ha asegurado. Satanás de buena voluntad toma la apariencia de una pérdida temporal para un resultado más grande. Él sabe que si usted piensa que todo está bien, usted va a bajar la guardia, y ahí viene el gancho izquierdo.

El soldado cristiano siempre tiene que tener fresca en su mente la virtud de su llamamiento. No permita que la **palabra de Dios**, el plan de Dios o los otros creyentes se hagan algo común en su vida. Hay una batalla para pelear cada día. El conflicto no va a parar hasta el Rapto o el tiempo de nuestra muerte física. Pero esto no es para desanimarlo, porque el poder y la fuerza de Dios están prometidos para cada creyente que decide estar firme y considerar un honor sufrir por Cristo. Suena tan inspirador, pero es muy fácil que un soldado débil se olvide. Un soldado débil es uno en que su fe está enterrada bajo dudas, culpa, condenación, confusión, ignorancia, etc., todos previniendo una acción efectiva.

Un hombre determinado a obedecer a Dios nunca renuncia a su propósito, sino que siempre continúa hacia adelante a pesar de lo que ve en la escena de la batalla. El soldado con **fe fuerte** sabe que la apariencia inmediata de las cosas va a cambiar dentro de poco una vez que el humo y la confusión se establezcan. Por eso él no descansa por lo que ve, sino por la fe que tiene en la sabiduría de Dios y el poder maravilloso de Dios. ¡El buen soldado siempre aguanta!

Todas las guerras están basadas en el engaño, sin embargo, indiferentemente de lo que parece ser en ese tiempo, el buen soldado continúa avanzando hacia el objetivo, el llamamiento, ¡la gloria ascendente de las recompensas eternas! El soldado cristiano cree que él es más que un conquistador aun antes de que entre en el conflicto. Porque Dios lo dijo. Pero suponiendo que la victoria estratégica ha sido asegurada, la teoría no exige la victoria táctica del creyente. La victoria táctica del soldado tiene que incorporar la estrategia y los movimientos a mano al mismo tiempo. Si los movimientos del soldado son incompletos o inadecuados debido a la culpa de su parte por no alinearse al poder y bienes divinos, entonces la victoria táctica no está asegurada. El soldado cristiano tiene que conceder a una vida acompañada con muchas penalidades y dificultades si él desea traer gloria a Cristo.

El soldado cristiano tiene que aprender a soportar lo siguiente:

• Si alguna cosa le quita del plan de Dios, Dios le va a pedir que usted se separe de él.
• Las penalidades que vienen porque Dios se está retirando del creyente. Esto no es decir que Dios abandona al creyente, sino más bien, es Dios complementando al creyente con la oportunidad para depender en el poder más grande del mundo, la palabra de Dios.

Pero todos los soldados tienen que tolerar lo que les sucede, en el puesto y estación adonde él ha sido colocado, hasta que Dios ve apropiado removerlo. Desafortunadamente, muchos soldados no aceptan su asignación y nunca avanzan en el plan de Dios.

La vida de un soldado no consiste solamente en penalidades. También hay recompensas, triunfo, y gran victoria para el soldado que resiste hasta el fin de su asignación. Para el soldado cristiano, hay una recompensa grande y honor, y también alegría intensa, en llevar a cabo su llamamiento para glorificar a Dios. Pero esto toma disciplina y gran resistencia, dedicación y devoción. Esto es parte de las reglas básicas del conflicto: toda la gracia de Dios y las manifestaciones posibles siempre son opuestas por el enemigo. ¡Siga avanzando, porque su recompensa es grande!

La Doctrina del Soldado Cristiano: Parte 2

Afirmando el Manto del Guerrero Espiritual

¿Cómo es que el soldado cristiano afirma el manto del guerrero espiritual? El guerrero espiritual toma acción, no reacciona. Él no intenta evitar las lecciones difíciles, sino que más bien extrae de ellas todo lo que él puede para el adelanto del objetivo principal: la **glorificación de Dios**. Como es con el soldado militar, una rutina diaria de entrenamiento disciplinado asegura el conjunto apropiado de la mente.

El Entrenamiento del Soldado Cristiano

El entrenamiento de un soldado es multifacético y cada frente debe ser muy conocido de modo que el soldado pueda responder a la llamada apropiada, al tiempo apropiado, y en la manera apropiada. Hay un procedimiento exacto y preciso para asegurar cada meta deseada. El procedimiento apropiado siempre está basado en la forma en que Dios hace las cosas a través de Su poder divino. Nuestra habilidad humana nunca es una opción hacia el objetivo principal. Como los soldados militares no inventan sus propios proyectos, el soldado espiritual debe depender del **plan de Dios**. Esto puede parecer fácil, pero está en contraste directo con la naturaleza vieja y pecaminosa (NVP) del hombre. La naturaleza vieja y pecaminosa intenta controlar. Sin embargo, nosotros intentamos controlar, pero nunca podemos hacerlo, puesto que es el monopolio del Señor Jesucristo (SJC) el que controla la historia.

El guerrero, por lo tanto, debe abandonar su deseo de controlar sus circunstancias, su vida, su mundo, etc. Nuestra unidad de acción debe alinearse con el control del general y el jefe de mando, el SJC. El guerrero espiritual no acepta ciegamente cualquier cosa, sino que es disciplinado y exacto en la ejecución de su tarea actual y en la ejecución de la vida espiritual. El soldado efectivo no está atado a las cosas de este mundo, sino que vive su vida de acuerdo con el poder interno que recibe de Dios.

La Importancia de la Doctrina Bíblica

Hay un sonido y un llamado distinto enviado al soldado para la propuesta a mano, y el soldado debe ser completamente entrenado para responder apropiadamente. La exactitud de los distintos sonidos está basada en la **percepción, la metabolización, y la aplicación (PMA) de la doctrina bíblica (DB)** resultando en un gran impulso para ejecutar el plan de Dios para su vida. Si el clarín ofrece un sonido indistinto, ¿quién se va a preparar para la batalla? Desafortunadamente, hay muchos cristianos sin capacitación que responden a un sonido indistinto. El sonido, sea la llamada del clarín o la orden por voz, debe ser escuchada sobre el ruido (i.e., las distracciones de la vida) para tomar acción apropiada. Así que el soldado debe ser entrenado a distinguir qué sonidos requieren qué acción. En el ejército, hay una llamada de la trompeta para juntarse, para equiparse, y para alinearse. Y cuando nosotros crecemos espiritualmente, el **"sonido"** o llamado crece más fuerte y lo discernimos mejor.

Los detalles son dados con precisión y exactitud como parte de la palabra de Dios para revelar la importancia de una cosa correcta hecha en una manera correcta. El poder pertenece a Dios y las consecuencias deben ser entregadas a Dios. El soldado no controla el llamado, sino que responde al llamado.

Y mucho del entrenamiento ocurre cuando pasamos necesidades. Todos los detalles en la vida, las cosas menores y pequeñas, nos entrenan para los acontecimientos mejores. La disciplina diaria es necesaria para avanzar hacia adelante en el área adonde estamos entrenados. Y aunque todos los creyentes están en el servicio cristiano a tiempo completo, no todos han recibido su marca de aprobación. Solamente después de recibir la marca estamos listos para ir a la guerra. Las habilidades espirituales consisten en tres cosas:

1. La percepción de la doctrina bíblica.
2. La metabolización de la doctrina bíblica.
3. La aplicación de esa doctrina para ejecutar el plan de Dios.

Ponerse el manto del soldado cristiano indica fidelidad. Constantemente usando los bienes divinos de Dios. El entrenamiento constante es necesario para los cambios y desafíos constantes con que nos encontramos. Y nuestra victoria es directamente dependiente de nuestro entrenamiento. Hay nueve principios de guerra militar que se pueden pasar y aplicar en la guerra espiritual:

1. El Objetivo: Este principio constituye la guía para la interpretación de órdenes, para la formulación de decisiones y para el empleo del poder disponible hacia ese objetivo principal.
2. La Ofensiva: La ofensiva se toma para asegurar la victoria, mientras que la defensiva previene la derrota. Aquí el gran enemigo son las emociones de uno mismo. En las victorias espirituales, el poder divino está en vista cien por ciento del tiempo. Empezamos por neutralizar el poder de las fuerzas oponentes en la vida espiritual usando el rebote, porque el poder divino solamente está disponible a los que están llenos del Espíritu Santo.
3. La Masa: La masa se refiere a la fuerza del combate. Uno tiene la opción de usar esta fuerza del combate cuando el esfuerzo principal está utilizado en el tiempo y lugar apropiado hacia el propósito definitivo.
4. La Economía de la Fuerza: En el mundo espiritual, esto pone énfasis a la privacidad ofrecida en nuestra posición como sacerdocio real para la preparación de contactos directos.
5. El Movimiento: Un ejemplo son las sorpresas dadas a Satanás durante esta era de la iglesia por medio de las victorias tácticas basadas en la igualdad de privilegios y oportunidades y asegurados por los creyentes de todas las diferentes culturas. Siendo soldados cristianos, nosotros debemos conocer los principios de guerra, y también saber que Satanás está bien familiarizado con ellos. Nosotros siempre tenemos que estar preparados contra el principio de la sorpresa porque le da la ventaja al enemigo.
6. La Sorpresa: La seguridad dicta que nos debemos proteger del enemigo a toda costa. Nosotros debemos tomar todas las medidas disponibles para no ceder terreno al enemigo. No importa qué problemas nosotros tengamos, Dios quiere que nosotros sepamos que estamos mantenidos por el poder de Dios. Satanás solamente puede ser victorioso si nosotros lo dejamos.
7. La Simplicidad: En el mundo espiritual, esto hace referencia a Dios Padre quien es el autor del plan, a Dios el Hijo/Cristo Jesús que provee la entrada al plan, y a Dios el Espíritu Santo quien provee el poder para ejecutar el plan.
8. La Cooperación: Implica que todos los elementos están trabajando juntos para llevar a cabo la operación. Esto consiste en interpretaciones inteligentes hacia la ejecución de acuerdo con el espíritu y las intenciones de la persona que tiene la autoridad que está dando las órdenes.

En recopilación, vamos a aplicar una palabra a cada uno de los nueve principios:

• El Objetivo: el plan
• La Ofensiva: la victoria
• La Masa: la fuerza del combate.
• La Economía de Fuerza: ejecución
• El Movimiento: el gran impulso
• La Sorpresa: el ataque
• La Seguridad: el apoyo
• La Simplicidad: la exactitud
• La Cooperación: el trabajo en equipo

Los Cuatro Frentes de Batalla del Guerrero Espiritual

El guerrero espiritual está entrenado en todos los frentes de batalla. Primero hay el frente personal que es nuestra participación en las batallas espirituales internas de la vida diaria que supone las pruebas de los pensamientos. Segundo es el frente interpersonal que abarca nuestros esfuerzos para ayudar a otros que están bajo ataque. También incluye la manera en que nosotros desafiamos y encontramos esos ataques. Este tipo de frente puede incluir cualquier cosa desde uno-a-uno hasta grupos pequeños. El tercer frente es la iglesia local. Este campo de batalla está basado en la **guerra espiritual** en la iglesia local. Puede ser centrado en una persona o en un grupo pequeño de gente, pero el impacto afecta la iglesia entera. El cuarto es el frente sistemático que lucha en contra de los sistemas compuestos de nuestras sociedades, culturas, y sistemas políticos, económicos, y religiosos. La guerra a este nivel consiste en nuestra lucha en contra del punto de vista que no es piadoso con respecto a las culturas que intentan controlar y formar nuestras vidas. En vista de los varios frentes de la batalla, el soldado nunca tiene que caminar casualmente en instrucciones y disciplina, sino que tiene que marchar hacia adelante. Marchar pone énfasis en la importancia de acumular máximo tiempo para estar lleno del Espíritu.

Tener conocimiento de la doctrina no es suficiente. Nuestro conocimiento debe ser probado; nuestro entrenamiento debe ser ejercitado. La guerra espiritual ofrece al soldado completamente entrenado la oportunidad de luchar en el lado del Señor Jesucristo hacia el objetivo de glorificarlo a Él. ¡Qué honor ser parte de este ejército! ¡El ejército de El Señor Jesucristo!

La Doctrina del Soldado Cristiano: Parte 3 - Evitando el Estado "AWOL"

El poder divino amplía al creyente la capacidad de manejar los MANDATOS divinos para ejecutar las órdenes divinas. El soldado Cristiano nunca debe abandonar a su ejército o estar, lo que se conoce como, **"AWOL"** (ausente sin licencia). Estar **"AWOL"** en el reino espiritual es el acto de modificar o de ser así cambiado a un estado o a una práctica anterior. **"AWOL"** es un retroceder desordenadamente y es el estado del creyente que no puede ejecutar el plan de Dios para su vida. Si el creyente no va hacia adelante, él va hacia atrás. Esto previene la invasión hostil de pensamientos negativos y la expansión hacia afuera con la lengua. Los guerreros espirituales deben ser completamente despiadados sobre lo que traen en sus almas.

La Importancia de la Perspectiva Divina

Solamente cuando nuestras almas están llenas del punto de vista divino, en vez de ser abarrotadas con los pensamientos negativos del punto de vista humano, tenemos la opción de utilizar el poder divino requerido para resistir al diablo. Usted podría tener todas las áreas de su vida cubierta, pero si usted deja un espacio abierto, un sitio desatendido, aquí es donde Satanás concentrará su ataque. Dios ha proporcionado para nosotros una posición defensiva porque Satanás hará lo más que pueda para atacarnos y sacarnos del plan de Dios. Es importante no luchar contra Satanás en sus términos, pero debemos oponerlo o resistirlo usando la perspectiva y el poder de Dios. Dios nos llama a obedecer a pesar de la oposición. La oposición nunca es una excusa válida para fracasar o para ir más allá de la protección ofrecida en la predestinación, el plan de Dios diseñado de antemano. La oposición debe estimularnos para avanzar a las mayores alturas de la vida espiritual. Si usted desea participar en la victoria que nuestro Señor Jesucristo ganó en la cruz, usted debe caminar en obediencia al plan de Dios en vez de reaccionar inapropiadamente hacia Satanás y el reino de la oscuridad. Si usted no adopta una posición, usted caerá ante cualquier cosa. A través de este poder divino, la gracia de Dios nos ofrece realmente un poder más grande que el poder de Satanás. Pero usted necesita aprender y utilizar el poder de Dios. Aun en vista de la posición ofensiva de Satanás, no debemos luchar contra él; nosotros tenemos órdenes para resistir. Cuando salimos hacia fuera en nuestro propio ataque, salimos de esa pared de fuego. Por lo tanto, es muy importante aprender los mecanismos de los planes de Dios y qué él requiere del soldado cristiano.

Preparación para la Guerra Espiritual

Solamente cuando usted tiene los detalles de su vida bajo control entonces usted está listo para la **guerra espiritual**. ¿Qué le hace pensar que usted es suficientemente estable y preparado para manejar la guerra espiritual cuando usted no puede manejar las relaciones en su vida? Dios exige que cada creyente, de su propia volición, tenga la habilidad de manejar la autoridad en su vida. Solamente entonces puede el creyente seguir adelante al combate efectivo en la guerra espiritual. La defensa de Satanás contra Dios era tan brillante que Dios creó a la humanidad para resolver el conflicto. Básicamente, lo que nuestra alma respira del sistema del mundo está controlado por Satanás. Él nos rodea buscando la posición ventajosa en nuestra alma para infiltrar ingeniosamente nuestro sistema de pensamientos. Cada uno de nosotros tenemos un cuarto secreto en nuestra alma. Si este cuarto secreto es algo que usted rechaza y no trata de resolver, usted puede estar seguro de que, en la época adecuada para él, Satanás lo utilizará para obstaculizar o para destruir su relación con Dios. Muchos creyentes tienen un cuarto en su alma donde su imaginación les ha permitido funcionar desenfrenadamente y donde se erigen los ídolos. Un ídolo es, no solamente la adoración de una imagen física, sino también teniendo una relación o una dedicación excesiva hacia alguien o algo. Idolatría no es solamente dar a alguien o algo el honor y la dedicación que pertenece solamente a Dios, inconvenientemente también es decidir ceder a cualquier deseo humano tomándolo como preferencia sobre la voluntad de Dios. Es un cuarto dentro del cual se encuentra algo a lo que la persona se dedica extremadamente. Este cuarto en el alma es el lugar donde las debilidades personales se permiten continuar porque el individuo no sabe superar estas debilidades. Así pues, este cuarto puede ser un misterio hasta para el huésped. Esto puede ser un cuarto intocable por el hombre, pero Dios lo puede tocar.

El Cuarto Secreto y la Gracia de Dios

Veamos la ilustración del cuarto secreto en el templo judío en Ezequiel, capítulo 8. El cuarto secreto en el templo en donde adoraban ídolos en la oscuridad, era conocido como el compartimiento de las imágenes. Si los paneles de luz en este cuarto hubieran estado abiertos, más luz habría inundado adentro de este cuarto que en cualquier otro cuarto en el templo. Pero los paneles en este cuarto fueron mantenidos sujetados con seguridad de modo que ninguna luz brillara a través. Muchos creyentes tienen un cuarto en su alma como éste. Y este cuarto secreto es distinto del resto del templo. Aunque este cuarto secreto en el alma es una abominación al Señor, encontramos que su actitud hacia este cuarto es una de gracia y de restauración. Por otra parte, el deseo de Satanás es utilizar este cuarto para culpar y destruir nuestra vida espiritual.

Las Estrategias de Satanás y la Importancia de la Verdadera Gracia

Si es lo bueno lo que usted busca, él puede ofrecerle eso; si es entusiasmo lo que usted busca, él puede darle esto también. Y sus agentes creen generalmente que están trabajando para la causa de Cristo. En realidad, los agentes de Satanás sirven para torcer la verdad de la gracia y el conocimiento de Cristo Jesús. De la manera apropiada de estudiar la palabra de Dios hasta el uso apropiado de esa palabra, Satanás se ingenia y conspira para engañar y atraer a la persona que no sospecha nada, no para "llevarlo" por sí mismo, sino para despistarlo. La estrategia principal de Satanás es, por supuesto, la producción de lo bueno que hace el ser humano. Su plan inteligente es falsificar el bueno que se hace con el poder de Dios producido en el plan de Dios. El plan de Satanás, mejorando este mundo y la condición de los seres humanos, etc., se asegura de que lo bueno que hace el ser humano es lo que Dios mismo rechaza. En realidad, lo que Satanás pone en uso es el rechazamiento de Dios; pero trabaja para él. Esto también trabaja para la gente. Esto es lo opuesto a la política de la gracia de Dios, pero satisface la naturaleza vieja y pecaminosa. En el plan de Dios, el creyente funciona en su nueva naturaleza y en el poder divino. Ésa es la única avenida a la producción de lo bueno que se hace a través del poder de Dios. En el sistema del mundo de Satanás, como lo sabemos, el hombre funciona en su carne, su viejo hombre, es decir, la naturaleza vieja y pecaminosa. Esto es aplaudido grandemente por el enemigo y su extensa hueste de ángeles caídos. Si ellos pueden envolver a los cristianos en producir lo bueno que hace el ser humano, entonces los cristianos no ofrecen una amenaza ni una resistencia al esfuerzo de Satanás. Y aquí es exactamente donde funcionan la mayoría de los cristianos, profundamente adentro del engaño de las estrategias del diablo.

Solamente el soldado cristiano que se ha entrenado completamente, que se disciplina, y que es exacto en la ejecución del plan de Dios, según lo que la palabra de Dios dice, podrá ver las emboscadas malvadas a lo largo del camino. Todas las guerras exigen un conocimiento íntimo de, no solamente sus propios recursos, sino también de los del enemigo. La época para medir, calcular y aprender es antes de la época de la ejecución. Solamente entonces puede el guerrero aventurarse con confianza hacia la victoria.

Dios hace disponible a cada soldado cristiano el mejor equipo, la mejor munición, los mejores mapas, ¡lo mejor de todo! Pero la disciplina y la exactitud es la clave. Digo **"pero"** porque la mayoría de la gente desea una salida fácil. Esto no es más que otra estrategia de Satanás.

La Doctrina del Soldado Cristiano: Parte 4 - Conociendo a su Enemigo Verdadero en la Batalla Espiritual

Conocer a su enemigo verdadero en la **batalla espiritual**. Envían a este equipo para buscar la localización del enemigo, para localizar sus fuerzas actuales, y para determinar cuáles son los generales a cargo del enemigo. Cuanta más información que el equipo de reconocimiento puede obtener, lo mejor. Esta información se convierte en poder porque equipa mejor a las fuerzas mientras se preparan para la batalla. Sin el conocimiento preciso de su enemigo, es difícil determinar la posición más estable. El conocimiento es necesario para hacer las decisiones apropiadas.

La Importancia del Conocimiento del Enemigo: Un Ejemplo Histórico

Un ejemplo perfecto de esto era lo qué le sucedió al General Lee en Pennsylvania. Esta próxima batalla no fue planeada. El General Lee estaba yendo hacia el norte buscando zapatos para sus hombres. El General Bufar reconoció la importancia estratégica de Gettysburg y, por lo tanto, aseguró la mejor localización. Esta localización fue mantenida hasta que llegaron los refuerzos. Esta era la primera vez que el General Lee iba a entrar en una batalla sin tener información sobre el enemigo; su caballería era ineficiente a este tiempo. A través del General Stuart, el General Lee no conocía a su enemigo. En la batalla anterior, la caballería del General Lee siempre le dio un panorama descriptivo sobre el enemigo. Pero esta vez, el General Lee solamente podía conjeturar. Y sabemos que su decisión para un asalto frontal en el tercer día fue desastrosa; esta decisión le perdió la batalla, así como una gran cantidad de hombres. Si él hubiera sabido la localización, la disposición, y los números de su enemigo, las tácticas del General Lee hubieran sido absolutamente diferentes entrando en la batalla de Gettysburg.

La Necesidad de una Doctrina Completa

Solamente la preparación apropiada resulta en una acción efectiva. Qué sucedería si le enseñaran a todos los soldados cristianos solamente las doctrinas como el amor de Dios; la esencia de Dios; la muerte sustantiva y espiritual de nuestro Señor y Salvador, Cristo Jesús; el orden de los decretos electivos, etcétera. No hay nada mal con estas doctrinas con respecto al poder de Dios. Pero enseñando solamente estas doctrinas hace que el reconocimiento del creyente resulte en ser incompleto y también atenúa el plan de Dios. El mundo entero de las doctrinas se debe aprender e inculcarse en el alma del creyente para hacer un círculo completo alrededor del campo del enemigo y conocer su situación. El soldado cristiano debe reconocer que él es un soldado a tiempo completo que posee a un enemigo a tiempo completo. El soldado cristiano debe llegar a ser no solamente íntimo con el carácter de Dios, sino que él debe también llegar a estar bien informado sobre el enemigo. Hay un conflicto espiritual alrededor de nosotros. Sin el conocimiento apropiado de nuestro enemigo, nos ponemos totalmente vulnerables a su táctica.

El Engaño de Satanás y la Realidad del Conflicto

A la mayoría de los cristianos les gusta estar en "el amor" de Dios y les gusta la limpieza del mundo del diablo. Nunca vienen a entender que el mundo pertenece a Satanás y el mundo ha sido rechazado por Dios. La mayoría de los cristianos nunca vienen a conocer su propósito verdadero en la vida. Por lo tanto, la lista de muertes cristianas sigue creciendo más y más. Satanás, con un aire de satisfacción, procura cegar a los creyentes de su llamado verdadero, y él ciega a los que no son creyentes del Evangelio verdadero de Cristo Jesús. Pero sabemos que hay un conflicto y, por lo tanto, hay una fuerza de oposición. El enemigo está compuesto de Satanás y sus fuerzas; el reino de la oscuridad. El enemigo es tan real como somos nosotros. De hecho, esto aumenta su engaño. Ésta es la razón por la cual es tan importante aprender todo lo que la palabra de Dios tiene que decir sobre nuestro enemigo.

La Felicidad en el Reino Espiritual

Dios no nos puso aquí en la tierra para ir por la vida siempre feliz porque todo nos va fácil o porque todo está yendo de nuestra manera. Pero la felicidad también se encuentra en el reino espiritual. La felicidad en el reino espiritual se basa en el conocimiento, no la emoción. Conocer a su enemigo trae confianza y poder al creyente, el aseguramiento de la acción, y la capacidad de mantener su posición bajo presión. El creyente, por lo tanto, reconoce el campo del enemigo con la doctrina bíblica. La palabra de Dios nos da grandes detalles sobre el carácter de nuestro enemigo, de su posición, de su historia, de sus fuerzas, y de su futuro. Sabemos que Satanás no es omnipresente como Dios, pero él controla una hueste enorme de **ángeles caídos**. En esta manera, el reino de la oscuridad tiene ojos por todas partes. Ellos tienen archivos completos sobre usted y cada persona en su familia.

La Jerarquía de los Ángeles Caídos

1. Los Gobernantes
2. Los Poderes
3. Las Fuerzas Mundiales
4. Las Fuerzas Espirituales

Los gobernantes consisten en los generales más altos del demonio, tales como Ampollón (quien a este tiempo está encarcelado en el abismo, el cuarto compartimiento de Hades) y Belcebú (quien está libre). Afortunadamente, los creyentes en Cristo ya habrán sido transportados hacia fuera del mundo antes del período de la Tribulación. Los que se quedan atrás encontrarán una forma de vida totalmente diferente de cualquier cosa que nosotros conocemos. Actualmente, los ángeles electos pueden llevar una forma visible a los ojos humanos, pero los ángeles caídos no pueden debido a su transgresión documentada en Génesis 6, cuando violaron las reglas del conflicto angélico. El general del demonio, Belcebú, está libre en este tiempo, pero él es invisible. Él funciona como el contacto del interior de Satanás en la guerra secreta contra la raza humana. Él está a cargo de los demonios "eggastromuthos," que son los demonios de ventrílocuo. Estos demonios representan el regalo (falso) de lenguas. Muchos cristianos tragan este tipo de tontería.

Cada uno de estos generales tiene cincuenta millones de demonios bajo su comando. Entre los cuatro generales, el número total de demonios es 200 millones. Se han estado preparando, y se han mantenido en un estado de preparación, para el tiempo anticipado. Éstos son embajadores del demonio de Satanás. Controlan mucho de los gobernantes del mundo para realizar los objetivos de Satanás, y ejecutar las políticas y los mandatos de Satanás. Atacan cualquier nación que funciona bajo las leyes del establecimiento divino, cualquier asamblea local que funciona bajo la verdad de las doctrinas bíblicas, cualquier creyente positivo, y de cada regalo de gracia de Dios. Atacan no sólo los creyentes espirituales de VIP, como el apóstol Pablo, sino que también atacan cualquier persona en la vecindad de un creyente de VIP. Muchos de estos ángeles caídos estaban detrás de las fuerzas principales del mundo del pasado, están detrás de las fuerzas principales del mundo en hoy día, y estarán detrás de las fuerzas principales del mundo durante el período de la Tribulación. Durante el período de la Tribulación, serán visibles y se mezclarán otra vez con los seres humanos, como hicieron en Génesis 6. Estos mismos ángeles caídos impidieron el mensajero dirigido hacia Daniel, y evitaron que el mensajero alcance a Daniel por unos 21 días. Este grupo demoníaco trabaja duro en nuestros sistemas de hoy y serán numerosos durante la Tribulación. El último grupo es Las Fuerzas Espirituales de la Maldad y ellos están situados en los lugares divinos. Este grupo reside en la atmósfera que rodea la tierra, en el universo estelar, y en la