Sistemas Exteriores de la Península Ibérica: Relieve y Depresiones

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Sistemas y Unidades Exteriores

3. Los Sistemas y Unidades Exteriores

Fuera de la meseta se sitúan las unidades de relieve a las que, en razón de su posición geográfica, denominamos sistemas exteriores. Son cordilleras y depresiones cuya formación se inició a comienzos de la era terciaria. Las cordilleras surgieron por efecto de la orogenia alpina, que plegó e hizo emerger los sedimentos depositados durante la era secundaria al norte y sur de viejos macizos. Las depresiones corresponden a las fosas alpinas establecidas entre los sistemas en curso de formación y el borde del zócalo paleozoico.

Se integran en dos grandes conjuntos:

  1. Uno septentrional, formado por los Pirineos, la Cordillera Costero-Catalana y la Depresión del Ebro;
  2. Y otro meridional, integrado por las Cordilleras Béticas y la Depresión del Guadalquivir.

Depresiones Exteriores

a) La Depresión del Ebro

Comprende las tierras bajas del noreste peninsular, cerrada al Mediterráneo por la Cordillera Costero-Catalana. Su génesis y evolución geomorfológica están asociadas a los sistemas montañosos de su contorno. Inicialmente fue un brazo de mar cuya comunicación con el océano quedó interrumpida a medida que el plegamiento alpino elevaba los relieves ibéricos y pirenaicos. Desde mediados de la era terciaria quedó reducido a un lago en el que se depositaban los materiales que la erosión excavaba de las montañas recién formadas y los ríos transportaban gracias a los desniveles.

Los materiales transportados se depositaron selectivamente según su grosor, situándose los más finos en el centro de la depresión y los más gruesos próximos a la línea de costa. Luego, el proceso de erosión ha dado lugar a la aparición de mesas o muelas, como la Sierra de Alcubierre; mientras que en los bordes aparecen formas de relieve asociadas a potentes bancos de conglomerados y, en las zonas donde el roquedo es de naturaleza margosa o yesífera, las conocidas como malas tierras o badlands.

b) La Depresión del Guadalquivir

Ocupa el espacio que se extiende entre las Cordilleras Béticas y Sierra Morena. Es una amplia depresión en forma triangular abierta al océano Atlántico, del que recibe la influencia marítima. Está recorrida por el río Guadalquivir, que ofrece la particularidad de no discurrir por el centro de la depresión, sino adosado a Sierra Morena, lo cual es indicativo de su proceso de formación.

Inicialmente, la depresión fue un brazo de mar que recibió las aportaciones sedimentarias de las Cordilleras Béticas y de Sierra Morena. Como quiera que ambos sistemas montañosos tenían distintas características de altitud, edad y dureza de los materiales, los ríos que bajaban de las montañas béticas transportaron mayor cantidad de sedimentos que los procedentes de Sierra Morena; de esta forma se fue produciendo el desplazamiento de la línea de máxima profundidad hacia el norte y, en ella, se acomodó el lecho del río.

Las formas más características de la Depresión del Guadalquivir son sus campiñas, tierras llanas suavemente onduladas que han sido objeto de explotación agraria desde la antigüedad. Asimismo, aguas debajo de Sevilla, y a escasísima altura sobre el nivel del mar, se sitúan las marismas, cuya condición de zonas húmedas fue uno de los principales argumentos para la declaración del Parque Nacional de Doñana.

Las Cordilleras Alpinas

a) Los Pirineos

Ocupan el istmo peninsular desde el Golfo de Vizcaya hasta el Cabo de Creus. Se extienden a lo largo de 435 km y forman una barrera montañosa robusta y compacta que constituye una frontera de clarísimas repercusiones geográficas. Es una cordillera alpina por su estructura geológica y por sus formas de relieve.

En su interior se distinguen dos zonas:

  1. El Pirineo Axial. Es el núcleo y eje directriz de la cordillera. Componen su armazón y se extiende longitudinalmente por una banda de materiales paleozoicos (pizarras, granitos) que son restos de un antiguo macizo herciniano desaparecido y cuya composición litológica justifica que la parte central de los Pirineos integre la Iberia silícea. Presenta las mayores cumbres: Aneto (3400 m), Encantats (2700 m). Aún no ha sido aplanado por la erosión del Plioceno y del Cuaternario.
  2. El Prepirineo, que se halla adosado a su flanco meridional. Está formado por rocas calizas mesozoicas y se descompone en dos alineaciones montañosas separadas, a su vez, por una depresión longitudinal.
- Sierras Interiores

Se trata de materiales calcáreos cretácicos. Los ríos han cortado las sierras transversalmente en desfiladeros. Presentan relieves kársticos y sus picos más altos fueron afectados por el glaciarismo que conformó circos, valles en artesa como los de Ordesa y Belagua.

- Sierras Exteriores

Se extiende por el sector navarro, aragonés y leridano. Sus cumbres más importantes son Leyre (Navarra), Loarre (Huesca), Montsec (Cataluña), ya en contacto con el valle del Ebro.

- Depresión Media Intrapirenaica o Canal de Berdún

Depresión margosa. Son varias depresiones unidas, perpendiculares al eje de la cordillera. No hay puertos de montaña. El modelado: glaciarismo cuaternario que dio lugar a que las lenguas de hielo rellenaran valles para morir a 700-800 m de altitud, que excavó circos y valles en U, artesa, que excavan cubetas y forman lagos, ibones y estanys (en Cataluña). También presenta fenómenos de vulcanismo en la parte E de la cordillera (región de Olot). La cordillera presenta una ausencia casi total de valles longitudinales y el predominio de los transversales, orientados de norte a sur, y que son obra del encajamiento profundo de la red fluvial.

b) La Cordillera Costero-Catalana

Cierra la Depresión del Ebro por el sureste. Está orientada de noreste a suroeste y se extiende a lo largo de 250 km, entrando en contacto con los Pirineos y el Sistema Ibérico. Pese a su modesta condición como sistema montañoso, ofrece una complejidad notable, derivada de su fragmentación transversal y longitudinal.

Geomorfológicamente, la cordillera está partida en dos unidades a la altura de Barcelona: la mitad norte está integrada por materiales antiguos paleozoicos (pizarras, granitos), restos de un antiguo macizo herciniano erosionado en el Mesozoico y fracturado en el alpino. Mientras que la mitad sur lo está por calizas mesozoicas plegadas en el alpino.

Morfoestructuralmente se descompone en tres unidades paralelas entre sí y con respecto al mar Mediterráneo:

  1. La Cordillera Litoral, que es la alineación inmediata a la costa, estrecha y con 150 km de longitud, desde Gerona al norte de Tarragona y que contiene, entre otras, las sierras de Tibidabo.
  2. La Depresión Prelitoral, fosa tectónica rellena por materiales terciarios y cuaternarios. Discurre desde Girona hasta Tarragona a través de un espacio de gran significación geográfica por su importancia agrícola, demográfica y económica, pues es una zona de suaves colinas y fértiles valles: Penedés, Campo de Tarragona.
  3. Y la Cordillera Prelitoral (250 km), ya en contacto directo con las tierras del valle del Ebro, donde se encuentran las mayores alturas de todo el conjunto (Montserrat, etc.).

c) Las Cordilleras Béticas

Se extienden desde el Estrecho de Gibraltar hasta el Cabo de la Nao. Constituyen el mayor sistema montañoso de la península, el de menor edad, más largo y el de mayor complejidad geológica. Surgieron en la segunda mitad de la era terciaria a medida que el plegamiento alpino, por desplazamiento de la placa africana contra el zócalo de la meseta, comprimió los potentes bancos de sedimentos mesozoicos depositados en el mar de Tethys.

Aquí se alcanzaron espesores grandes que alternaban calizas y margas, lo que explica los mantos de corrimiento o pliegues alóctonos que la cordillera presenta. La orogenia alpina plegó las Béticas y hundió la región del Guadalquivir, transformándola en fosa. En el Plioceno se abre Gibraltar. Se prolonga hacia las Islas Baleares por el mar y por el norte de África por el Rif. Limita al norte con el Sistema Ibérico, la Mancha y la Depresión del Guadalquivir.

Unidades que presenta esta cordillera:

- Cordillera Penibética, litoral, Cordillera Interna que se levanta bruscamente ante el litoral y contiene las sierras de mayores alturas: Ronda y Sierra Nevada, entre otras. En esta última están las mayores alturas del sistema: el Mulhacén (3478 m), Veleta y también las sierras de Ronda, Almijara, Gádor, Filabres. En Sierra Nevada se encuentra un afloramiento paleozoico o cristalino, “ventana tectónica”. Aquí encontramos pliegues que han sido movidos hasta 80 y 90 km de su lugar de origen y que da lugar a zonas como las Alpujarras donde el basamento paleozoico está al descubierto. El glaciarismo afectó a Sierra Nevada, aunque el modelado glacial es débil. Se encuentran lagos de origen glacial, neveros.

- Cordillera Subbética, exterior. Tiene una clara orientación suroeste-noreste y se extiende de Cádiz a Alicante por las sierras de Grazalema, Harana, Mágina, Cabra, Cazorla, Segura y la Sagra. Continúa con las Prebéticas que llegan a la Nao: sierras de Aitana, Mariola,… Entre sus materiales abundan las calizas mesozoicas y las margas, al amparo de las cuales se han formado amplias superficies acarcavadas de malas tierras y espectaculares relieves kársticos, de los que el más representativo es el Torcal de Antequera. Es más tardío que la Penibética, más joven (se forma más tarde dentro del mismo terciario).

- Entre ambos conjuntos se sitúa la depresión o surco intrabético, una serie de depresiones interiores que se extiende desde Antequera hasta Baza, pasando por Loja, Granada y Guadix. Unos 250 km de materiales blandos: arcillas, margas, arenas, areniscas, calizas.

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