El Sector Terciario en España: Claves y Evolución
Enviado por Chuletator online y clasificado en Geografía
Escrito el en español con un tamaño de 17,55 KB
1. El Sector Terciario en España
1.1 El Sector Servicios
El sector terciario engloba todas las actividades que no se relacionan con la construcción, la producción ni la transformación de materias primas. Es decir, abarca las actividades que no producen bienes materiales, sino que prestan servicios a la población.
La clasificación más habitual divide los servicios en cuatro tipos:
- Servicios sociales: educación, sanidad, Administración pública, servicios asistenciales.
- Servicios personales: hostelería, ocio, cultura, belleza.
- Servicios a las empresas: bancos, asesorías, seguros.
- Servicios de distribución: transportes, comunicaciones, correos.
Desde el punto de vista de la titularidad, se distingue entre servicios públicos y privados.
Los públicos son financiados por las distintas administraciones y engloban la mayoría de los servicios sociales (como la sanidad), aunque también hay otros servicios públicos (transporte).
Los privados incluyen los servicios personales, los servicios a empresas y la mayoría de los servicios de distribución.
En la estructura del sector servicios en España, predominan el comercio, el turismo, los servicios financieros y los servicios sociales.
1.2 El Crecimiento del Sector Servicios en España
El sector servicios ha experimentado un espectacular aumento en las economías de los países más desarrollados, dando lugar a la terciarización de la economía. Este proceso ha posicionado al sector terciario como el mayor generador de empleo y el que más contribuye al PIB en estos países.
El crecimiento del sector terciario en España ha sido paralelo a los procesos de urbanización e industrialización iniciados en los años 60. Una vez comenzado, ha evolucionado con gran rapidez: en 1970 representaba el 46% del PIB, y en 2014 superaba el 75%.
1.3 Factores de la Terciarización en España
Diversos factores explican el proceso de terciarización español durante las últimas décadas:
- Las continuas innovaciones tecnológicas.
- El crecimiento del consumo de servicios personales, ocio y turismo.
- El espectacular desarrollo del turismo, que ha impulsado el aumento de los servicios relacionados (hostelería, ocio, transporte).
- El desarrollo del Estado de bienestar.
- La creación de las administraciones autonómicas, que ha generado un aumento de los servicios públicos y del empleo público.
- La incorporación de la mujer al mercado laboral, preferentemente en actividades del sector terciario.
2. Las Actividades Terciarias y su Distribución en España
La distribución territorial del sector terciario en España no es homogénea. Las diferencias de desarrollo y estructura económica de las comunidades autónomas influyen notablemente, aunque en todas ellas este sector sea el más importante.
La presencia de un tejido industrial denso favorece la ubicación de algunas ramas del sector terciario, como las empresas que prestan servicios a otras industrias. También existe una importante relación entre el sector servicios y el grado de urbanización. En las áreas urbanas predominan los servicios destinados a las empresas y al consumo, debido a la concentración de habitantes y actividades económicas.
El empleo terciario es mayoritario en ciudades como Madrid, Barcelona, Bilbao y Zaragoza, y en áreas turísticas como los archipiélagos y el litoral andaluz y valenciano. En cambio, el sector terciario tiene menor peso en las comunidades autónomas donde predomina el sector primario.
3. Las Actividades Comerciales
El comercio es una actividad básica en la economía española, actuando como intermediario entre las empresas productoras y los consumidores.
La importancia del comercio en España, tanto interior como exterior, ha crecido considerablemente en las últimas décadas. Actualmente, es la actividad terciaria más importante en empleo y valor de la producción.
Con la creciente globalización económica tras la entrada en la UE, España ha aumentado enormemente su participación en el comercio internacional. El área principal de importaciones y exportaciones son los países de la UE, con quienes comparte un mercado común libre de aranceles.
El crecimiento de las actividades comerciales en España ha sido paralelo a la industrialización y urbanización, impulsado por el aumento del consumo interno gracias a la mejora del nivel de renta. El comercio tradicional minorista (tiendas de barrio) ha sufrido una serie de cambios y problemas que están transformando el panorama comercial.
Este comercio tradicional, caracterizado por locales pequeños, de carácter familiar y con bajo nivel de equipamiento, dedicados principalmente a la alimentación y a un cliente próximo, entró en crisis por la aparición de nuevas rutinas y formas de comercio, el desarrollo de las grandes superficies comerciales y la liberación de los horarios comerciales. El crecimiento de las periferias urbanas, con modelos urbanísticos de baja densidad y unifamiliares, también ha contribuido a este declive.
Una evolución reciente son los centros comerciales, grandes superficies que albergan hipermercados, locales comerciales, hostelería y ocio (cines, boleras). Ubicados en áreas accesibles de las periferias urbanas, atraen la instalación de otras grandes superficies especializadas en sus alrededores.
La capacidad de estos comercios para ofrecer precios más bajos, facilidades de pago y publicidad, junto con la posibilidad de compra directa del productor al consumidor, les permite aumentar su cuota de mercado. El comercio tradicional ha buscado competir a través de asociaciones comerciales que les permiten costear estrategias conjuntas.
4. El Sistema de Transporte
4.1 Características del Sistema de Transporte Español
El sistema de transporte es clave para el desarrollo regional, nacional e internacional y la ordenación del territorio. Determina la accesibilidad de las regiones y su atractivo para la actividad económica.
Los desequilibrios espaciales demográficos y económicos se reflejan en las redes de transporte, que están más desarrolladas en las zonas con mayores núcleos urbanos y económicos.
La política de transportes de la UE busca desarrollar redes equilibradas que distribuyan la accesibilidad por todo el territorio y ofrezcan potencial a los espacios menos desarrollados, atrayendo actividad económica.
Las características más relevantes del sistema español son: medio físico desfavorable, carácter radial de las redes terrestres, excesivo protagonismo de la carretera y papel periférico en el contexto europeo.
Medio físico desfavorable: El relieve peninsular dificulta el desarrollo de una buena red de transporte terrestre, encareciendo la construcción y explotación.
Carácter radial: La red radial une Madrid con una periferia poblada y urbanizada, atravesando un interior poco poblado. Esta estructura no se adapta a la realidad autonómica. Se ha intentado reducir esta radialidad con autovías y autopistas transversales en el Mediterráneo, Cantábrico, valle del Ebro, Andalucía interior y Submeseta Norte.
Excesivo protagonismo de la carretera: Tras la hegemonía del transporte marítimo y ferroviario en siglos anteriores, la carretera domina en el siglo XX. Esto se debe a la mejora de carreteras y parque móvil, y a decisiones políticas que favorecieron la inversión en carreteras en detrimento del ferrocarril.
Papel periférico: La ubicación geográfica de España en el extremo sur de la UE y la barrera de los Pirineos contribuyen a su aislamiento. El diferente ancho de vía ferroviario es un exponente de este aislamiento, más histórico que geográfico. La entrada en la UE y los Fondos de Cohesión han mejorado esta situación.
4.2 La Red de Carreteras
El transporte por carretera ha crecido vertiginosamente en los últimos 40 años, concentrando el 90% del transporte de viajeros y más del 95% del de mercancías. El aumento de autopistas y autovías ha reducido los tiempos de viaje. Los planes de transporte buscan transformar la red radial en una red mallada para mejorar la accesibilidad de ciertas regiones.
La red española de carreteras se extiende por todo el territorio, conectando los núcleos de población. Su desarrollo es importante para la accesibilidad, pero genera impactos medioambientales. España cuenta con 165.361 km de carreteras, de los cuales 14.981 km son vías de gran capacidad.
4.3 La Red Ferroviaria
Tras perder su hegemonía frente a otros medios de transporte en el siglo XX, el ferrocarril ha resurgido con la alta velocidad, compitiendo con el transporte aéreo en conexiones como Madrid-Sevilla, Madrid-Barcelona o Madrid-Valencia, gracias a tiempos de viaje competitivos, acceso directo a centros urbanos y precios más bajos.
La red ferroviaria se divide en convencional y de alta velocidad. La convencional tiene estructura radial con centro en Madrid. La de alta velocidad incluye líneas como Madrid-Sevilla/Málaga, Madrid-León, Madrid-Barcelona-Frontera francesa, Madrid-Valencia/Alicante y Tarragona-Valencia, formando la red más extensa de Europa.
4.4 El Transporte Aéreo
El transporte aéreo de pasajeros ha crecido rápidamente en Europa y España, especialmente en distancias medias y largas, impulsado por el desarrollo turístico, el incremento de las relaciones comerciales y el aumento del nivel de vida. La deficiente red terrestre peninsular y la existencia de dos archipiélagos poblados y turísticos también han contribuido a su auge.
El crecimiento de viajeros ha dado lugar a compañías de bajo coste, que han flexibilizado las tarifas con la venta electrónica, la utilización de aeropuertos menos saturados y nuevos enlaces directos entre ciudades europeas.
Con la entrada en la UE y la internacionalización de la economía, el transporte aéreo ha ganado importancia, sobre todo en larga distancia.
Características de la red aeroportuaria: Compuesta por 46 aeropuertos comerciales, concentrados en la periferia peninsular y las islas, siguiendo la distribución de ciudades y áreas turísticas. El modelo español de "aeropuerto-ciudad", frente al europeo de "aeropuerto-región", ha resultado en una red densa, costosa e infrautilizada.
4.5 El Transporte Marítimo
Los puertos han sido siempre importantes para la economía y el comercio, con efectos multiplicadores sobre otros sectores. A pesar del desarrollo del transporte terrestre y aéreo, siguen siendo básicos, especialmente en España. El 90% del transporte internacional de mercancías se realiza por vía marítima, y España es el país de la UE donde el cabotaje tiene mayor importancia.
Sistema portuario: La red de puertos comerciales cuenta con 28 autoridades portuarias que gestionan 46 puertos.
Tráficos marítimos: El 70% de las mercancías manipuladas corresponde a puertos mediterráneos, frente al 30% de los canarios y cantábricos. Los puertos más importantes por tráfico total de mercancías son Algeciras, Valencia, Barcelona, Bilbao y Las Palmas. El cabotaje se centra en el transporte de derivados del petróleo desde refinerías costeras a puertos cercanos a zonas de consumo. El tráfico de mercancías en contenedores, con arcos de gran tonelaje que conectan con intercambiadores logísticos, enlaza con camiones o ferrocarriles para la distribución interior. El tráfico de pasajeros es menos importante que el de mercancías.
5. Los Espacios Turísticos en España
5.1 Importancia del Turismo en España
El turismo, una actividad minoritaria y elitista hasta mediados del siglo XX, despegó como fenómeno de masas en los países desarrollados. En España, este auge llegó en los años 60, convirtiendo al país en uno de los destinos turísticos más importantes del mundo.
Actualmente, España es el tercer país más turístico mundial, tanto por número de turistas extranjeros como por ingresos. El turismo es una de las principales actividades económicas, empleando directa o indirectamente al 10% de la población activa. Su importancia geográfica y económica es determinante, siendo un factor fundamental de desarrollo y transformación social, económica, territorial, ambiental y urbanística.
5.2 Factores del Desarrollo Turístico en España
Diversos factores han contribuido al tercer puesto mundial de España como destino turístico, clasificables en físicos y humanos.
Factores físicos:
- Buenas condiciones climáticas.
- Gran biodiversidad.
- Relieve favorable: playas, zonas de montaña, etc.
- Proximidad geográfica a países emisores de turistas europeos.
Factores humanos:
- Incremento del poder adquisitivo de las clases medias en países desarrollados.
- Precios competitivos.
- Importante patrimonio histórico y cultural.
- Ayudas estatales y autonómicas para la promoción turística.
- Mejora de las infraestructuras de transporte.
- Mejora de la calidad y el servicio en hoteles y hostelería.
- Consolidación de la demanda interna.
- Inestabilidad política en otras zonas con potencial turístico.
5.3 El Modelo Turístico Español
Modelo tradicional: Se caracterizaba por una clientela masiva de poder adquisitivo medio y medio-bajo, alojada en hoteles y apartamentos de categoría intermedia en áreas de playa, controladas por operadores turísticos internacionales.
Cambios recientes: La crisis turística de los 90, no relacionada con el número de viajeros ni los ingresos, sino con la aparición de nuevos destinos internacionales, afectó negativamente a algunos modelos tradicionales de turismo masivo. El desfavorable cambio de moneda desde mediados de los 80 encareció los precios para los turistas europeos. Otros factores que influyeron fueron:
- Excesiva rigidez de la oferta hotelera y hostelera.
- Empeoramiento de los servicios turísticos.
- Deficiencias en las infraestructuras de transporte.
Reconversión: La demanda de un turismo de mayor calidad exigió una reconversión basada en:
- Reconversión del modelo de "sol y playa".
- Reducción de la estacionalidad.
- Desarrollo de turismos alternativos (golf, náutico, deportes de invierno).
- Impulso del turismo de congresos y convenciones.
5.4 La Demanda Turística
La llegada de extranjeros a España ha crecido espectacularmente desde mediados del siglo XX, alcanzando más de 82 millones en 2018. Los principales países emisores son Reino Unido, Francia y Alemania (más del 55% del total), aunque ha aumentado la llegada de turistas de EE. UU., Rusia, China y Japón.
5.5 Regiones y Zonas Turísticas Españolas
La localización de las regiones turísticas se debe principalmente a razones climáticas. Las regiones con mayor especialización turística son Baleares, Canarias, Cataluña, Comunidad Valenciana y Andalucía, concentrando casi el 80% de las plazas hoteleras y un alto porcentaje de alojamientos de alquiler y segundas residencias. El resto se reparte de forma desigual entre las regiones atlánticas y cantábricas.
Según la intensidad turística, se diferencian cuatro áreas:
Litoral mediterráneo:
- Buenas condiciones físicas y naturales.
- Clima excelente para el turismo de "sol y playa".
- Fácil accesibilidad por carretera, ferrocarril y avión.
- Proximidad a núcleos urbanos de interés turístico y cultural.
Litorales atlántico y cantábrico: El paisaje y el verano suave atraen un turismo principalmente nacional y familiar.
Áreas insulares:
- Baleares: Principal área turística de Europa, con el mayor turismo exterior de España.
- Canarias: El clima subtropical favorece el turismo durante todo el año, especialmente en invierno.
Áreas turísticas interiores: Predomina el turismo nacional, con mayor actividad en invierno, atraído por el patrimonio cultural. Se divide en:
- Áreas montañosas: Picos de Europa, Pirineos, Sistema Ibérico, Sierra Nevada.
- Ciudades del interior: Ciudades con interés histórico-artístico y estancias cortas (Salamanca, Toledo, Sevilla).
- Madrid: Su riqueza cultural y su condición de capital la convierten en un importante destino turístico, especialmente para congresos y negocios.
5.6 Principales Consecuencias del Crecimiento del Turismo
Económicas: Genera entrada de divisas, equilibra la balanza de pagos, frena el endeudamiento interno, influye en otras actividades económicas (alimentación), aporta más del 12% del PIB e impulsa las inversiones en infraestructuras de transporte.
Sociales: Ha contribuido a la modernización de la sociedad y creado empleo, pero también ha propiciado la pérdida de costumbres locales y la saturación de servicios e infraestructuras.
Demográficas: El turismo genera repercusiones demográficas en las regiones turísticas, debido a la actividad económica asociada.