Schoenberg y Stravinsky: La Revolución Musical del Siglo XX y sus Etapas Creativas

Arnold Schoenberg: Del Romanticismo Tardío a la Atonalidad

La carrera musical de Arnold Schoenberg se inició en medio de los rescoldos de las polémicas wagnerianas-brahmsianas en torno a la música del porvenir y la música pura. Alumno del compositor Alexander Zemlinsky, sus primeras obras significativas están en la onda del wagnerismo.

Primera Etapa: El Último Romanticismo (Hasta 1906)

Las obras de este periodo ahondan en las contradicciones del último romanticismo y en el agotamiento de sus posibilidades. La tonalidad subyacente apenas se percibe por las continuas modulaciones, y el uso de armonías sobre intervalos de cuartas conducen el lenguaje heredado a un atolladero. No obstante, Schoenberg continúa explorándolo y logrando obras muy personales en medio del escándalo general, buscando en el contrapunto principios de ordenación que le serán muy útiles en el futuro. El eslabón final de esta primera etapa se puede considerar la Sinfonía de cámara (Op. 9) de 1906.

Obras clave del periodo romántico:

• Noche transfigurada (Op. 4): Sexteto para cuerdas basado en un poema de Richard Dehmel.
• Gurre Lieder: Poema melodramático para solistas, coro y orquesta gigantesca.
• Pelleas und Melisande: Poema sinfónico basado en el mismo drama de Maeterlinck que interesó a Debussy y Fauré.

Transición y Expresionismo

De 1903 a 1911, Schoenberg comenzó sus actividades didácticas. Escribió y, sobre todo, dibujó y pintó. En 1905, en Dresde, un grupo de jóvenes pintores se unió bajo el rótulo de Die Brücke (El puente): son los comienzos del Expresionismo. Schoenberg, como pintor, fue incluido en la célebre exposición de Múnich en la que Kandinsky exponía también. El Schoenberg músico llegaría a soluciones igual de radicales tanto en su música de cámara como en la vocal y en la teatral: la Atonalidad.

La Consolidación de la Atonalidad (1909-1912)

En 1909, Schoenberg compuso obras fundamentales que marcaron su ruptura definitiva con el sistema tonal:

• Tres piezas para piano (Op. 11): Utiliza por primera vez motivos cromáticos atonales sin que haya sonidos que dominen a los otros.
• Cinco piezas para orquesta: Está construida sobre un acorde invariable en las alturas, pero con distintas formas instrumentales.
• Monodrama Erwartung (La espera): Su primera obra de teatro, donde un solo personaje (una mujer que encuentra a su amado muerto en un bosque) hace uso de nuevos modos de canto, desde el susurro y la recitación hasta el grito desesperado.

A lo largo de los siguientes años, se trasladó a Berlín, donde tuvo mucho éxito en 1912 con la obra fundamental de esta fase atonal, Pierrot Lunaire, una colección de 21 canciones sobre poemas de Albert Giraud.

Igor Stravinsky: Del Periodo Ruso al Neoclasicismo

Igor Stravinsky nació en Rusia en 1882 y murió en Estados Unidos en 1971. Es muy interesante subrayar los diferentes períodos creativos del compositor, que se corresponden con sus desplazamientos en Rusia, Europa occidental y Estados Unidos.

El Periodo Ruso y la Estética Primitiva

Después de su aprendizaje, Stravinsky produjo una serie de obras muy marcadas por la influencia rusa. En esta etapa, se afirma fuertemente su propia personalidad, caracterizada por una rítmica poderosa y el uso de melodías populares rusas.

Los grandes ballets rusos:

• El pájaro de fuego: Utiliza melodías populares rusas que se funden con elementos impresionistas. Aquí aparece la famosa rítmica del compositor, como en la “Danza del pájaro de fuego”.
• Petrushka: Obra donde el compositor afirma fuertemente su propia personalidad.
• La consagración de la primavera: Obra prodigiosa y tremendamente renovadora. Su estética se presenta como una vuelta al arte primitivo salvaje, a la magia de las fuerzas primordiales. Si bien los efectos técnicos son bastante toscos, los recursos rítmicos son extraordinarios. Las fórmulas brotan de la espontaneidad y buscan la repetición obsesiva.

De hecho, esta partitura no fue el detonante que derrumbó la tradición como durante tanto tiempo se ha dicho: las bases de la tonalidad están muy estudiadas y las superposiciones politonales solo las refuerzan.

Transición y Neoclasicismo

A partir de la Primera Guerra Mundial, Stravinsky se aleja de las influencias rusas. Este cambio empieza primero en Renard y es más acentuado en La historia del soldado, en la cual, aunque se inspira en un tema ruso, utiliza un estilo más complejo.

En La historia del soldado, la música deja entrever motivos neoclásicos, incorporando diversos estilos de danza:

• El paso doble
• El tango
• El vals
• El ragtime

A pesar de este carácter de tan diversos estilos, la obra mantiene una admirable unidad.