San Agustín y Santo Tomás de Aquino: Fe, Razón, Dios y Ética

San Agustín: Fe, Razón y la Ciudad de Dios

La filosofía de San Agustín, representativa de la patrística, es una síntesis del platonismo y el cristianismo. Para él, la fe y la razón están intrínsecamente relacionadas. La fe actúa como una guía que permite a la razón alcanzar las verdades últimas y más complejas. En sus propias palabras, "creer para conocer": la fe ilumina el camino de la razón.

Demostración de la Existencia de Dios y Antropología en San Agustín

1. La prueba más genuina de la existencia de Dios, según San Agustín, se basa en la inmutabilidad de las ideas.
2. Su antropología es esencialmente platónica: el alma, una sustancia inmaterial, está unida accidentalmente al cuerpo. Dentro del alma, distingue dos tipos de razón: la inferior (ciencia) y la superior (sabiduría).
3. Respecto al problema del mal, San Agustín afirma que no es una entidad real, sino la ausencia del bien. El mal surge cuando nuestras acciones se desvían del amor. Por lo tanto, nosotros somos la causa del mal.

La Relación entre la Ciudad de Dios y la Ciudad Terrena

San Agustín introduce un nuevo concepto de historia, contrastando con la visión cíclica del mundo antiguo. Mientras que para los antiguos la realidad era eterna y la historia circular, San Agustín, basándose en el cristianismo, propone una concepción lineal: la historia tiene un inicio, la obra creadora de Dios desde la nada (ex nihilo), y un final. La historia del hombre comienza con la creación del hombre.

Su concepción histórica se plasma en su teoría de las dos ciudades: la terrena y la celestial. Esta teoría ha generado dos interpretaciones: la primacía de la Iglesia sobre el Estado y la minimización del papel del Estado.

El Agustinismo Medieval

Las principales tesis del agustinismo medieval son:

• La colaboración entre la fe y la razón.
• La concepción platónica del alma.
• La primacía de la voluntad sobre el entendimiento.
• La teoría de la iluminación.
• El ejemplarismo de las ideas.
• La composición hilemórfica de todas las sustancias, excepto de Dios.

Santo Tomás de Aquino: Las Cinco Vías y la Ley Natural

Relación entre Fe y Razón

Basándose en la teoría aristotélica del conocimiento, Santo Tomás de Aquino reconoció los límites de la razón y estableció las relaciones entre la fe y la razón. Sostuvo que existen verdades que pertenecen tanto al ámbito de la fe como al de la razón.

La razón colabora con la fe proporcionando sus métodos, sus herramientas dialécticas y conocimientos científicos útiles para esclarecer las verdades de fe. A su vez, la fe colabora con la razón actuando como una norma o criterio externo de verdad.

Demostración de la Existencia de Dios: Las Cinco Vías

Santo Tomás de Aquino argumentó que la existencia de Dios solo puede probarse a partir del conocimiento de los hechos del mundo (a posteriori). Propuso cinco vías para demostrarla:

1. Movimiento: La observación de la naturaleza revela que todo está en movimiento. Debe haber, por lo tanto, algo que origine todo movimiento, un motor inmóvil que mueve sin ser movido: Dios.
2. Causas Causadas: Todo hecho o cambio tiene una causa. Debe existir una causa incausada, algo que causa sin haber sido causado: Dios.
3. Contingencia: Las cosas en la naturaleza existen, pero podrían no existir. Si es así, en algún momento podrían dejar de ser. Debe haber un ser cuya existencia no sea contingente: Dios.
4. Grados de Perfección: Observamos distintos grados de perfección en los seres de este mundo (bondad, belleza, etc.). Para comparar, necesitamos un estándar de máxima perfección, un ser óptimo y supremo: Dios.
5. Finalidad: La naturaleza no actúa por azar, ya que el azar produce caos. Debe haber un ser inteligente que ordene la naturaleza, un ser que dirija a los seres inorgánicos, que carecen de inteligencia, hacia su fin: Dios.

Ética y Política: La Ley Natural

La idea central de la ética de Santo Tomás de Aquino es la ley natural. Como seres naturales, poseemos ciertas tendencias y, como seres racionales, las conocemos. La ley natural es evidente, universal e inmutable.

La ley natural es una parte de la Ley Eterna y, al mismo tiempo, el fundamento de la ley positiva, a la que sirve de guía.

Iusnaturalismo: Concepción filosófica que defiende una idea unitaria y global del derecho como un conjunto de valores universales previos al derecho positivo, en los que este debe inspirarse.