Sabiduría Clásica: Relatos Morales de la Antigua Grecia
Enviado por Chuletator online y clasificado en Griego
Escrito el en
español con un tamaño de 4,01 KB
Fábulas Griegas: Lecciones de Vida y Carácter
A continuación, presentamos una selección de fábulas clásicas, herederas de la tradición oral de la Antigua Grecia, que nos invitan a reflexionar sobre la naturaleza humana, las virtudes y los vicios. Cada relato, protagonizado por animales y personajes arquetípicos, encierra una profunda enseñanza moral, tan relevante hoy como en la antigüedad.
Fábula XXV: El Perro Ambiguo y la Liebre
Un perro de caza, tras atrapar a una liebre, ya la mordía, ya le besaba los labios. La liebre, tras hartarse de esta ambigüedad, le dijo: «¡Oh tú! Deja de morderme o de besarme para que yo sepa si estás dispuesto a ser mi amigo o mi enemigo.»
Esta fábula es oportuna para el hombre ambiguo.
Fábula XXVI: La Perra Avariciosa y su Reflejo
Una perra que llevaba un trozo de carne cruzaba un río. Al ver su propia sombra sobre el agua, pensó que había otra perra que llevaba un trozo de carne mayor. Por eso, tras soltar el suyo, se lanzó para coger el de aquella.
Le sucedió que se vio privada de ambos: del primero, al no encontrarlo porque nada había; y del segundo, porque fue arrastrado por el río.
Esta fábula es oportuna para el hombre avaricioso.
Fábula XXVII: El Mosquito Insignificante y el Toro
Un mosquito, tras posarse sobre el cuerno de un toro y, después de asentarse durante mucho tiempo, cuando estaba a punto de irse, preguntó al toro si quería que él se marchara ya.
Y este, tomando la palabra, dijo: «Pero ni cuando llegaste lo supe ni, si te vas, me enteraré.»
Esta fábula se aplica a un hombre inútil, quien ni estando presente ni estando ausente es molesto ni útil.
Fábula XXVIII: Las Liebres, las Águilas y las Zorras
En cierta ocasión, unas liebres que estaban en guerra con las águilas llamaron a las zorras al combate.
Estas dijeron: «Os habríamos ayudado si no hubiéramos sabido quiénes sois y contra quiénes lucháis.»
Esta fábula muestra que quienes se enfrentan a los más fuertes desprecian su propia situación.
Fábula VIII: El León, el Hombre y la Vanagloria
Una vez caminaba un león con un hombre. Cada uno de ellos se vanagloriaba con palabras. En el camino había una estela pétrea que representaba a un hombre estrangulando a un león.
Y el hombre, tras mostrársela al león, dijo: «¿Ves tú cómo somos mejores que vosotros?»
Y aquel, sonriendo, dijo: «Si los leones hubieran sabido esculpir, verías a muchos hombres debajo de un león.»
Muchos se vanaglorian a través de sus palabras de ser valientes y osados, pero la experiencia, dejándolos desarmados, los pone a prueba.
Fábula XXXI: El Cabrito Valiente y el Lobo
Un cabrito que estaba encima de una casa, al ver a un lobo que pasaba por delante, lo insultaba y se burlaba.
El lobo dijo: «Tú no me insultas a mí, sino el lugar.»
Esta fábula muestra que muchas veces no solo el lugar, sino la circunstancia, da valor frente a los mejores.
Fábula XXXIV: La Verdad en el Desierto
Alguien, caminando en el desierto, encontró a una mujer sola que estaba sentada y triste, y le preguntó: «¿Quién eres?»
Y ella dijo: «La Verdad.»
«¿Y por qué causa, tras dejar la ciudad, habitas en el desierto?»
Esta dijo: «Porque en los tiempos antiguos la mentira estaba entre unos pocos. Pero ahora está junto a todos los hombres, si quieres oír y hablar algo.»
Los hombres tienen una vida peor y mala cuando la mentira vence a la verdad.
Fábula XXXVII: La Perdiz Traicionera y el Cazador
Alguien, tras cazar una perdiz, quería sacrificarla. Ella le prometió ser útil y entregar muchas perdices al cazador.
Y el cazador dijo: «Por eso mismo yo te sacrificaré, porque quieres traicionar a tus congéneres.»
Esta fábula muestra que quienes traicionan a sus amigos, ellos mismos caen en las emboscadas.