La Revolución del Lenguaje Musical: Vanguardismo y Transformaciones Armónicas del Siglo XX

Los Cambios en el Lenguaje Musical y las Corrientes Vanguardistas del Siglo XX

El arte que surge en esta época se muestra distorsionado, crispado y agresivo.

Por ello, se ha acuñado el término "deshumanización del arte" o del feísmo (Rosenkranz). De aquí se derivan las actitudes contorsionadas y violentas de las pinturas expresionistas, la exaltación por el mismo movimiento musical de las disonancias continuadas, o el placer que mantiene en suspenso la inquietante tensión del hombre actual.

Transformaciones Clave en el Lenguaje Musical

La Melodía

Formada tradicionalmente por una serie de convenciones (frases, motivos, etc.), la música contemporánea valora la melodía, pero abandona los usos anteriores y la enriquece con otros condicionantes e intenciones. Prescinde de la búsqueda de belleza formal y efusión lírica de los clásicos-románticos. Sus características incluyen:

• Evita la simetría y la repetición.
• Presenta amplios saltos interválicos y giros "dentados" o "diente de sierra"; es angular.
• Evita desenvolverse sobre un fondo armónico familiar y obvio, así como tender hacia una nota central.
• Busca inspiraciones variadas, explotando cuantos valores históricos o de otras culturas puedan ser válidos.

La Armonía (Acordes y Disonancia)

En el siglo XX se tiende a usar acordes de 6, 7 o más notas diferentes. Estos acordes, denominados "poliacordes", entrañan gran riqueza y mayor disonancia.

También se usan Clusters (racimos) en los que las notas están muy próximas. El intervalo de 3ª ahora es de 4ª o por libertad total, lo que aumenta la sensación de disonancia. En la música vanguardista aumenta la capacidad expresiva de la música.

Las cadencias no son claras ni lógicas. La melodía y la armonía se mueven con cierta independencia.

El Concepto de Tonalidad

En la música del siglo XX se suelen utilizar los 12 sonidos de manera libre. Esto borra la diferencia entre mayor-menor, y la distinción entre cromático y diatónico.

Con frecuencia se vuelve a la música medieval en busca de nuevas relaciones, adoptando otro concepto tonal. Otras veces se mezclan dos tonalidades diversas (bitonalismo) o varias (politonalismo).

El Ritmo

Los autores buscan lo inesperado. Los inspiradores del cambio son los propios ritmos de la vida moderna, la influencia de la música extraeuropea y los ritmos primitivos a través del jazz, así como los ritmos libres del gregoriano o del motete medieval.

• Se experimentan ritmos basados en 5, 7, 11 o 13 tiempos.
• Se tiende a sujetar la obra a un cambio continuo.
• La barra del compás deja de ser importante y deja de marcar el fluir rítmico.
• Nacen los polirritmos y los multirritmos.
• Otra técnica que se revalúa es el ostinato o "ritmo sostenido".

La Textura

La textura sufre cambios en la interrelación de las voces dentro de una obra. Desde Wagner, la textura se había complicado, pero los compositores del siglo XX van a aligerarla. Para ello, recuperan el contrapunto de la época de Bach.

A través de una nueva melodía vigorosa se recupera el sentido lineal. Las líneas, además de una melodía, son de bloques de varias líneas conjuntas. Esta cierta independencia de las voces genera un fuerte clima de disonancia.