Repoblación de la Península Ibérica: Sistemas y Consecuencias (Siglos VIII-XIII)
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La Repoblación de la Península Ibérica: Un Proceso Clave en la Configuración del Territorio (Siglos VIII-XIII)
Este mapa demográfico ilustra el proceso de repoblación de la Península Ibérica, que tuvo lugar desde el siglo VIII hasta la segunda mitad del siglo XIII. La repoblación consistió en la ocupación y puesta en cultivo de los territorios conquistados a los musulmanes, con el objetivo de consolidar las conquistas cristianas. Este proceso tuvo un impacto duradero en la estructura de la propiedad de la tierra, que se ha mantenido prácticamente sin modificaciones hasta nuestros días. El río Tajo se convirtió en una línea divisoria, separando una España latifundista al sur y una España de medianas y pequeñas propiedades al norte.
Sistemas de Repoblación y su Cronología
La leyenda del mapa detalla los distintos sistemas de repoblación empleados y sus respectivas cronologías:
- Presura (Siglos VIII-X): Se aplicó en las tierras al norte del Duero y en el piedemonte pirenaico.
- Repoblación Concejil (Siglos XI-XII): Se desarrolló en las tierras entre el Duero y los Montes de Toledo, y en el valle del Ebro.
- Repoblación de las Órdenes Militares (Primera mitad del Siglo XIII): Afectó al valle del Guadiana (La Mancha y Extremadura) y a la provincia de Teruel y el norte de Castellón.
- Repoblación por Repartimiento (Segunda mitad del Siglo XIII): Se implementó en el valle del Guadalquivir y el litoral levantino, desde Castellón hasta Murcia.
Características de Cada Sistema de Repoblación
Presura
La repoblación por presura fue impulsada por la presión demográfica en los núcleos cristianos y se vio favorecida por la escasa población de los territorios ocupados. Consistía en la ocupación de tierras sin dueño, ya que, según el Derecho romano, la puesta en cultivo de un terreno despoblado otorgaba la propiedad al que lo realizara. Este proceso fue llevado a cabo por campesinos, nobles y monasterios, resultando en el predominio de la pequeña y mediana propiedad.
Repoblación Concejil
La repoblación concejil se benefició del crecimiento demográfico de los núcleos cristianos. El territorio se dividía en concejos con grandes términos, regidos por una ciudad o villa cabecera, donde se instalaba un representante del rey. El rey otorgaba un Fuero o Carta Puebla a los nuevos pobladores, concediéndoles un solar para construir su casa y tierras de cultivo, que pasaban a ser de su propiedad tras unos años. También se les permitía disfrutar de las tierras y bienes comunales. Este sistema dio lugar a una estructura caracterizada por la propiedad mediana libre y la abundancia de tierras comunales.
Repoblación de las Órdenes Militares
Este sistema se aplicó en zonas extensas y poco pobladas, conquistadas con la participación destacada de las Órdenes Militares. Estas recibieron grandes extensiones de tierra que dividieron en encomiendas, dirigidas por un caballero de la Orden con el cargo de comendador. La estructura de propiedad resultante fue predominantemente latifundista, con tierras dedicadas a la explotación ganadera.
Repartimiento
No se proporciona suficiente información en el texto original sobre las características específicas del sistema de *repartimiento*. Se infiere que, al igual que los otros sistemas, buscaba consolidar el control cristiano sobre los territorios reconquistados, pero se necesitan más detalles para describir completamente su impacto en la estructura de la propiedad.