La Regencia de María Cristina de Habsburgo (1885-1902): Reformas, Turnismo y el Auge de los Nacionalismos
Enviado por Chuletator online y clasificado en Historia
Escrito el en
español con un tamaño de 4,29 KB
La Regencia de María Cristina de Habsburgo (1885-1902) y la Oposición al Sistema
Regencia de María Cristina de Habsburgo-Lorena (1885-1902)
Tras la muerte de Alfonso XII y la firma del «Pacto del Pardo», que estableció el turnismo de los partidos Conservador y Liberal Fusionista, comenzó la regencia de María Cristina de Habsburgo (1885-1902). Este periodo coincidió con el gobierno de Sagasta (liberal), conocido como el «Parlamento Largo», el cual dio un impulso nuevo a la vida política mediante un programa de reformas:
- Ley del Sufragio Universal.
- Ley del Jurado.
- Ley de Imprenta (que permitió el florecimiento intelectual y una prensa avanzada).
- Ley de Asociaciones (que legalizó partidos políticos y sindicatos).
- Código de Comercio.
- Se propuso un proyecto de reformas para Cuba.
Regionalismo y Nacionalismo
Durante esta etapa surgieron ideas regionalistas y nacionalistas. El liberalismo se basaba en la idea centralista del Estado y de la nación, y a esta idea se oponían los carlistas (que defendían los fueros) y los republicanos (que defendían el federalismo). El regionalismo estaba vinculado a un núcleo de intelectuales y ateneístas que buscaban la recuperación lingüística e histórica de cada región a través de juegos florales.
Dentro de estas ideas se pueden encontrar varios movimientos:
A) Catalanismo
El catalanismo pasó de una idea cultural a un concepto político. Su origen se encuentra en el catalanismo obrero federal, el catalanismo comercial basado en la burguesía industrial catalana (partidaria del proteccionismo) y el tradicionalismo religioso, filosófico o social carlista.
Valentí Almirall presentó un proyecto político liberal, el Memorial de Greuges (primera manifestación de conciencia colectiva), que era una memoria en defensa de los intereses morales y materiales de Cataluña y del proteccionismo industrial. Este proyecto chocó con los sectores católicos y conservadores.
También se formó la Lliga de Catalunya, que propagaba la necesidad de cortes catalanas, enseñanza propia y tribunales catalanes. El principal teórico del catalanismo fue Prat de la Riba. Estos movimientos no planteaban la secesión, sino propuestas de sistema federal y autogobierno con instituciones propias. A finales del siglo XIX, la burguesía catalana dejó de apoyar a los partidos dinásticos debido a la pérdida del mercado colonial.
B) Nacionalismo Vasco
El desarrollo del nacionalismo vasco está vinculado a la abolición de los fueros, la rápida e intensa industrialización, la formación de una poderosa burguesía industrial y financiera, y el desarrollo del socialismo marxista.
El líder fue Sabino Arana, fundador del PNV (Partido Nacionalista Vasco), quien extrajo del fuerismo la consecuencia última del independentismo, la «ley vieja». El nacionalismo vasco se fundamenta en la diferenciación de la raza, en el rechazo de las novedades políticas y socioeconómicas del liberalismo, así como del centralismo, el socialismo y la industrialización.
C) Nacionalismo Gallego
Movimiento que buscaba la recuperación cultural y política de Galicia.
D) Andalucía
Blas Infante fue el fundador de la nación andaluza (posteriormente).
Grupos de Oposición al Sistema de la Restauración
Los grupos de oposición a este movimiento (Restauración y nacionalismo) fueron:
- Los Carlistas: Vencidos militarmente, algunos optaron por el exilio en Francia. Un sector carlista, encabezado por Ramón Nocedal, creó un partido basado en la tradición y en la religión católica.
- Los Republicanos: Sufrían represión.
- Castelar optó por entrar en el juego político creando el Partido Republicano Posibilista.
- Zorrilla era partidario de volver a la Constitución de 1869.
- Pi y Margall era partidario del republicanismo federal (vinculado al segundo movimiento obrero).