Recursos Hídricos en Argentina: Aguas Subterráneas, Glaciares y Zonas Áridas
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Aguas Subterráneas
Las aguas subterráneas son de vital importancia, ya que de ellas depende la provisión de agua potable y el desarrollo en vastas áreas del país. Estas aguas se encuentran almacenadas en acuíferos ubicados a diferentes niveles de profundidad.
Reúnen buenas condiciones de potabilidad debido a la depuración natural del suelo, excepto en acuíferos costeros, donde puede haber un alto nivel de sales. Las aguas subterráneas provienen de las precipitaciones, lagos, ríos y la fusión de nieve a través de las rocas permeables. Se originan por la infiltración del agua o a través de grietas en las rocas impermeables hasta llegar a una capa impermeable donde se acumulan. De esta manera, se formaron depósitos de agua en la llanura y en la zona de montaña, donde se almacenan en las partes bajas de la ladera.
El Agua y el Cambio Climático
La pérdida de espesor de los glaciares se manifiesta por las variaciones en las temperaturas y en el régimen de las precipitaciones. Esto modifica la acumulación de nieve en las alturas, que es donde se originan los glaciares. El aumento de temperatura se debe a la concentración de gases de efecto invernadero o al desprendimiento de icebergs, que son mayores a la cantidad de hielo que se forma en su cuenca de alimentación en la parte alta de la cordillera y el interior de la Antártida. Este fenómeno se denomina “retroceso de los glaciares”.
Efectos del Cambio Climático Observados en Argentina
- Aumento de la temperatura de superficie en la Patagonia.
- Aumento de las precipitaciones medias anuales y extremas, con vientos destructivos y granizo, en el noroeste y centro del país.
- Disminución de las precipitaciones en Cuyo.
Como consecuencia, se ha observado un crecimiento de los caudales de los ríos y una disminución de las nevadas.
Impactos Futuros del Cambio Climático
- Calentamiento global.
- Aumento de la evaporación.
- Disminución de caudales.
- Pérdida en la generación hidroeléctrica regional.
- Aumento de la concentración de contaminantes.
- Dificultades en la navegación fluvial.
- Afectación a la producción agropecuaria.
- Compromiso del suministro de agua potable en algunas zonas.
Los Glaciares
Los glaciares son la mayor reserva de agua dulce de la Tierra. Se denomina glaciar a un cuerpo permanente de hielo formado por acumulación, compactación y recristalización de la nieve que se desplaza siguiendo la pendiente del terreno por acción de la gravedad.
Ley 26.639: Protección de los Glaciares
La Ley 26.639 afirma que los glaciares constituyen bienes de carácter público y que esta ley tiene “el objeto de preservarlos como reservas estratégicas de recursos hídricos para el consumo humano, para la agricultura y como proveedores de agua para la recarga de cuencas hidrográficas, como fuente de información científica y como atractivo turístico”.
La Importancia del Agua en las Zonas Áridas
La mayor parte del territorio argentino se encuentra en la franja de clima árido o semiárido, por lo que el agua es un recurso estratégico para el desarrollo de dichas regiones. Es fundamental su uso de manera racional. Existen dos cuencas hidrográficas principales: los sistemas del Desaguadero y el de las Sierras Pampeanas.
Sistema del Desaguadero
Por el caudal de sus ríos, el más importante es el sistema del Desaguadero, alimentado por el deshielo de las nieves de la cordillera frontal y principal (Cuyo).
Los caudales de estos ríos sostienen los oasis más ricos del país (que ocupan el 5% del territorio y donde se asienta el 90% de la población) y permiten el desarrollo de las principales actividades económicas.
Acuíferos de Cuyo
También los acuíferos de Cuyo, río San Juan, río Mendoza, Tucumán y el de los ríos Diamante y Atuel son sumamente importantes, ya sea para riego o para el proceso industrial que se desarrolla en la región. En Cuyo, el espacio está organizado a partir de la cuenca hídrica del Desaguadero. Su uso se apoya en una amplia infraestructura hidráulica compuesta por embalses, diques de derivación y miles de kilómetros de canales. El más importante por su extensión y población es el oasis norte, formado por las cuencas de los ríos Mendoza y Tunuyán.
Debido al intenso aprovechamiento de las aguas para el consumo de la población, el riego, los procesos industriales y la producción de energía, los afluentes le aportan muy poco o nada de caudal al río colector.