La Razón Vital de Ortega y Gasset: Contexto Histórico e Influencias Filosóficas Europeas
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Contexto Histórico e Influencias en el Pensamiento de Ortega y Gasset (Punto 4)
En 1900, era la época de los imperios. Estados Unidos se estaba expandiendo, Alemania crecía y competía con Gran Bretaña por las fuentes de energía, materias primas y mercados. Se estaba desarrollando la industria, controlada por la clase empresarial y financiera. Aumentaba también el pensamiento socialista y anarquista que creaban grupos de obreros, anarquistas o partidos de clase.
En esa época, España perdió sus últimas colonias de ultramar y su cultura y desarrollo científico-tecnológico se fue retrasando respecto a otros países.
Las Generaciones Intelectuales Españolas
La interpretación más difundida fue la de la Generación del 98. Pedía la regeneración de la vida económica y política española y la "europeización" de España para ello.
La Generación del 14 pedía el fin de la Restauración porque no se habían hecho las reformas necesarias. A este grupo perteneció Ortega, quien contrapuso la España de la Restauración con una nueva España, industrializada, con jóvenes que buscaban nueva vida en las ciudades. La economía se favoreció por la Primera Guerra Mundial.
Crisis de la Restauración y Totalitarismos
En 1917 hubo revoluciones en Europa y triunfó en Rusia la de Octubre con Lenin. Más tarde, terminó la Restauración por la Guerra de Marruecos y la posguerra europea, y se sustituyó la monarquía por la dictadura de Primo de Rivera. En Europa predominaba el totalitarismo con Mussolini en Italia y Stalin en Rusia.
Ortega estaba en contra de la dictadura porque proponía sustituir el parlamentarismo democrático por la Asamblea Nacional.
Al caer Primo de Rivera, surgió la Segunda República, en la que las ideas socialistas y revolucionarias tenían una amplia base social. Pero estaban enfrentadas la derecha y la izquierda, había problemas con los catalanes y vascos, no se podía compensar la pobreza económica ni evitar las huelgas y revueltas. Esto llevó a la Guerra Civil. También contribuyó la crisis económica europea y el apoyo de Hitler a Franco. Entonces, España se dividió en la República vencida y en el exilio, y la España franquista, vencedora y aislada.
La Segunda Guerra Mundial la ganaron las potencias aliadas y destruyeron el imperio alemán y el japonés. Dejó una Guerra Fría entre los capitalistas y comunistas.
Fuentes Filosóficas de Ortega
Ortega se inspiró sobre todo en:
- La filosofía neokantiana.
- El idealismo crítico.
- La pedagogía social.
El neokantismo concebía la filosofía como el fundamento último de la cultura, que la entendía como la forma racional de hacer posible la vida humana.
Ortega contactó con su generación europea que reaccionó contra el racionalismo cientificista y la mentalidad positiva. Daban un nuevo fundamento a la cultura, superando el idealismo, que era lo que se pensaba desde la filosofía del sujeto de Descartes hasta la filosofía de la cultura de Kant.
Corrientes del Siglo XX
En el siglo XX, se desarrollaron teorías biológicas vitalistas como la de Driesch o Hertwig. Otros autores desarrollaron posiciones historicistas desde el problema de la fundamentación de las ciencias del espíritu.
El Historicismo se opone a la interpretación de los fenómenos históricos según el modelo de las ciencias naturales. Propone liberar del positivismo y del relativismo la interpretación histórica y plantea una historización radical y completa del pensamiento de los hombres, su cultura y sus valores. Husserl se opuso a esta tendencia.
Bergson rechazó la generalización del materialismo mecanicista y expandió la concepción del impulso vital a todo dinamismo, desde la materia hasta la conciencia.
Nietzsche puso en valor la existencia humana biológica e histórica frente al idealismo o la religión.
Ortega los rechazó por irracionalistas. Pero aprendió de Husserl que pensar es una actividad consciente con el acto de pensar y el pensamiento que da contenido al acto inseparable. Le ayudó también el método de Husserl de análisis lógico de los fenómenos de la conciencia pura, con el que él interpreta el pensamiento como actividad vital, en la que el yo interactúa con las cosas.
En el centro de la filosofía europea estaba Heidegger, que investiga el sentido del ser haciendo un análisis hermenéutico de la existencia, que es el ser en el mundo. De ahí deriva la investigación hermenéutica. El ser-en se compone de atributos esenciales, es cuidado de sí y está abierto al mundo. La analítica del ser-en-el-mundo le ayudó a desarrollar su concepción de la vida y la razón vital.
La Filosofía de Ortega y Gasset: Influencia y Legado (Punto 5)
Según Ortega, no existe una filosofía duradera. La filosofía nació en Grecia en el siglo V antes de Cristo y el positivismo fue la última versión de la filosofía moderna, que fue fundada por Descartes con el sujeto pensante, derivando hacia el idealismo. Ortega creía que su generación iba a superar el idealismo con una filosofía de la vida.
El Impacto del Orteguismo en España
La filosofía de Ortega fue la que más influyó en España antes de la Guerra Civil. Durante su actividad docente fue el verdadero referente de la filosofía española para la Escuela de Madrid y la de Barcelona. Fue la filosofía oficial en la dictadura de Primo de Rivera y en la Segunda República.
La Escuela de Madrid y el Exilio
La Escuela de Madrid recreó el neokantismo, los vitalismos, la fenomenología de Husserl, la fenomenología hermenéutica de Heidegger, el historicismo de Dilthey, etc. Se convirtió en el núcleo del orteguismo. Uno de sus representantes fue Manuel García Morente.
Con la Guerra Civil y el franquismo, la filosofía orteguiana desapareció como oficial y se sustituyó por la nacional-católica y la neoescolástica. Los orteguistas tuvieron que exiliarse y desarrollarse fuera.
Discípulos y Proyección Internacional
José Gaos fue discípulo de Ortega hasta su exilio y se convirtió en el miembro que más proyectó el orteguismo en México y en Hispanoamérica. Sin embargo, varió un poco su filosofía, reduciendo su pensamiento a la filosofía perspectivista de la cultura que desarrolló.
Julián Marías fue discípulo oficial de Ortega en la posguerra. Fue el expositor y apologista más representativo del orteguismo católico. Creía que el sistema de Ortega era la última filosofía vigente que acogía todas las anteriores. Es decir, no existe una filosofía contemporánea en España. En cada país hay una filosofía dependiendo de su marco histórico-cultural.
Polémicas y Reconocimiento Póstumo
En los años 40, Ortega fue perseguido. Marías denunció que lo que le escribían los jesuitas a Ortega eran antiorteguianos y le presentaban como alguien de la Generación del 98, con un historicismo culturalista y antisistemático. Un pensamiento peligroso por anticatólico y antiespañol.
En los años 50, un teólogo revisó la obra de Ortega con intenciones inquisitoriales. La polémica la puso fin la publicación de la última obra del maestro y el cambio de orientación intelectual del régimen franquista en los años 60 hacia el lenguaje de los tecnócratas.
La Generación del 36 defendía la compatibilidad del pensamiento de Ortega con la ortodoxia católica. Pero los jóvenes buscaban saberes técnicos y eficientes para desarrollar actitudes críticas con el sistema.
En 1983, en el centenario de su nacimiento, sus obras se convirtieron en patrimonio de todos. Uno de los libros que salieron en esa época ya no era propio del orteguismo, sino que investigaba y tomaba en consideración sus fuentes, recuperando los aspectos vigentes de su pensamiento y haciendo una revisión crítica de su obra.
Entre 1975 y 1985, Ortega fue uno de los filósofos más editados, pero sus escritos no formaron parte de la literatura filosófica de las nuevas áreas del conocimiento filosófico.