Psicoterapia Humanista: Fundamentos y Enfoques Terapéuticos

La Psicología Humanista: Una Perspectiva Revolucionaria

La psicología humanista surge como una respuesta a las limitaciones percibidas en el conductismo y el psicoanálisis, proponiendo una visión del ser humano centrada en su potencial inherente y su capacidad de crecimiento. Este movimiento, con raíces profundas en la filosofía humanista, se desarrolló principalmente en Estados Unidos durante la década de 1960, en un contexto de insatisfacción con las corrientes psicológicas predominantes.

Orígenes y Contexto del Movimiento Humanista

El movimiento humanista de la psicología es genuinamente americano y se ha desarrollado al margen de la psicología académica durante los años 60, en un clima de insatisfacción por las aportaciones del conductismo y su alternativa, el psicoanálisis. Los antecedentes inmediatos del movimiento humanista incluyen la escuela de la Gestalt.

La característica principal de esta corriente es la concepción del ser humano como un ser dotado de un potencial humano inherente que debe ser realizado y descubierto, más que inventado. Se postula que “el hombre es naturalmente bueno y saludable, sólo necesita las condiciones amnióticas necesarias para su crecimiento”.

Psicoterapia Centrada en el Cliente: El Poder del Autoconocimiento

Desarrollada por Carl Rogers, la psicoterapia centrada en el cliente parte de la premisa de que “es el propio cliente quien sabe lo que le lastima, qué direcciones ha de seguir, qué problemas son cruciales, qué experiencias han estado profundamente enterradas”. Rogers (1961) observó que al confiar más en el paciente para dirigir el proceso terapéutico, se obtenían mejores resultados.

Conceptos Básicos de la Terapia Centrada en el Cliente:

• Las personas son básicamente buenas o saludables.
• Toda persona tiene una tendencia natural a la “actualización”: a desarrollar sus propias potencialidades.
• Los organismos saben (por selección evolutiva) lo que es bueno para ellos: valor organísmico.
• Los humanos valoramos la recompensa positiva de uno mismo (autoestima, autovalía o imagen positiva de uno mismo). El cuidado personal se genera a través de los cuidados positivos de los demás.
• La sociedad nos impone condiciones de valía: nos da lo que necesitamos cuando lo merecemos, redirigiendo nuestra valoración organísmica. Empezamos a querernos cuando cumplimos con los estándares que otros nos aplican.

El mundo personal se construye sobre los sentimientos que proporcionan una evidencia orgánica personal que define la realidad de la persona. A partir de esta y de la interacción con los demás, el sujeto se forma una imagen consciente de sí mismo. Cuando esta imagen discrepa del proceso de valoración orgánica, se producen desajustes psicológicos, llevando a la persona a desconfiar de su propia experiencia como guía de conducta.

Condiciones Suficientes y Necesarias para el Cambio Terapéutico:

1. Que dos personas estén en contacto terapéutico.
2. Que el cliente se encuentre en estado de incongruencia, vulnerabilidad o angustia.
3. Que el terapeuta sea congruente e integrado en la relación.
4. Que el terapeuta experimente una consideración positiva incondicional hacia el cliente.
5. Que el terapeuta experimente una comprensión empática del marco interno de referencia del cliente y trate de comunicarlo.
6. Que se logre la comunicación de la comprensión empática y de la consideración positiva incondicional al cliente.

Psicoterapias Experienciales: La Fuerza de la Vivencia

Como una variante humanista de la psicoterapia de Rogers, las psicoterapias experienciales destacan la necesidad de la experiencia directa para posibilitar el cambio.

Técnicas Experienciales Clave:

• Respuesta Experiencial: Focalización en las sensaciones sentidas en la situación actual.
• Participación del Cliente: El terapeuta expresa su propia experiencia en la situación actual.
• Focalización Experiencial: Imaginariamente se deja un hueco en el que depositar los problemas y se “coge” uno a uno cada problema y se examina en todas las direcciones.

Otras Técnicas Humanísticas Relevantes:

• Psicodrama
• Técnicas corporales y energéticas (ejercicios corporales destinados a eliminar bloqueos energéticos)