Protocolo de Actuación y Estrategias de Intervención Integral en Atención Temprana (CDIAT)

Estrategias de Intervención Integral en Centros de Desarrollo Infantil y Atención Temprana (CDIAT)

1. Atención al Niño

La intervención profesional en el CDIAT se centra en las necesidades específicas del menor, garantizando la máxima calidad y adecuación del servicio.

• Preparación especializada: El profesional o profesionales a cargo de la intervención contarán con preparación específica en función del tipo de trastorno del niño.
• Flexibilidad de sesiones: El número de sesiones y el tiempo de duración de cada una de ellas dependerán de las necesidades individuales del niño.
• Modalidad de tratamiento: En función de su edad y características, el tratamiento se podrá realizar en grupos reducidos (tres o cuatro niños como máximo) o de forma individual.

2. Atención a la Familia

El CDIAT debe conocer las necesidades de la familia y plantearse qué tipo de intervención o intervenciones pueden ser las más eficaces. Esta atención busca la adaptación y la comprensión de la situación por parte de los padres.

Objetivos y Principios de la Intervención Familiar:

• Apoyo y reflexión: Ayudar a los padres en la reflexión y en la adaptación a la nueva situación, dándoles la posibilidad de comprender mejor la situación y evitando que el problema se contemple centrado exclusivamente en el trastorno que padece el niño.
• Ajuste de expectativas: Facilitar que la familia adecúe sus expectativas a las posibilidades reales de la intervención y situar correctamente, desde el inicio, el papel que corresponde al profesional y el protagonismo que ellos también deben tomar.
• Modalidades de atención: La atención a la familia se podrá realizar de forma individual o en grupo, en función de la realidad y necesidades del momento.

Atención Individualizada: Diálogo y Comprensión

La atención individualizada tendrá como objeto prioritario abrir un espacio en el que tanto los profesionales como los mismos padres puedan dialogar e intercambiar información. Esta atención puede ser el medio propicio para que la familia transmita sus sentimientos, dificultades, esperanzas e ilusiones.

Los profesionales deben atender no solo los aspectos referentes al niño, sino también aquellas otras demandas familiares, no siempre fáciles de manifestar. Para todo ello, se debe utilizar un lenguaje comprensivo, ajustándose al marco social y cultural de cada familia.

3. Atención a la Escuela

La coordinación con el entorno educativo es fundamental para asegurar la integración y el desarrollo continuo del niño.

• Información inicial: Los profesionales de los CDIAT deben informar a la escuela sobre la situación del niño y de la familia en el momento de integrarse en ella.
• Colaboración pedagógica: En colaboración con el equipo escolar y los educadores, se podrán fijar espacios en los que se revisen o se discutan:
  • Los objetivos pedagógicos.
  • Las estrategias de aprendizaje.
  • La utilización de recursos materiales o personales.

4. Intervención en el Entorno

La intervención en el entorno tiene como objetivo la superación de barreras físicas y sociales, y se debe realizar teniendo en cuenta el entorno natural de cada niño y familia.

Desde los CDIAT se deben diseñar estrategias para la adaptación del entorno a las necesidades de los niños. Esta actuación sobre el entorno tiene por objetivo:

• Superar las diferencias.
• Cambiar las actitudes.
• Eliminar barreras físicas y socioculturales.

5. Evaluación y Seguimiento

La evaluación es un proceso integral con el que se valoran los cambios producidos en el desarrollo del niño y en su entorno, así como la eficacia de los métodos utilizados.

La evaluación debe incidir sobre todos los aspectos de la intervención y en ella pueden considerarse dos tiempos:

1. Evaluación continuada.
2. Evaluación final.

6. Derivación y Cierre del Servicio

El periodo de atención de un niño en un CDIAT finaliza cuando se considera que por su positiva evolución no precisa de este servicio o en el momento en que, por razones de edad o de competencias, debe continuarse su atención por otro dispositivo asistencial.

En ambos casos, la familia tiene derecho a recibir información oral y un informe escrito que sintetice la evolución del niño y la situación actual, así como las necesidades que se consideren precisas para el futuro.