Poesía y Literatura Hispánica a Principios del Siglo XX: Modernismo y Generación del 98
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El Periodo de Renovación en la Lengua Española (1880-1914)
El periodo que transcurre entre 1880 y 1914 supone una gran renovación en la lengua española. Así, escritores de diferentes nacionalidades, como Antonio Machado y Rubén Darío, convivirán en el margen de estos años llevando a cabo una revolución que marcará el devenir de la literatura posterior.
1. Poesía a Principios de Siglo
Desde 1885, se observa una corriente poética de tipo inconformista relacionada con la "crisis de la conciencia burguesa". Aunque hay autores de diferentes estilos y muchas tendencias, encontramos dos puntos comunes a todas ellas:
- Rechazo al Realismo de la época y vuelta a corrientes irracionalistas y sentimentales. Así, en nuestro país, frente a Núñez de Arce y Campoamor, se imponen nuevos contenidos y formas.
- Rebelión contra la sociedad industrializada y burguesa del siglo XIX.
En los países hispánicos, a la renovación marcada por estas dos tendencias se le dará el nombre de Modernismo. Además, partirá desde la otra parte del Atlántico con autores como Gutiérrez Nájera, José Martí y, sobre todo, Rubén Darío.
Influencias Literarias en el Modernismo
Las bases ideológicas y estéticas de este movimiento están muy influidas por la poesía posromántica de Bécquer y por los movimientos franceses como:
- Prerrafaelismo: Popularizó la imagen de la donna angelicata y de los motivos medievales, que constituyen su mundo ideal.
- Parnasianismo: Sus creadores aspiran a practicar el "arte por el arte", es decir, crear poemas bellos y perfectos sin mayor pretensión. Ponen de moda motivos de culturas exóticas y los poemas se llenan de faunos, cisnes, califas o jardines versallescos.
- Simbolismo: Creado en Francia por Charles Baudelaire, su intención, como afirma Baudelaire en Las flores del mal, es transmitir las "voces profundas", las correspondencias ocultas que unen lo que vemos. La única persona que ve esa realidad invisible e inefable es el poeta y, por eso, es quien debe expresarla por medio de símbolos. Fue la tendencia que más influyó en España, sobre todo en Antonio Machado y Azorín.
- Decadentismo: La búsqueda de la belleza es prioritaria y se hace en lo vulgar y simple. Eligen como temas los aspectos sexuales más censurados o los "paraísos artificiales". Pretenden evadirse mediante la exploración de lo irracional, de los "placeres prohibidos" e incluso de lo perverso, de ahí que exalten como modelo de vida a los "malditos", los poetas con vidas bohemias, desordenadas, noctámbulas. En España, su exponente es Valle-Inclán, que lo une al Expresionismo.
2. Modernismo y Generación del 98: Características Temáticas y Formales
Modernismo y Generación del 98 son las marcas de la literatura hispánica de principios del siglo XX. Existe cierta controversia; durante años, los críticos han defendido que estos dos sean movimientos opuestos, pero desde hace algunos años defienden que se deben analizar como iguales. Ambas se inclinan hacia el subjetivismo, abarcan la filosofía de Nietzsche y reciben influencias del Parnasianismo y Simbolismo. Ambas sienten la crisis y reaccionan ante ella, aunque tratando de ir a los cimientos del país para poder salvarlo, mientras que el modernista se evade de lo que le duele.
El Modernismo
El Modernismo es el movimiento de ruptura con la estética vigente; se inicia en 1880 y se extiende hasta 1914. Como género, se desarrolla principalmente la poesía, pero también el teatro y la novela, y se caracteriza por su tono intimista y subjetivo. El impulso inicial viene de Hispanoamérica con Rubén Darío y José Martí (Ismaelillo).
El Modernismo hereda del Romanticismo el amor, el cosmopolitismo y el gusto por reflejar los estados de ánimo en la naturaleza. Sin embargo, al modernista le interesa la naturaleza artificial y el deseo de evasión hacia el pasado, lugares exóticos o paraísos artificiales. Supone una gran renovación en lenguaje y métrica por la presencia de versos alejandrinos y cláusulas, y por la utilización de un lenguaje exótico, sinestesias, epítetos, símbolos... En España destaca Manuel Machado con Alma.
La Generación del 98
De forma paralela al Modernismo, en España, un grupo de jóvenes también desencantados con la realidad buscan nuevas concepciones estéticas y formales para expresar dicho sentimiento. Se trata de la Generación del 98, con autores como Baroja, Azorín, Unamuno, Maeztu, Valle-Inclán y, en menor medida, Benavente y Rubén Darío.
Los autores del 98 se decantan por un estilo sobrio, antirretórico. Los temas giran en torno a la preocupación por España, el Regeneracionismo, la descripción del paisaje y las reflexiones existenciales y religiosas. La novela y el ensayo fueron los géneros más utilizados. Se pueden distinguir dos tendencias: la herencia ideológica alemana, con asuntos relacionados con la existencia, como El Cristo de Velázquez de Unamuno; y la herencia simbolista francesa, como Campos de Castilla de Machado.
Rubén Darío: Síntesis del Modernismo
Las obras de Rubén Darío son una excelente síntesis del Modernismo. Su primera obra se denomina Abrojos, pero es a partir de 1888 cuando irrumpe en el panorama literario. Se distinguen dos etapas:
- Primera etapa: Se caracteriza por la musicalidad y por el deseo de evasión. Destacan Azul, que es la obra del Modernismo, recoge 20 historias breves y 6 composiciones poéticas, y exalta el amor como algo relacionado con la naturaleza. Prosas Profanas supone la plenitud de su poesía, exalta también el amor, pero ahora relacionado con el arte.
- Segunda etapa: Se caracteriza por un cambio en estilo y temas, con un tono más intimista y reflexivo. Introduce temas sociales, políticos y filosóficos. La obra más importante es Cantos de vida y esperanza, en ella se tratan temas como el paso del tiempo o la religión.
El ritmo es fundamental en sus obras, supone una revolución en la métrica castellana. En prosa destaca Cuentos fantásticos y hay muchos poemas en periódicos que no están recogidos.
Antonio Machado: Del Modernismo a la Profundidad Temática
Las obras de Machado evolucionan desde el Modernismo hacia temas más profundos, de ahí que sea muy difícil su inclusión en algún movimiento. Su evolución se divide en tres etapas:
- Primera etapa: Estuvo influenciada por el Modernismo, la poesía de Bécquer y el simbolismo francés. Su primer libro fue Soledades, en él se aprecia el modernismo y el simbolismo. Los temas son el fluir de la vida, la soledad, la infancia perdida. La métrica es muy variada, desde versos de 16 sílabas hasta hexasílabos.
- Segunda etapa: Se realiza hacia fuera, es decir, hacia los hombres. Su obra más importante es Campos de Castilla; añade descripciones de paisajes y gente de Castilla, reflexiones sobre la existencia de Dios y el "problema de España". Machado deja atrás la melancolía, pero tras la muerte de su mujer se inspira en una serie de poemas en honor a Soria y Leonor, destacando A José María Palacio. Destaca también La tierra de Álvaro González, en este poema muestra la crueldad y la codicia. El poemario finaliza con una serie de elogios, como A Don Francisco Giner de los Ríos.
- Tercera etapa: El siguiente libro que escribe es Nuevas canciones; algunos de sus poemas se centran en el paisaje andaluz y en Soria. Lo más característico son los temas filosóficos que trata, como se ve en Proverbios y Cantares. Machado finaliza su obra con Canciones a Guiomar y Poesías de Guerra, entre las que destaca la elegía a García Lorca ("El crimen fue en Granada").