Perspectivas sobre la Divinidad: Del Ateísmo al Diálogo Interreligioso Cristiano
Enviado por Chuletator online y clasificado en Religión
Escrito el en español con un tamaño de 3,84 KB
Modos de la Relación con lo Divino
El Ateísmo: Ayer y Hoy
El ateísmo contemporáneo se manifiesta a través de diversas posturas, a menudo arraigadas en la reflexión sobre la existencia y la naturaleza del universo y la condición humana.
Ateísmo por el Silencio Divino ante Enigmas Universales y el Problema del Mal
Una corriente atea surge de la aparente ausencia de respuesta divina ante los grandes interrogantes del universo y la existencia humana, así como ante el sufrimiento y el mal que permean el mundo. Para el ateísmo, el agnosticismo y la indiferencia religiosa, la no existencia de Dios parece ofrecer una explicación más coherente para:
- El origen, la estructura y la dinámica del universo.
- La aparición del ser humano como fruto del azar en el marco de una materia en evolución.
Las modernas teorías científicas, que postulan un universo autosuficiente, refuerzan esta visión. Desde esta perspectiva, ni el mundo ni el ser humano han necesitado de una deidad para existir. Los no creyentes argumentan que no hay razones suficientes para postular la existencia de Dios, especialmente ante el persistente silencio divino frente al dolor y el sufrimiento global.
Ateísmo por la Creencia en la Creación Neuronal de Dios
Otra perspectiva atea, sostenida por algunos neurocientíficos en lo que se ha denominado el nuevo teísmo, propone que Dios es una creación del cerebro humano. La tesis fundamental es que la fe en Dios no depende de la existencia real de una deidad, sino de la capacidad del cerebro para generar procesos mentales complejos, como el sentimiento religioso. En esencia, Dios sería una construcción neuronal.
El Testimonio Cristiano en un Mundo Multirreligioso
El Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso, en colaboración con el Consejo Mundial de las Iglesias, ha trabajado durante años para establecer principios prácticos y concretos que guíen a los cristianos en su comunión y acción con creyentes de otras grandes tradiciones religiosas. Estas propuestas, alineadas con los principios del Evangelio, son las siguientes:
- Amor Divino como Modelo: Actuar hacia los demás con el mismo amor con el que Dios nos ama (Mateo 22,30-40).
- Ejemplo de Jesús: Seguir el ejemplo de Jesús, quien se compadeció de los más necesitados (Juan 20,21-23).
- Práctica de Virtudes: Cultivar virtudes como la integridad, la caridad, la compasión y la humildad (Gálatas 5,22).
- Compromiso Desinteresado: Dedicarse sin esperar recompensa en ámbitos de servicio a los demás y de búsqueda de justicia (educación, sanidad, justicia, economía, etc.) (Mateo 25,45).
- No Violencia: Actuar desde la no violencia en las relaciones familiares, profesionales y de amistad (Mateo 5,9).
- Defensa de la Libertad Religiosa: Proteger la libre práctica religiosa, respetando el principio de cada fe, sin manipulación ni instrumentalización para fines inhumanos.
- Respeto a la Diversidad: Valorar la diversidad de religiones y culturas, considerando las diferencias como una oportunidad de enriquecimiento personal.
- Conocimiento y Valoración: Conocer, apreciar y valorar otras creencias, evitando la propagación de falsedades sobre ellas.
- Construcción de Relaciones: Fortalecer relaciones personales y comunitarias con otras religiones para facilitar el entendimiento mutuo y el testimonio de la propia fe.
- Cooperación Solidaria: Comprometerse a cooperar con creyentes de otras religiones en proyectos conjuntos de solidaridad, justicia y paz.