El Pensamiento de Platón: Ideas, Política y Cosmología
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El Pensamiento de Platón
La Política de Platón
Platón idealizaba una aristocracia basada en la capacidad intelectual y la preparación científica y filosófica. El Estado ideal, según su visión, es aquel en el que cada ciudadano cumple con la función para la que está más capacitado. Esta idea se refleja en su utopía platónica: productores, guardianes y gobernantes deben hacer uso de sus cualidades o virtudes respectivas para que reine la justicia general.
Entre las formas de gobierno analizadas por Platón, este es su orden de preferencia:
- Aristocracia: El gobierno de los mejores.
- Timocracia: El gobierno de los que tienen cierta renta y honor.
- Oligarquía: Se llega a esta forma de gobierno cuando el rico gobierna y el pobre no participa del poder.
- Democracia: El gobierno del pueblo; todos son iguales. Platón la consideraba una perversión del orden y la fuerza, un régimen deplorable porque la inclinación desenfrenada por la libertad conduce a eliminar del poder a las personas más preparadas y a despreciar las leyes.
- Tiranía: La degradación de la política. La peor forma de gobierno.
La Educación según Platón
La Educación: El objetivo supremo de la educación es el intento personal de hacerse lo mejor posible a uno mismo, buscando la verdad. En La República, Platón define la educación como el arte de conducir al hombre hacia la Verdad, hacia el Mundo de las Ideas; salir de la cueva hacia la claridad del sol. La finalidad de la educación es doble: de forma inmediata, se pretende formar hombres capaces de gobernar; de forma profunda, llegar a descubrir la Verdad.
El programa educativo de La República se divide en dos partes:
- La primera se refiere a la educación de la clase de los guardianes (educación física; educación musical para modelar el carácter; preparación en hábitos buenos, autocontrol, etc.). La mayoría se quedará aquí.
- La segunda parte, para aquellos que posean las cualidades adecuadas: inteligencia, moderación, amor a la verdad y la justicia, deberán adquirir la Ciencia suprema que les llevará a captar las Formas Eternas. Ésta es la educación superior de los filósofos gobernantes, que les llevará a la comprensión de las verdades eternas. El objetivo es formar la clase dirigente, el gobierno de los sabios. La clase social más dotada es la que conoce la Idea del Bien y la promueva. Para ello, se elegirán a los mejores entre los guardianes, se les dará una preparación rigurosa en conocimientos científicos y en Filosofía, profundizando en la Teoría de las Ideas, y utilizando el método de la dialéctica.
En su obra Las Leyes, Platón se ocupa también de una especie de educación general para la mayoría de los ciudadanos, con objetivos más pragmáticos, y de la educación primera de los niños.
Volviendo a la educación superior y a su relación con la política, Platón afirma que el buen gobierno es el arte de crear la ciudad perfecta y feliz. Hay que seleccionar hombres justos que sean capaces de esto. En La República, Platón hace una propuesta de sujeción de toda la comunidad a una clase gobernante aristocrática. Afirma que todos serán felices cuando cada cual realiza su tarea y practica aquellas virtudes que corresponden al grupo social al que pertenece.
La Cosmología de Platón
Cosmología: La Teoría de las Ideas es también la base de la explicación del cosmos, aunque recoge muchos elementos de la filosofía presocrática. Platón recurre aquí a la figura de una inteligencia ordenadora, de un artífice divino, el Demiurgo —inspirado probablemente en el nous de Anaxágoras—, que ha ordenado una materia caótica y eterna, sometida al movimiento, y lo ha hecho en un espacio también eterno, siguiendo el modelo del mundo de las ideas. Así surge un universo ordenado, un cosmos, el mejor y más bello de los mundos posibles, dada la bondad del Demiurgo.
El Demiurgo da forma al cosmos como a un organismo vivo y le ha dotado de alma (el alma del mundo) que lo mueve todo. Explica el movimiento cósmico recurriendo a la idea de armonía de las esferas de Pitágoras. En cuanto a las almas de los seres humanos, están hechas del mismo material que el alma cósmica, y participan, por tanto, de los dos mundos.
Con su cosmología, Platón introduce una explicación teleológica, finalista, del universo. El Demiurgo es una inteligencia que actúa con una finalidad: trasladar el orden y la belleza de las ideas a la materia. No debe interpretarse como un dios creador (ajeno a la mentalidad griega), sino como una inteligencia ordenadora a partir de unos elementos que ya existían. El Demiurgo (divino artesano) es el símbolo de la fuente y origen de la vida: es el HACEDOR, pero tomando como modelo las Formas o Ideas preexistentes en el mundo de las Ideas. Crea así el alma del Universo, la parte inmortal del alma humana, y a los propios dioses (fuerzas sobrehumanas al servicio del bien, a los cuales parece atribuir la creación de todo lo físico y lo mortal).