El Pensamiento Crítico de Kant: Metafísica, Ética y los Postulados de la Razón Práctica

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La Filosofía Crítica de Kant: Razón Pura y Razón Práctica

La Razón Pura y los Límites de la Metafísica (Dialéctica Trascendental)

Finalmente, Kant estudia la razón y si la metafísica es posible como ciencia (en la Dialéctica Trascendental). La razón es la capacidad de unificar los juicios del entendimiento, creando teorías cada vez más generales. Surge así la metafísica, que busca estudiar y conocer las realidades más allá de la experiencia, en el ámbito nouménico, los trascendentales: Dios, Alma y el Mundo como totalidad.

Para ello, la razón aplica las intuiciones puras de la sensibilidad y las categorías del entendimiento sobre objetos que no son de experiencia, sobre el noúmeno, y por tanto su conocimiento es ilegítimo y siempre da lugar a contradicciones. Sin embargo, Kant reconoce que es una tendencia natural de la razón la búsqueda de un saber incondicionado que no está limitado por la experiencia, y que por ello no puede dejar de preguntarse acerca de estos problemas.

Las ideas metafísicas de Dios, Alma y el Mundo como totalidad expresan el ideal de la razón, el deseo del conocimiento absoluto que es inalcanzable, pero gracias a él es posible el progreso en el conocimiento científico.

La Ética Formal de Kant: De la Moral Material a la Autonomía

Kant comienza haciendo una distinción entre dos tipos de sistemas éticos generales: las éticas materiales y la ética formal.

Crítica a las Éticas Materiales

Kant critica las éticas materiales porque presentan las siguientes características:

  • Son empíricas (a posteriori): Establecen una finalidad o bien basándose en la experiencia.
  • Sus normas o preceptos son hipotéticos: Dependen del fin establecido.
  • Mantienen una moral heterónoma: La norma no surge de la propia razón, sino que es determinada por algo exterior al sujeto.

Defensa de la Ética Formal

Frente a ellas, Kant defiende la ética formal, que es vacía de contenido empírico. Lo moral no depende de ninguna finalidad, y se caracteriza por ser:

  • A priori y universal: El valor moral de una acción no se determina por la experiencia.
  • Preceptos categóricos: Su cumplimiento es obligado sin esperar conseguir ningún fin.
  • Moral autónoma: Está determinada por la propia razón a priori del sujeto.

Los Postulados de la Razón Práctica

Además, Kant ofrece tres postulados de la razón práctica, que son exigencias necesarias para que la moralidad tenga sentido:

  1. La Libertad: Es el único postulado comprobado en la práctica, pues la existencia en nuestra razón de la exigencia de obrar por deber supone la libertad como algo previo para poder ser capaces de vencer nuestras inclinaciones e intereses.
  2. El Alma Inmortal: Es una exigencia de la razón práctica, pues el cumplimiento del deber al que nos sentimos obligados moralmente nunca acaba en esta vida, requiriendo un progreso infinito.
  3. La Existencia de Dios: Es una exigencia de la razón práctica, ya que nuestra razón establece una identificación entre la virtud y la felicidad que no se da en nosotros en el mundo sensible. Por lo tanto, dicha unión se afirma como realizada en Dios.

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