El Nuevo Cine Alemán, Polaco y Checo: Historia y Representación
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Nuevo Cine Alemán
El primer factor es el Holocausto, la Segunda Guerra Mundial y el nazismo. Sentimiento de culpa no resuelto. Cuando EE. UU. se hace con Alemania, estrenan películas que no se pudieron mostrar anteriormente y el cine clásico americano invade Alemania. La demanda de cine aumenta tras el fin de la guerra y, sobre todo de forma local, se produce un cine muy nacionalista y patriótico, dominado por cineastas que habían trabajado bajo órdenes de Goebbels y se traducirá en dos clases de películas:
- El cine de escombros: Tipo de cine que retrata a Alemania como un país con una gran voluntad de reconstrucción, fuerza y energía para volver a ser una nación unida.
- Heimatfilms: Proveniente de la palabra alemana Heimat (paisaje, nación). Son películas plácidas, siempre relacionadas con la pertenencia a la patria alemana, negando de forma subliminal su culpa acerca del Holocausto.
En 1962, los “hijos de los buenos alemanes” traerán el nuevo cine alemán con el Manifiesto de Oberhausen. 26 directores liderados por Alexander Kluge rompen la tradición y empiezan de nuevo. “El viejo cine ha muerto, creemos en el nuevo”. Este movimiento acaba en 1979 y se define por recordarle al pueblo alemán cuál fue su culpa y su responsabilidad histórica.
El gobierno fundó el curatorium, un organismo que otorgaba subvenciones a cineastas que quisieran rodar su ópera prima. El problema vino cuando sus óperas primas no tuvieron el éxito suficiente como para mantener sus carreras. Esto generó envidias entre los cineastas más internacionales y las grandes productoras alemanas, que se quejaron hasta conseguir que se aprobara un decreto que diera convenciones a las producciones más comerciales. De cada entrada que se vendía, una parte se convertiría en subvenciones que dependían del éxito en taquilla, por lo que los productores solo querían hacer películas cuanto más comerciales, mejor.
Alexander Kluge: Impulsor del nuevo cine alemán. Fundador de la escuela de cine de Ulm. Primer cineasta en conseguir un gran premio internacional. Su filmografía es muy compleja, basada en el montaje, gran pensador, que rechaza al público, etc.
Volker Schlöndorff: Otro pionero del movimiento, su primera película “El joven Törless” ganó el premio de la crítica del festival de Cannes. Schlöndorff sugiere a través del personaje antagonista que el discurso nazi tiene en su origen la banalidad del mal. El joven Törless representa la pasividad del pueblo alemán, está en todas las reuniones, pero no evita que acosen a Basini. Schlöndorff es el más clásico de los cineastas del nuevo cine alemán, siempre tuvo claro que quería llegar al gran público, se alió con coproductores extranjeros (a veces americanos) y por ello se le criticó bastante en su momento.
Werner Herzog: Relacionado con el cine documental, también ha hecho alguna ficción, aunque en toda su filmografía se puede notar una fascinación por Estados Unidos y la cultura americana. Es un cineasta singular, que entiende el cine como una aventura donde te pones en peligro y como un viaje a otras culturas y mundos que no conoces, para ofrecer su mirada singular sobre ese país. Lo que no significa que no le preocupe Alemania. Su película más destacada es “Aguirre, la cólera de Dios” donde quiso replicar el viaje de Lope de Aguirre en busca del Dorado, internándose en la selva amazónica y poniéndose a sí mismo y a su equipo en peligro. Aguirre es Hitler, Herzog se imaginó el discurso que pensó en el búnker cuando estaba siendo rodeado y derrotado y, aún así, siguió pensando que podría ganar y expandir el Tercer Reich por todo el mundo. Siente una fascinación por la locura. Otro tema básico en su filmografía es la naturaleza y la relación que tiene el hombre con ella. La naturaleza siempre acaba demostrando su poder destructor por encima de la acción humana.
Rainer Werner Fassbinder: Es una de las grandes figuras del nuevo cine alemán, murió de sobredosis a los 39 años. En 15 años rodó más de 40 películas, tenía una compañía de teatro, escribió varias obras, libros, etc. Era un genio, pero un maltratador con muchos de sus trabajadores y parejas (bisexual). Trabajó mucho con el melodrama. Su puesta en escena era muy pensada y rígida, con grandes influencias del teatro. Siempre trabajaba con los mismos actores y equipo técnico, formando una especie de familia disfuncional y creando una red de dependencias creativas a base de abusos y maltratos. Era especialmente sensible a los retratos femeninos, donde dedicó 3 películas a analizar la historia alemana de la posguerra y el milagro económico a través del melodrama. Una trilogía protagonizada por tres mujeres: “El matrimonio de María Braun”, “Lola” y “La ansiedad de Veronika Voss”, a la que se le llamó la trilogía alemana.
El matrimonio de María Braun (1978): Una mujer consigue escalar socialmente a través del estraperlo y la prostitución durante la Alemania de la posguerra, mientras espera a que vuelva su amante de la guerra. María encarna a Alemania, abrazándose a Estados Unidos (encarnado por un general negro llamado Bill), dejando atrás su pasado y desafiando la xenofobia, etc.
Nuevo Cine Polaco
El nuevo cine polaco aparece en 1956, es el primer "nuevo cine" donde se eleva la voz crítica en contra del totalitarismo ruso. Aprovecharon una brecha histórica en la URSS para conseguir una mayor libertad de expresión, siempre desde la conciencia de la posibilidad de ser disidentes. Con el tiempo, se dejó espacio para el crecimiento de ciertos movimientos. A nivel industrial, esto generó una brecha también. En un principio, el cine estaba muy centralizado, MOSFILM tenía un gran estudio en Rusia desde donde el estado controlaba todas las producciones cinematográficas de la URSS y las distribuía al resto del bloque. Posteriormente, se diversificó la producción, pero el estado seguía ejerciendo una visión censora, aunque con mayores libertades temáticas.
Polonia fue un país muy maltratado durante y después de la Segunda Guerra Mundial, así que cuando finalmente se pudo hablar desde un marco autoral, los nuevos cineastas decidieron examinar qué es Polonia y cómo afectó su pasado reciente a su presente.
Andrzej Wajda: Analizó la historia de Polonia desde los 60s hasta su muerte el año pasado. Su película más significativa es “Cenizas y Diamantes”, la cual es un compendio de toda su obra y de muchos temas que definen el nuevo cine polaco.
Cenizas y Diamantes (1958): El tema central que aborda esta película es el cuestionamiento de la figura del héroe. Una vez terminada la ocupación nazi, el protagonista debe enfrentarse a la ocupación soviética, lo que le genera un conflicto interno en Polonia. Muestra el conflicto entre las emociones y el deber hacia la patria.
Andrzej Munk: Su carrera acabó cuando murió en un accidente de coche a los 30 años, dejando inacabada la película más potente de su filmografía. Su muerte marcó el final de la primera etapa del nuevo cine polaco.
Jerzy Kawalerowicz: En este periodo de libertad de expresión se hicieron películas que sacaban a la luz la gran contradicción polaca, pues es un país extremadamente católico dominado por el bloque comunista.
Maria Juana de los Ángeles (1961): Una película que acusa a las autoridades eclesiásticas de ser poco religiosas. A la URSS no le gustaba que se representaran figuras eclesiásticas en el cine.
Roman Polanski: Critica las actitudes claustrofóbicas de la nueva sociedad polaca, pero cuando Kruschev deja el cargo en 1964 y Brezhnev lo asume, se pierde la época de disidencia, pues la URSS también cambia de gobernante y se vuelve más dura con la censura y la represión. En ese momento tuvo que exiliarse debido al mal recibimiento de “El cuchillo en el agua”.
El Nuevo Cine Checo
A parte de pertenecer al bloque soviético, el nuevo cine checo nace de la lucha contra la censura, la burocracia y la represión artística, pero el caldo de cultivo es literario, por lo que el teatro y la literatura serán vitales para este movimiento. En los 50 aparecen Bohumil Hrabal y Milan Kundera, escritores que gestan literatura basada en la fragmentación, discontinuidad y el humor negro, marcando el registro y el estilo del nuevo cine checo. En 1973, se celebra en Praga la reedición de la obra de Kafka y su manera de acercarse a lo absurdo y al humor negro para luchar contra el poder establecido, influye mucho a estos artistas.
El cine checo es ligero, cotidiano, absurdo y atraviesa temas difíciles con humor.
Perlitas al fondo del mar: Es un libro de Bohumil Hrabal compuesto por relatos cortos que se adaptó al cine. Cada uno de los que luego serán grandes directores adaptó uno de los cuentos y el libro se acabó convirtiendo en una especie de manifiesto del movimiento.
La Nova Vlna abarca desde 1964 hasta 1968 con la primavera de Praga. Se fraguó a través de la FAMU (la academia de cine de Checoslovaquia) donde los propios profesores traían ilegalmente películas del resto de movimientos contemporáneos de Europa, como la Nouvelle Vague, el New Cinema, etc. Se pueden distinguir dos vertientes: una más dada a la experimentación más vanguardista, influenciada por otros nuevos cines europeos, y otra de realismo crítico, retratando la vida cotidiana de los checos de la época a través de un punto de vista humorístico y crítico hacia las condiciones de vida durante el periodo de ocupación soviética.
Milos Forman: Hizo tres películas en este breve periodo, la primera siendo “Pedro el grande”, la segunda “Los amores de una rubia” y la última “Al fuego, bomberos”, esta última es prohibida y tiene que exiliarse a Estados Unidos, donde será galardonado y alabado como parte del New Hollywood.
Los amores de una rubia (1965): Trata sobre un pueblo donde mayoritariamente hay mujeres trabajadoras de una fábrica de zapatos, que son asaltadas por militares en busca de novias. Toda la película está atravesada de humor, desde el absurdo al más realista. Como todo lo que no tocaba la ideología era libre de aparecer en pantalla, esta película tiene secuencias muy francas en su desnudez.
Věra Chytilová: Su obra es relevante dentro de la nueva ola de cine checo porque mezcla una tradición del cine experimental, del underground americano, de la animación y el slapstick para introducir a través de ellas un discurso feminista. Ella se adelanta un poco a la contracultura y le da un valor subversivo al feminismo con películas como “Las Margaritas”, dándole su propia voz al movimiento. Un año más tarde llegarán los tanques rusos en la primavera de Praga de 1968.