La novela española de posguerra: Existencialismo, realismo y la obra de Carmen Laforet
Enviado por Chuletator online y clasificado en Lengua y literatura
Escrito el en español con un tamaño de 4,93 KB
La novela española a partir de 1936
En la literatura española de posguerra se distinguen tres etapas principales:
La década de los 40: Aislamiento y existencialismo
Esta década estuvo caracterizada por:
- El aislamiento cultural y político del país.
- La ruptura con el pasado literario como consecuencia de la Guerra Civil.
- El exilio de muchos escritores.
- La imposición de una severa censura.
Surgieron distintas corrientes narrativas:
- Novela existencial: Influida por el existencialismo europeo (Jean-Paul Sartre con La náusea, Albert Camus con El extranjero y La peste), que se cuestiona el sentido de la existencia.
- Novela tremendista: Con Camilo José Cela y su obra La familia de Pascual Duarte (1942) como máximo exponente, trazando el mundo de la violencia gratuita y de la miseria posbélica.
- Novela realista tradicional.
Rasgos generales de la novela existencial:
- Temática: Miseria y sordidez de la vida cotidiana, frustración y angustia personal, inadaptación social y la muerte.
- Personajes: Desarraigados, desorientados o marginados.
- Técnicas narrativas: Predominio de las técnicas de la novela realista tradicional.
- Autores representativos: Miguel Delibes con La sombra del ciprés es alargada y Carmen Laforet con Nada.
La década de los 50: Realismo social (Neorrealismo)
Dominada por la literatura neorrealista, también llamada realismo social. Los autores tratan de reproducir fielmente la realidad social en la que se encuentran, con una clara intención social y una estética realista. Obras destacadas incluyen La colmena de Cela, El Jarama de Sánchez Ferlosio y Entre visillos de Carmen Martín Gaite.
A partir de los años 60: Renovación narrativa
Se produce una importante renovación de las técnicas narrativas, influenciada tanto por autores españoles como Luis Martín Santos (Tiempo de Silencio) como por la nueva novela hispanoamericana (García Márquez, Vargas Llosa, Carlos Fuentes, Juan Rulfo, Julio Cortázar, etc.).
Biografía de Carmen Laforet
Nacida en 1921 en Barcelona, Carmen Laforet se instala con su familia en Canarias durante su infancia y regresa a Barcelona a los 18 años. Posteriormente, se traslada a Madrid, donde escribe su primera novela, Nada, con la que gana el prestigioso Premio Nadal en 1945. En 1946 se casa con el periodista Manuel Cerezales, con quien tiene 5 hijos y del que se separa en 1970. Su vida, a menudo descrita como errática, la llevó a pasar temporadas en Roma y Tánger. Falleció en 2004, tras un largo retiro de la vida social y literaria.
La obra de Carmen Laforet
La producción narrativa de Carmen Laforet se puede agrupar en dos trilogías, una centrada en el mundo femenino y otra en el masculino, cuyo tema común es la evolución de la adolescencia a la madurez. Presenta un conjunto narrativo basado en el crecimiento personal. Algunas de sus obras más relevantes son:
- La isla y los demonios
- La insolación
- Nada
- Al volver la esquina
- La mujer nueva
- Jaque mate
Contexto histórico-literario de Nada
La novela Nada se sitúa en un marco histórico coetáneo a su escritura y refleja la situación inmediata de la posguerra española sin idealización, empleando un realismo objetivista. La obra se centra fundamentalmente en el universo individual y en el drama humano, más que en la problemática social colectiva.
Los temas existenciales impregnan la atmósfera vital de Nada, donde predominan los personajes sin rumbo, desorientados y angustiados. Se observan claras referencias a la corriente existencialista, como se evidencia, por ejemplo, en la reflexión del capítulo IV: «¡Cuántos días sin importancia...!».
Nada es considerada también como un antecedente del realismo social de los años 50, ya que refleja la realidad contemporánea con un estilo sencillo. Sin embargo, está exenta de una denuncia explícita de las injusticias sociales y carece de una crítica social directa. Los personajes viven en conflicto con la sociedad que les rodea, pero buscan soluciones individuales a sus problemas, sin pretender transformar el mundo.