Nietzsche: La Voluntad de Poder como Motor de la Existencia
Enviado por Programa Chuletas y clasificado en Psicología y Sociología
Escrito el en español con un tamaño de 4,57 KB
La Voluntad de Poder y la Vida según Nietzsche: Un Análisis Profundo
La convicción que permite a Nietzsche tanto criticar como proponer una alternativa a la cultura occidental se centra en la interrelación entre las nociones cruciales de voluntad de poder y vida. La voluntad de poder es la energía vital que nos lleva a actuar con el fin de autoafirmarnos. Es el entusiasmo o pasión que nos empuja a realizar determinadas acciones.
Características de la Voluntad de Poder
- Inconsciente: Es irreflexiva, no es ni deseo ni obligación. Es un impulso.
- Previa a la razón: Razón y pensamiento son manejados por los instintos. Según sea nuestro cuerpo, así será nuestra razón.
- Peculiar: La voluntad de poder siempre es cambiante y diferente.
- Exige resistencia: Para afirmarse necesita oposición; solo venciéndola consigue un argumento de poder.
- Necesita dolor: La voluntad de poder es siempre ruptura de equilibrio; necesita de la sensación desagradable para crecer. Su visión del hombre es trágica.
- Carente de finalidad externa: La voluntad de poder se quiere por sí misma. No se busca para conseguir placer.
- Creativa: La voluntad de poder es voluntad de crear. La mejor manera de afirmarse es marcando las diferencias, imponiendo nuestra visión del mundo.
- Libre: La voluntad de poder es libertad, entendida como hacer lo que nos pide el cuerpo. Mi libertad acaba donde acaba mi fuerza, mi voluntad de poder.
- Diversa: Tiene manifestaciones múltiples entre individuos, lugares y momentos diferentes. Su abanico de acciones puede abarcar desde la crueldad hasta la generosidad.
La Noción Nietzscheana de Vida
Interrelacionada con la voluntad de poder aparece la noción nietzscheana de vida. La vida es energía, potencia, fuerza (calificativos utilizados al hablar de la voluntad de poder). Ambas nociones se igualan, se coimplican. La voluntad de poder aspira a afirmar la vida; es un instinto de vida, y cualquier ser vivo pretende crecer y superarse.
La voluntad de poder es como el músculo de la vida: a una voluntad más fuerte le corresponde una vida más fuerte.
Formas de Afrontar la Vida
Nos encontramos con dos formas de afrontar la vida: la ascendente y la descendente.
- Vida Ascendente: Se caracteriza por su afán de superación y su capacidad de ganar a las fuerzas que se resisten.
- Vida Descendente: Actúa a la defensiva. Se siente incapaz de oponer resistencia, es incapaz de vencer el combate de la vida. Es una voluntad de poder que se vuelve contra sí misma. Sigue siendo una protección de vida, solo que una vida que degenera y que solo puede sobrevivir bajando los umbrales de lo vivo, paralizando la vida. Quiere debilidad porque es débil. Obviamente, no es una vida creativa; más que vivir, sobrevive.
Las alternativas son dos: la negación de la vida y la potenciación de la pasión; decir sí a la vida.
Diferencias Clave entre Vida Ascendente y Descendente
- Relación con el dolor: El mismo dolor puede ser visto de formas diferentes. La vida descendente puede morir por un veneno que en la vida ascendente serviría como reconstituyente. Para la vida descendente, el dolor es insatisfacción, tristeza. Su propuesta será aliviar el dolor a costa de negar la vida.
- Trato con los instintos: La opción de la vida descendente será eliminar toda "electricidad" (opción peligrosa) o moderar su potencial a niveles menos peligrosos. La vida ascendente sería asumir el riesgo, el peligro y reconducirlo a un mismo fin: nuestra afirmación.
El Vitalismo como Conclusión
La voluntad de poder marca sus posibilidades de actuación. La vida se convierte en criterio para valorar las acciones humanas. Podemos calificar la teoría de Nietzsche como vitalismo. Es la energía vital la que permite diferenciar y establecer jerarquías entre los seres humanos. El sentido de la vida no es trascendente; se encuentra en el cuerpo mismo, donde experimentamos nuestro contacto directo con lo terrenal que nos aborda. El vitalismo es la conclusión que se deriva de un pensamiento que propone como premisa la voluntad de poder, la fuerza vital.