Modelos Explicativos de la Motivación: Conductismo, Psicoanálisis, Humanismo y Cognitivismo

Enviado por Chuletator online y clasificado en Psicología y Sociología

Escrito el en español con un tamaño de 6,65 KB

Modelos Explicativos de la Motivación

Tesis Conductistas

Los modelos conductistas sostienen que los motivos se aprenden, no son inmutables. Explican la conducta como motivada por incentivos, premios o recompensas que reciben los sujetos contingentemente con sus respuestas. La fuente de la motivación conductual es el refuerzo extrínseco que se le proporciona a los sujetos para que aumenten sus hábitos o tendencias a actuar de una cierta manera.

La Perspectiva Psicoanalítica

Este modelo sitúa la fuente de la motivación en la sexualidad y en los modos en cómo se resuelvan los conflictos libidinales a lo largo del desarrollo en sus respectivas fases. El concepto central es el de la pulsión o impulso que hace que el organismo se mueva hacia un fin. Parte de una excitación corporal y suprime el estado de tensión cuando se logra el objeto.

Los Estilos Educativos Parentales

Los estudios clásicos de Winterbottom sobre la influencia en la motivación de los factores culturales y familiares muestran las diferencias entre los niños con baja y alta motivación de logro relacionadas con los estilos educativos parentales. Los padres que muestran estilos de alta motivación de logro ponen expectativas altas en las actividades y producciones que tienen que realizar sus hijos, mostrándoles las esperanzas puestas en ellos, incentivándolos hacia la superación, elogiando los pasos intermedios, alegrándose con los éxitos, haciendo que actúen de manera autónoma delante de situaciones nuevas. Por el contrario, los padres cuyo estilo es de baja motivación de logro, sus expectativas son menores, toman decisiones ellos, sin contar con los hijos, exigen comportamientos alejados de las capacidades de los niños, les regañan a menudo exhibiendo sus desaciertos y mostrándose continuamente frustrados por los resultados de sus hijos.

La Perspectiva Humanista

La perspectiva humanista, desarrollada por Abraham Maslow y Carl Rogers inicialmente, con aportaciones posteriores de Deci, da importancia a la motivación intrínseca como necesidad que tienen los sujetos de autorrealización, autonomía y autodeterminación. Piensan que todos los seres humanos tienen necesidad de desarrollar su potencial diferenciador, sus propios recursos internos, su sentido de competencia y de la autoestima, que es lo que, en realidad, le hace activar, dirigir y mantener su conducta. Dentro del movimiento genérico de la autoestima, se han desarrollado dos teorías básicas que son muy citadas en psicología de la motivación y, en este caso, dentro de la psicología humanística, como son: la jerarquía de las necesidades de Maslow y la teoría de la autodeterminación de Deci.

La Teoría Cognitivo-Social de la Motivación Social de Bandura

Los planteamientos de la teoría social de Bandura saltan desde las posiciones conductuales a las cognitivas. Inicialmente se acepta la explicación de la motivación desde la fórmula de la expectativa por el valor teórico, es decir, una persona actúa en función de las expectativas que desarrolla para alcanzar unos resultados y del valor que teóricamente le asigne a la meta que se propone. En cualquier etapa educativa los éxitos de los estudiantes en sus aprendizajes llevan a conseguir más éxitos y deseos de seguir aprendiendo para volver a tener de nuevo la experiencia de satisfacción, mientras que las experiencias repetidas de fracasos disminuyen el esfuerzo y el abandono de la actividad. La propuesta está en relación con los tipos de objetivos que se diseñen, que serán motivadores y no crearán frustraciones cuando sean específicos y operativos, y cuando sean alcanzables, ni muy fáciles ni muy difíciles.

La Teoría de la Autorregulación

La teoría de la autorregulación propone un aprendizaje activo, es decir, que sea el alumnado el que tome la iniciativa y la responsabilidad en su propia motivación, sin estar esperando a que sean los demás en quienes sistemáticamente recaiga el peso de estimularlos y reforzarlos. Si bien, todo el proceso estaría bajo la supervisión de los profesores, es el alumnado el que en clase llevaría los registros de su trabajo y sus producciones, y los que autoestablecerían metas de mejora. Por lo general, las conductas autorreguladas tienen más probabilidad de ser más intensas y permanentes en el tiempo que si no hay la posibilidad de elegir. Por ello, en las escuelas deben fomentarse situaciones donde los niños se vean inmersos en la utilización de criterios de selección de actividades y de autoevaluación, trabajando las habilidades necesarias para adquirir esas capacidades. Así, nos encontraríamos con sujetos con una alta motivación intrínseca o con criterios óptimos para el análisis de las variables que intervienen en su proceso de aprendizaje, donde tiene una importancia básica que las actividades elegidas sean desafiantes y moderadamente difíciles, ya que así mantendrán el esfuerzo elevado y producirían reforzamientos por los logros alcanzados durante el proceso y al final. La perspectiva cognitiva piensa que el comportamiento de una persona está determinado por su pensamiento. Las conductas se activan y regulan en función de las creencias, expectativas, metas, planes, esquemas y atribuciones de éxito o de fracaso. Las teorías cognitivas atribuyen a las personas las características de activas, curiosas, que interpretan los eventos y estímulos externos, respondiendo después del filtro cognitivo y no por la propia fuerza de los mismos.

Curiosidad Epistémica

El conocimiento surge desde situaciones en las que las personas se encuentran en situación de inquietud producida básicamente por:

  • Conflicto conceptual: Cuando hay un cierto nivel madurativo, cuando los niños se inician en el estudio de las nociones científicas, para motivarlos es ideal plantearles un conflicto cognitivo, dudas, presentar actividades que lleven a crear perplejidad.

En ocasiones, los niños y los mismos adultos, consideran que dos cosas que son antagónicas es la solución a un mismo problema. ¿Qué da lugar a esta consideración? El individuo no se conforma en quedar con esa duda, así que se activa para tratar de resolverla. La contradicción es el motor del desarrollo, de la evolución, por tanto, podría usarse como motor motivacional. La presentación de información contradictoria da lugar a esa duda que es normal en todo ser humano. La duda, la preocupación de saber, es absolutamente natural, no obstante, también hay quien se encarga de obstaculizar esa inclinación natural de saber, y de preguntarse cosas.

Entradas relacionadas: