Poder y Mito en la Antigüedad: La Monarquía Romana y la Leyenda de Medusa
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La Monarquía Romana Primitiva: Rey, Senado y Pueblo
El término latino para rey, rex, deriva de la palabra regere, que significa “regir o gobernar”. La persona que ejercía este cargo en Roma poseía un carácter especial debido a la sagrada autoridad que representaba. Su indumentaria incluía un manto púrpura, un cetro de marfil y una corona de oro, y era precedido en las calles por doce auxiliares, conocidos como lictores.
Además de sus funciones religiosas, el monarca ostentaba importantes atribuciones civiles, como la facultad de convocar la asamblea del pueblo.
La asamblea del pueblo, sin embargo, poseía poderes limitados. Podía aceptar o rechazar los asuntos que se le proponían, pero carecía de iniciativa para proponer leyes.
Para asistir al monarca en su labor de gobierno, el rey contaba con el apoyo de un consejo: el Senado. Este cuerpo se encargaba, entre otras funciones, de vigilar el cumplimiento de las costumbres de los antepasados (mos maiorum).
La Gorgona Medusa: Mito y Venganza
Medusa era la única mortal de las tres Gorgonas, hijas de divinidades marinas. Se las describía con manos de bronce, alas de oro y serpientes en lugar de cabellos. Medusa era un ser terrorífico que petrificaba con sus ojos a todo aquel que osara mirarla.
Otras tradiciones narran que Medusa fue en su origen una joven de cabellera bellísima, cuyo terrible aspecto final se debió a dos posibles causas: haberse comparado con la diosa Atenea o haber sido seducida por Poseidón en el templo de la diosa.
Perseo logró vencer a Medusa con la ayuda de los dioses Atenea y Hermes, quienes le proporcionaron los elementos indispensables para su cometido:
- Unas sandalias aladas
- Un casco (el casco de Hades, que hacía invisible)
- Una espada
- Un escudo brillante como un espejo (para evitar la mirada directa)
- Un zurrón donde guardar la cabeza cercenada
La cabeza de Medusa conservaba su poder de petrificar incluso después de la muerte. De la unión de Medusa con Poseidón había nacido Equidna, otro ser monstruoso. En el momento de su decapitación, nacieron Pegaso, el caballo alado, y Crisaor.