La Metamorfosis Moral del Ser Humano en Nietzsche: Camello, León y Niño

Enviado por Programa Chuletas y clasificado en Filosofía y ética

Escrito el en español con un tamaño de 3,08 KB

El tema central de este texto es la serie de transformaciones o metamorfosis que ha sufrido o ha de llevar a cabo el ser humano desde el punto de vista moral. Friedrich Nietzsche las expone metafóricamente mediante la evolución del camello, el león y el niño.

La Primera Transformación: El Camello y la Transvaloración de los Valores

Tras una época en la que los hombres tenían una actitud positiva ante la vida (representada por los héroes guerreros de la Grecia antigua y plasmada artísticamente en las tragedias griegas), según la cual lo bueno era lo vital, lo noble, lo alegre, lo terreno, se produjo una primera transvaloración. En esta, el contenido de los valores se invirtió: lo bueno es lo débil, lo plebeyo, lo ultraterreno. El hombre inventa una serie de valores de origen trascendente.

Esta es la primera transformación de la que habla el texto: la del camello. Este animal de carga se arrodilla para ser cargado, es aparentemente sumiso y parece disfrutar cuanto más lo cargan. Esta transformación se inició con Sócrates, quien defendía unos valores universales; la continuó Platón, al inventar otro mundo perfecto; y la religión judía y, sobre todo, el cristianismo, que impuso una escala de valores trascendentes y antivitales, como la humildad, la compasión o la paciencia. Valores que, según Nietzsche, significan la negación de valorar esta vida.

La Segunda Transformación: El León y la Muerte de Dios

Sin embargo, con el transcurso de los siglos, el hombre, por su afán de verdad, empezó a dudar acerca de la existencia de ese otro mundo, o incluso de la existencia de Dios, llegándose hasta su negación: se trata de la muerte de Dios. El hombre, entonces, sufre la segunda metamorfosis: se convierte en león, un animal que conquista su libertad, que se libera de la pesada carga que antes acarreaba.

Pero ante la muerte del antiguo dios único y verdadero del desierto, el león corre el peligro de sentirse huérfano y desorientado, y de ser tentado a inventar otros dioses, otros dadores de sentido, tales como la fe en la ciencia, la razón, el progreso o la igualdad. En realidad, el león ha conquistado la libertad de (liberarse de lo antiguo), pero todavía no ha alcanzado la libertad para (crear nuevos valores).

La Tercera Transformación: El Niño y el Superhombre

Esta etapa requiere una nueva metamorfosis: transformarse en niño. El niño simboliza el hombre renacido, el hombre que ha recuperado su verdadera naturaleza: el superhombre.

Se trata de la propuesta de Nietzsche lanzada hacia un futuro en el que el hombre recobre la alegría de vivir esta vida, la tierra recupere su valor y viva de acuerdo con valores naturales, vitales y afirmativos que digan sí a la vida.

Entradas relacionadas: