El Medio Natural como Recurso y su Impacto en la Actividad Humana

1. El medio natural como recurso

El medio natural aporta recursos al ser humano para satisfacer sus necesidades fundamentales y desarrollar su actividad económica.

1.1 El relieve continental

El relieve presenta variadas relaciones con la actividad humana y condiciona el desarrollo de las sociedades de las siguientes maneras:

• Influye en los asentamientos: Se buscan los emplazamientos más favorables de acuerdo con las necesidades de cada momento histórico.
• Interviene en la actividad agraria: La altitud y la pendiente condicionan los tipos de cultivo y la mecanización.
• Proporciona recursos minerales y energéticos: Es fuente de carbón, minerales metálicos, ciertos minerales no metálicos y minerales de cantera.
• Afecta a las comunicaciones: Dificulta, por ejemplo, las comunicaciones entre la Meseta y el litoral. Esto exige la realización de obras costosas (túneles y viaductos) que incrementan tanto el tiempo como el coste del transporte.
• Atractivo turístico: Ciertas formaciones geológicas pueden ser un objeto de atracción, como las formaciones calcáreas de la Ciudad Encantada de Cuenca.

Por su parte, el relieve costero resulta a menudo poco propicio para el asentamiento de puertos (debido al predominio de las formas rectilíneas) y para la obtención de recursos pesqueros; en cambio, favorece notablemente la actividad turística.

1.2 El clima

El clima es un factor determinante en la organización del territorio:

• Distribución de la población y el hábitat: La población tiende a evitar las zonas con condiciones climáticas adversas, como las áreas de alta montaña o aquellas con sequía extrema.
• Influjo en la agricultura: Los cultivos requieren condiciones térmicas y pluviométricas muy concretas para su desarrollo óptimo.
• Fuentes de energía: Aporta diversas fuentes de energía renovables y limpias, como la eólica o la solar.
• Sector terciario: El clima interviene en el transporte y es la base del turismo de sol y playa, así como del turismo de nieve.

1.3 El agua y los recursos hídricos

1.3.1 El agua

El agua es un recurso esencial con múltiples aplicaciones en España:

• Regadío agrario: Consume casi el 80% del total de agua en España, permitiendo mejorar significativamente el rendimiento de las explotaciones agrícolas.
• Producción energética: Su uso es fundamental en centrales hidroeléctricas. Asimismo, las centrales térmicas y nucleares utilizan el agua como refrigerante.
• Consumo urbano: Supone el 14% del total. Aunque no es el porcentaje más elevado, sitúa a España en el tercer lugar mundial de consumo de agua por persona.
• Evacuación de desechos: Se utiliza para el vertido de residuos, lo que da lugar en muchos casos a un importante deterioro de la calidad ambiental.
• Otros usos: Incluye actividades como la pesca, la navegación, diversos usos recreativos y la mejora general de la calidad del medio ambiente.

1.3.2 El balance hídrico

El balance hídrico es la relación que existe entre los recursos hídricos existentes y el consumo que se hace de ellos. En España, se contabilizan aproximadamente 346.000 hm³, de los cuales solo queda disponible el 32%.

Existen varios problemas que limitan el aprovechamiento de estos recursos:

1. Las disponibilidades de agua proceden principalmente de los ríos.
2. La demanda se concentra en las áreas de mayor dinamismo económico y demográfico, especialmente en el arco mediterráneo, donde los recursos naturales son más escasos.