La Matriz Epistémica: Fundamento del Pensamiento y Cambio de Paradigma
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Introducción
El sistema geocéntrico de Ptolomeo se impuso desde el siglo II hasta el Renacimiento. Pero, a lo largo de este tiempo, fueron apareciendo objeciones, dificultades y problemas (que él mismo era incapaz de resolver!). En tiempos de Copérnico, se habían acumulado 79 problemas astronómicos insolubles con el sistema ptolemaico. Cuando Copérnico intentó salirse del sistema, enfocando los problemas desde la perspectiva heliocéntrica de los griegos, los 79 problemas se fueron solucionando.
La actitud predominante ante estos desafíos siempre ha sido más o menos similar: 1) negar los hechos; 2) si los hechos persisten y se repiten, aplicarles el lecho de Procusto (forzarlos a entrar dentro de los moldes o "potros" conceptuales preestablecidos), y, solo en un tercer lugar, revisar los supuestos básicos.
El esfuerzo humano más grande que se le presenta a nuestra mente es el de trabajar cambiando todo su aparato conceptual, es decir, el jugar cambiando las reglas del juego cognoscitivo.
La Racionalidad Humana
La racionalidad científica clásica siempre ha valorado, privilegiado, defendido y propugnado la objetividad del conocimiento, el determinismo de los fenómenos, la experiencia sensible, la cuantificación de las medidas, la lógica formal aristotélica y la verificación empírica. Pero la complejidad de las nuevas realidades emergentes durante este siglo, su fuerte interdependencia y sus interacciones ocultas, y el descubrimiento de la riqueza y dotación insospechada de la capacidad creadora y de los procesos cognitivos del cerebro humano, postulan un paradigma de la racionalidad acorde con ambos grupos de realidades.
Es deber de la ciencia ofrecer una explicación rigurosa y completa de la complejidad de los hechos que componen el mundo actual e idear teorías y modelos intelectualmente satisfactorios para nuestra mente inquisitiva. Esto exigirá estructurar un paradigma epistémico que coordine e integre, en un todo coherente y lógico, los principios o postulados en que se apoyan los conocimientos que se presentan con fuerte solidez, estabilidad y evidencia, ya sea que provengan de la filosofía, de la ciencia o del arte. Una actividad recurrente del investigador prudente debe ser el revisar y analizar la firmeza del terreno que pisa y la fuerza y dirección de las corrientes de las aguas en que se mueve, es decir, la solidez de los supuestos que acepta y el nivel de credibilidad de sus postulados y axiomas básicos. Solo así podrá evitar el fatal peligro de construir sobre arena.
Estamos ante una crisis no solo de los fundamentos del conocimiento científico, sino también del filosófico y, en general, ante una crisis de los fundamentos del pensamiento. Una crisis que genera incertidumbre en las cosas más importantes que afectan al ser humano.
No están en crisis los paradigmas de las ciencias, sino el paradigma de la ciencia en cuanto modo de conocer.
La Matriz Epistémica
Toda estructura cognoscitiva generalizada, o modo de conocer, en el ámbito de una determinada comunidad o sociedad, se origina o es producida por una matriz epistémica.
La matriz epistémica es el trasfondo existencial y vivencial, el mundo de vida. Consiste en el modo propio y peculiar, que tiene un grupo humano, de asignar significados a las cosas y a los eventos, es decir, en su capacidad y forma de simbolizar la realidad.
La matriz epistémica es un sistema de condiciones del pensar, que constituye "la misma vida" y "el modo de ser", y que da origen a una cosmovisión, a una mentalidad e ideología específicas, a un espíritu del tiempo, a un paradigma científico (cambio de escenario o modo de mirar, interiorizar y expresar la realidad), a cierto grupo de teorías y, en último término, también a un método y a unas técnicas o estrategias adecuadas para investigar la naturaleza de una realidad natural o social.