Lesiones de la piel: síntomas, diagnóstico y tratamiento
Enviado por Chuletator online y clasificado en Medicina y Salud
Escrito el en español con un tamaño de 3,67 KB
Lesiones de la piel
Las lesiones de la piel pueden manifestarse de diferentes formas, como eritematosas, papulosas o de tipo urticariano. Estas pueden preceder a la aparición de ampollas en un intervalo de meses. Las ampollas pueden ser pequeñas o grandes, tensas, con una porción superior firme, ovales o redondas. Pueden aparecer en la piel normal, en la eritematosa o en la urticariana y contienen líquido seroso o hemorrágico. Las lesiones pueden ser localizadas o generalizadas, a menudo dispersas, pero a veces agrupadas con disposición arciforme y serpiginosas.
Sitios de predilección:
- Axilas
- Cara interna de muslos
- Ingles y abdomen
- Caras flexoras de antebrazos
- Piernas (a menudo como manifestación inicial)
- Generalizadas
Membranas mucosas:
- Prácticamente solo en la boca (10 a 35%)
- Son menos graves y dolorosas que en el caso del pénfigo
- Se rompen con menor facilidad
Dermapotalogía: Microscopia habitual
En la microscopia habitual se pueden observar neutrófilos en la unión dermoepidérmica, eosinófilos y linfocitos en la dermis papilar, y ampollas subepidérmicas.
Microscopia electrónica:
Se advierte separación de los planos de unión, es decir, se produce en la lámina lúcida de la membrana basal.
Inmunopatología:
En la inmunopatología se identifican depósitos lineales de IgG en las zonas de la membrana basal. También se advierte C3, que puede aparecer incluso sin IgG.
Suero:
En el suero de aproximadamente el 70% de los pacientes se detectan anticuerpos de tipo IgG circulantes contra la membrana basal. Estos anticuerpos reconocen dos tipos de antígenos:
- BPAG1: glucoproteína de 230 kDa que muestra gran homología con la desmoplaquina I y es parte de los hemidesmosomas
- BPAG2: polipéptido transmembrana de 180 kDa (colágeno de tipo XVII)
Tratamiento: Prednisona sistémica
El tratamiento de las lesiones de la piel generalmente incluye el uso de prednisona sistémica. Se recomienda una dosis inicial de 50 a 100 mg/día, que se continúa hasta que los síntomas ceden. También se puede combinar con 150 mg de azatioprina diarios para inducir la remisión y 50 a 100 mg para la fase de sostén. En casos resistentes al tratamiento, se puede considerar el uso de IVIG y plasmaféresis.
En casos más leves, se puede administrar sulfonas (dapsona) en dosis de 100 a 150 mg/día. En los ancianos, dosis bajas de 2.5 a 10 mg semanales de metotrexato oral pueden ser eficaces e inocuas. Para casos muy leves y recidivas locales, se pueden obtener beneficios con glucocorticoides tópicos o la aplicación de tacrolimus. También se ha informado que en algunos casos la tetraciclina + nicotinamida son eficaces.