Juan Ramón Jiménez: Vida, Obra y Evolución Poética

Juan Ramón Jiménez, Premio Nobel de Literatura, es uno de los poetas más importantes del siglo XX y uno de los que tiene una obra poética más personal y significativa.

Concepción de la Poesía

Para el poeta, la poesía es belleza; ella misma es expresión de lo bello. Ante la belleza del mundo, el poeta debe reflejar en su obra el poso que esa belleza deja en su alma, y ese reflejo será el poema. Por otra parte, la poesía para Juan Ramón será eternidad, ya que las creaciones bellas permanecen a lo largo de los siglos y el nombre de su autor con ellas. Por último, la poesía para el poeta será también una cualidad de la inteligencia, a través de la cual y mediante la búsqueda del vocablo exacto, de la palabra esencial, penetramos en el verdadero sentido de las cosas del mundo.

Sentido Unitario de la Obra y Afán de Perfección

Juan Ramón Jiménez concibe su Obra como una unidad en la que se van integrando los nuevos textos al tiempo que los anteriores se encuentran en un estado permanente de revisión y corrección que tiene por objeto llegar a alcanzar la perfección absoluta. Se trata, por tanto, de una poesía “en marcha” con continuas modificaciones y reconstrucciones de los poemas.

Etapas Poéticas

Aunque el poeta considerase su poesía como un todo, él mismo establece, al final de su vida, una división en etapas: época sensitiva, época intelectual y época suficiente o verdadera.

Etapa Sensitiva (Modernismo)

Abarca desde sus inicios poéticos hasta la fecha de su boda. Los poemas de esta etapa están inscritos dentro del modernismo intimista y simbolista: atmósfera doliente, sentimientos de melancolía y soledad, temas del inevitable paso del tiempo y la insatisfacción amorosa (es muy frecuente la aparición del tema de la amada imposible), cromatismo, presencia de la muerte, evocaciones e identificación alma/paisaje (jardines, fuentes, paisajes otoñales…). Formalmente, en estos poemas predomina la ornamentación modernista: adjetivación brillante, uso del alejandrino, sinestesias, léxico decadente y musicalidad. Todo ello influido fuertemente por la presencia de Bécquer. Poco a poco se irá observando en el poeta un intento de superación del modernismo en aras de una poesía más conceptual y formalmente más sencilla.

Obras de esta etapa:

• Arias tristes
• Jardines lejanos
• La soledad sonora
• Elejías

Etapa Intelectual

Esta etapa se inicia en 1917 y llega hasta 1936, fecha del exilio del poeta. La primera obra de esta nueva etapa es Diario de un poeta recién casado (considerado por Juan Ramón como su mejor libro), y que con la excusa de contarnos su viaje y estancia en América, rompe definitivamente con el modernismo y abre la poesía española a las innovaciones vanguardistas más características: verso libre, mezcla de verso y prosa, enumeraciones caóticas, técnica del collage, uso del inglés… Pero aparte de sus innovaciones formales, el Diario… supone una nueva concepción poética: la paulatina desaparición de la anécdota y el sentimentalismo que conduce a una poesía esencial a la que él llama “poesía pura o desnuda” y que busca la expresión de lo inefable. Lo importante para esta poesía es la anotación del instante, la descripción de las diversas impresiones que recibe el poeta. El mar y el cielo se convierten en símbolos de la Naturaleza como unidad, armonía y orden cósmico.

Pertenecen a esta etapa obras como:

• Piedra y cielo
• Eternidades
• Belleza

En ellos la poesía está cada vez más depurada y estilizada a la búsqueda de la suma perfección. El poeta se dirigirá a una minoría de lectores cultivados y sensibles.

Etapa Suficiente o Verdadera

Abarca la obra escrita en el exilio y en esta etapa se recrean los conceptos clave del último Juan Ramón: la unidad profunda de todo lo existente, la visión panteísta de la realidad y la conciencia del poeta como dios que da sentido al mundo mediante una especia de acumulación caótica de recuerdos y evocaciones de su vida y obra anterior.

En su última obra, el poeta llega a la posesión de una conciencia que definitivamente se identifica con Dios, un dios que nada tiene que ver con el cristiano y que se identifica con la Naturaleza y la Belleza.

Obras de esta etapa:

• En el otro costado
• Dios deseado y deseante

Características de la Poesía de Juan Ramón

• Diálogo constante con el mar, que se convierte en símbolo de inmensidad o plenitud, soledad y eternidad.
• Poesía elitista, minoritaria, destinada a un selecto grupo de entendidos.
• Creación de una poesía despojada de todo lo accesorio y centrada en el intelecto.

De acuerdo con las teorías del líder de esta generación (Ortega y Gasset) en su obra La deshumanización del arte, podemos observar estas características en la obra de Juan Ramón Jiménez.