La invisibilidad del trabajo femenino: Un análisis sociológico y económico

Introducción

La creciente participación de las mujeres en el mercado laboral ha puesto de manifiesto la existencia de problemas de compatibilidad entre el trabajo doméstico y el trabajo de mercado. Este conflicto se basa en la dicotomía entre dos esferas:

• Esfera masculina: centrada en el éxito, el poder y la libertad, relacionada con la satisfacción de las necesidades humanas.
• Esfera femenina: centrada en el hogar y los lazos afectivos (no valorados), relacionada con la satisfacción de necesidades subjetivas, no pertenecientes a la vida social.

Esta dualidad sugiere la existencia de una mano invisible que mantiene el funcionamiento del mundo, pero que también perpetúa la desigualdad.

Las razones ocultas de la invisibilidad

La invisibilidad del trabajo femenino se debe a:

• El patriarcado: basado en la discriminación por raza, sexo y etnia.
• El sistema histórico: la dependencia del sistema económico (desde 1975) y el sistema capitalista.

Las mujeres, a pesar de empezar a escribir su propia historia, han sido ignoradas en sus esfuerzos por conciliar ambos trabajos (doméstico y mercantil), lo que ha generado incompatibilidades.

El tiempo invisible

El tiempo se divide en cinco categorías:

1. Tiempo de necesidades personales: Tiempo no mercantizable.
2. Tiempo de trabajo doméstico: Tiempo no mercantizable.
3. Tiempo de ocio: Tiempo mercantizable.
4. Tiempo de participación ciudadana: Tiempo mercantizable.
5. Tiempo de trabajo de mercado: Tiempo mercantizable.

Las mujeres desarrollan sus actividades en un tiempo invisible y no reconocido. Además, las actividades domésticas de las mujeres siguen un ciclo fluctuante, mientras que el tiempo de los hombres es más lineal.

Paradójicamente, la decisión racional y la acción colectiva

La sociología explica la ausencia de libertad, mientras que la economía parte del principio de que las personas son libres para elegir.

Teoría de la decisión racional

La aplicación de la acción social se conoce como teoría de la decisión de la elección racional, la cual se basa en dos variantes:

1. Racionalidad paramétrica: El individuo se enfrenta a un mercado con recursos determinados, por lo que se espera que maximice su utilidad.
2. Teoría de juegos: El individuo se enfrenta a un conjunto de individuos dentro de un marco de reglas, donde debe anticiparse a las decisiones de los demás.

Olson, en su teoría de la acción colectiva, explica que debe existir un mecanismo que incentive la participación a través de incentivos selectivos privados. La masa crítica es otro elemento fundamental para la acción colectiva.

La libertad y la identidad

Se deduce que la persona que necesita definir su propia identidad a través de un colectivo no es libre, ya que la libertad implica la superación de esa necesidad. Una persona es libre cuando sabe quién es y puede elegir en consecuencia.

Conclusión

En definitiva, la teoría de la decisión racional es aplicable a personas libres con un carácter moral, que pueden ser buenas o malas, pero que son las únicas que, al saber quiénes son, pueden elegir libremente y ser juzgadas moralmente.