Implementación y Fases del Contrato de Intervención Profesional: Estrategias de Soporte Domiciliario

El Contrato de Intervención Profesional

El Contrato de Intervención consiste en lograr un cambio llegando a un acuerdo. En él se recogen las acciones que el usuario debe realizar y las consecuencias del citado cumplimiento, así como del incumplimiento.

Se utiliza para aumentar la motivación y el compromiso para el cambio y para poder solucionar el problema que está dando lugar a la intervención profesional.

Fases de Elaboración del Contrato

1. Fase preliminar: Toma de contacto con el caso, recogida de información, establecimiento de un clima de confianza, y análisis de las capacidades y recursos del usuario.
2. Fase de negociación: Es la búsqueda, entre los participantes del contrato (usuario-profesional), de un acuerdo en puntos concretos. Esta fase incluye cinco elementos importantes:
   • Clarificación del problema.
   • Clarificación de aspiraciones.
   • Establecimiento de objetivos comunes.
   • Elaboración del plan de trabajo.
   • Formalización del contrato.
3. Fase de puesta en marcha: Reparto de tareas.
   • Acompañamiento.
   • Reajuste, si fuera necesario.
4. Evaluación de resultados: Balance de los compromisos ejecutados.

Esta serie de atenciones o actuaciones básicas se basan en actividades de prevención, asistencia, formación y rehabilitación, y se distribuyen en los siguientes ámbitos:

Ámbitos de Intervención y Organización del Soporte

Organización del Ámbito Doméstico

Este ámbito incluye la Atención Doméstica y la Atención Personal.

Atención Doméstica (Tareas Cotidianas)

Alimentación: Comprende desde la elaboración de dietas y la realización de la compra hasta la preparación de las comidas en casa o el servicio de comida domiciliaria. La compra deberá realizarse (si es posible) acompañado del usuario, lo que permitirá un doble objetivo: movilizarlo y realizar actividades educativas.

Vestuario: Incluye actividades como la compra, el lavado, el planchado, la reparación y la ordenación de la ropa. El usuario ha de ser el responsable de estas tareas, aunque a veces será necesario enseñarle.

Mantenimiento de la casa: Con esta actividad se han de mantener unas condiciones higiénicas adecuadas a través de la limpieza diaria y realizar pequeños arreglos.

Atención Personal

Se centra en el bienestar personal y social del usuario, a partir de tareas como:

• El aseo y la higiene.
• El control, el apoyo y la ayuda en la alimentación y en el vestido, favoreciendo la autonomía personal.
• El seguimiento del tratamiento médico.
• Apoyo en la movilidad del usuario, actividades de acompañamiento y de ocio.

Atención Educativa

Facilitar la adquisición de las habilidades básicas y generar hábitos de conducta en lo que se refiere a la organización económica, la planificación de la higiene, la formación de hábitos de convivencia y apoyo a la integración y a la socialización.

Atención Sociocomunitaria

Promover e impulsar las actividades de la vida social y relacional del usuario, consiguiendo su participación e integración en su comunidad, a través de actividades de ocio, culturales, recreativas, deportivas o convivenciales, previniendo el aislamiento social y la marginación.

Tipos de Apoyo Social

Esta prevención ha de partir del apoyo social, del cual pueden distinguirse tres tipos:

• Emocional.
• Instrumental o material.
• Informativo.