Impacto Económico del Petróleo: De la Competencia a la Crisis Energética
Enviado por Programa Chuletas y clasificado en Economía
Escrito el en español con un tamaño de 8,49 KB
El Petróleo y la Crisis Energética
En el caso del petróleo, el análisis se complica aún más por el carácter mundial del mercado, con intercambios internacionales muy amplios y un importante dominio del mismo por un reducido número de países y de compañías, lo cual distorsiona los mecanismos lógicos del comportamiento económico.
De la Competencia Perfecta a la Competencia Muy Limitada
El régimen de producción de petróleo se desarrolló en un marco parecido al que los economistas denominan competencia perfecta, y los precios tendían a fluctuar ampliamente debido a las variaciones incontroladas de la oferta. Con el paso del tiempo, dicho mercado se fue organizando. Primero, con la aparición de grandes sociedades que controlaban parcelas del mercado cada vez mayores; después, con los acuerdos de reparto de las grandes zonas productoras después de la Primera Guerra Mundial; más tarde, con los acuerdos de cartelización en los años 20; y, finalmente, con la aparición de la OPEP en 1960. Lo que comenzó siendo un mercado muy competitivo pasó a convertirse en un mercado de competencia muy limitada, situación en la que nos encontramos actualmente, ya que la oferta ha quedado en manos de unas pocas compañías y de unos pocos países, y esto hace que los precios se estén regulando de una manera muy arbitraria.
La Evolución de los Precios y las Medidas de Ahorro
Después de la Segunda Guerra Mundial, los precios del petróleo se mantuvieron sin mayores variaciones durante más de 20 años. Durante ese periodo, la energía en general y el petróleo en particular eran abundantes y baratos. Todas las economías del mundo se habían apoyado en este hecho, de modo que el consumo de energía aumentaba al mismo ritmo que el producto interior bruto. Además, se había originado todo un conjunto de prácticas administrativas, jurídicas, comerciales e industriales para incitarnos a consumir cada vez más energía. La energía sería mucho más cara y, a corto plazo, el petróleo se encontraba amenazado por muchas dificultades. Como consecuencia, se hizo indispensable definir una política de ahorro energético para alcanzar un doble objetivo: disminuir el costo de la factura petrolera a corto plazo y conseguir que el crecimiento de la economía no esté ligado al crecimiento del consumo energético. Occidente reconoció la necesidad de mejorar la eficiencia en el uso de la energía y de avanzar en la sustitución del petróleo por energías alternativas. De esta manera, la conservación energética ha venido constituyendo desde 1973 un objetivo clave para la mayor parte de los países industrializados. La razón de esto ha sido la constatación de que era posible reducir los consumos energéticos sin afectar al nivel de vida ni al crecimiento económico nacional. Para EE. UU., el mayor consumidor de petróleo per cápita, que en esta época consumía el 30 % de la energía mundial, se llegó a la conclusión de que se podía consumir entre un 30 y un 40 % menos de energía de la que se consumía y mantener niveles de vida iguales o superiores.
La Creación de la OPEP y la Crisis de 1973
El orden petrolero establecido en 1928 y 1944 aseguraba a las grandes compañías un monopolio casi absoluto en la extracción y comercialización del petróleo y sus productos. Desde el punto de vista de los países productores, esto resultaba particularmente gravoso y vejatorio. Un estado productor aislado se encontraba indefenso ante los grupos multinacionales, no tenía voz ni voto sobre el ritmo de explotación de sus yacimientos ni sobre la amplitud y localización de los esfuerzos de investigación. Frente a este orden petrolero, países consumidores y productores intentaron una respuesta. Los primeros respondieron con las compañías, y los productores propusieron la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo). El hombre que inventó la OPEP no fue un árabe, sino un abogado venezolano llamado Pérez Alfonso, que pensó un proyecto que pusiera fin al expolio a que estaba siendo sometido su país por las grandes compañías. La respuesta la encontró en las prácticas de una agencia gubernamental norteamericana: la Comisión de Ferrocarriles de Texas, que fue creada a finales del siglo XIX para la supervisión de la construcción de los ferrocarriles en Texas, pero desde 1919 pasó a ocuparse de la conservación de los recursos del petróleo y gas, con amplios poderes para regular la producción y los precios. Esto se convirtió, a partir de los años 30, en un mecanismo para regular el mercado y mantener los precios, para que los productores pequeños ganaran dinero. El lema de la OPEP: “Si quieren más dinero, no vendan más petróleo”. Fue creada de acuerdo con los esquemas de Pérez Alfonso en 1960. En sus 10 primeros años de funcionamiento, consiguió muy poco: apenas mantener los precios del crudo.
El Golpe de Fuerza de la OPEP
Los 10 años siguientes en la historia de la OPEP iban a ser muy diferentes a los de la década de los 60. El hombre que le dio el impulso inicial fue un nacionalista árabe radical: Gadafi. Aprovechó una serie de hechos fortuitos para forzar los precios al alza. Así, se pactó un sistema de incrementos gradual de precios por un período de 5 años, que aseguraba a los países productores un aumento importante de sus ingresos por petróleo. Pero fue a raíz de la cuarta guerra árabe-israelí, en 1973, dos días después de producirse el ataque egipcio, cuando los países árabes pertenecientes a la OPEP se reunieron con las compañías petroleras para exigirles la elevación de los precios de referencia desde 3 hasta 5 dólares por barril. Las compañías quedaron desconcertadas ante la cuantía de esa demanda y pidieron tiempo para poder consultar con sus respectivas oficinas centrales. Durante este tiempo, la OPEP cambió de opinión y decidieron elevar los precios de referencia sin esperar respuesta.
Nuestro Talón de Aquiles
A principios de los años 70, los países exportadores de petróleo fueron tomando conciencia rápidamente de que las características económicas de la demanda de petróleo les permitían incrementar sus ingresos a niveles muy superiores. La demanda de petróleo crudo se deriva de las respectivas demandas de los productos y se reduce muy poco, aunque el precio se incremente mucho. Por otro lado, siempre había disponible cantidad marginal o sobrante de petróleo a precios bajos. En un mercado dominado por los compradores, como había sido el de los años 60, estas disponibilidades con costos bajos hacían imposible un aumento en los precios.
La Primera Crisis Petrolera
Se manifestó en la caída del crecimiento económico entre 1974 y 1976. En este último año, y como consecuencia, se produjo un proceso de reactivación que continuó en los dos años siguientes. En segundo lugar, la tasa de inflación experimentó una brusca aceleración. En los años 50 y 60 era suficiente una pequeña recesión para frenar las expectativas inflacionarias. Otro grave problema fue el desempleo, que se incrementó, agudizándose a medida que pasaron los años. Los años hasta la segunda crisis fueron de una cierta recuperación económica, sin que por ello las tasas de desempleo descendieran, como consecuencia de las presiones inflacionarias y desequilibrios de balanza de pagos. Todo esto venía acompañado de una quiebra completa de mecanismos económicos tradicionales.
La Crisis Financiera
Lo peor de la crisis parecía haber pasado, pero las previsiones se vinieron abajo, produciéndose una nueva desaceleración en la actividad económica y un reforzamiento de las tensiones inflacionistas. Las crisis petroleras producen un nuevo fenómeno, la estanflación, por lo que, a pesar del descenso de los precios del petróleo iniciado a finales de 1981, la recuperación fue mucho más difícil que después de la primera crisis. Con esto, las exportaciones del mundo menos desarrollado se vieron seriamente perjudicadas, contribuyendo a reducir el poder de compra y el crecimiento del comercio mundial.
Grave Crisis Financiera
A pesar de la estanflación, el elemento de mayor gravedad producido por las dos sucesivas crisis del petróleo ha sido la desaceleración del crecimiento del comercio internacional y el desequilibrio de los pagos exteriores. Este problema ha dado lugar a una crisis financiera desde la gran depresión.
INCOTERMS: Reglas internacionales del vendedor y comprador sobre la mercadería.