Impacto de la Crisis Económica de 1975 y la Reestructuración Industrial en España
Crisis Económica y Reconversión Industrial en España (1975-1989)
A partir de 1975, España sufrió una crisis económica, fundamentalmente de carácter industrial. Esta crisis se derivó de factores externos, propios del sistema capitalista, que se combinaron con factores internos relacionados con una delicada situación política y unas estructuras productivas heredadas.
Factores Desencadenantes de la Crisis
Factores Externos: El Cambio de Modelo Productivo
Los factores externos guardan relación con el inicio de una nueva etapa, la postindustrial, a menudo calificada como la Tercera Revolución Industrial. El anterior modelo industrial, conocido como fordista, entró en crisis y fue sustituido por un nuevo paradigma productivo.
Factores Internos: Transición Política y Estructuras Heredadas
Los factores internos están vinculados a circunstancias específicas de la historia española. En 1975 murió Franco, lo que provocó la Transición Política. Esta situación generó incertidumbre, paralizó las inversiones empresariales y, por otra parte, retrasó las medidas políticas de ajuste necesarias para afrontar la crisis. Mientras otros países adoptaban medidas, España se demoró por miedo al descontento social.
Este factor se combinó con la persistencia de los problemas heredados de la etapa desarrollista. Destacaban:
- Una desfavorable especialización sectorial en sectores maduros (especialmente vulnerables a la crisis).
- Una baja productividad y un aumento de los costes.
- Un escaso esfuerzo innovador, resultando en una gran dependencia tecnológica.
- Un elevado endeudamiento empresarial, subordinado a créditos bancarios (lo que implicó el encarecimiento del dinero).
La Reconversión Industrial (A partir de 1984)
Las medidas para hacer frente a la crisis se tomaron a partir de 1984. Se inició la Reconversión Industrial como un tratamiento de choque que debía actuar en breve tiempo y centrarse en asegurar la viabilidad a medio plazo de las industrias.
Principales Medidas de Reconversión
- Política de Reestructuración y Ajuste: Consistió en un conjunto de medidas de ajuste empresarial y sectorial, combinadas con una política de intervención pública basada en incentivos variados (subvenciones, créditos y avales del ICO, etc.).
- Sectores Afectados: Los sectores que se acogieron a la política de reconversión fueron aquellos propios de la Segunda Revolución Industrial, conocidos como sectores maduros (siderurgia, naval, textil, etc.).
Desindustrialización y Reindustrialización
La consecuencia inmediata de la reconversión fue la desindustrialización. La crisis afectó en gran medida a las áreas industriales en declive, generando graves problemas económicos, sociolaborales y ambientales.
Paralelamente a la reconversión, se adoptó una política de reindustrialización. Se crearon las Zonas de Urgente Reindustrialización (ZUR), cuyo objetivo era:
- Incentivar la instalación y ampliación de empresas generadoras de empleo estable para absorber a los desempleados.
- Diversificar la estructura productiva del área.
- Fomentar el progreso técnico.
Impacto y Consecuencias de la Crisis y la Reconversión
Consecuencias Inmediatas: Producción y Empleo
Las consecuencias inmediatas de la crisis se tradujeron en una contracción de la industria, medida en términos de producción y, sobre todo, de empleo. La tasa de desempleo reflejó el impacto de las políticas de ajuste estructural y sectorial durante la primera fase de la reconversión industrial (1985-1989).
Consecuencias Espaciales
Las consecuencias espaciales de la crisis fueron:
- La desindustrialización de algunas áreas que antes eran centrales.
- La mayor capacidad de atracción de otros espacios que previamente eran considerados secundarios.