La Ilustración: El Siglo de la Razón y el Progreso

La Ilustración es el período histórico que abarca desde la Revolución Inglesa hasta la Revolución Francesa, es decir, el siglo XVIII. Se le conoce como Ilustración porque se considera el siglo de la luz, de la razón, el conocimiento, el orden y el control. Fue un intento de las élites por modernizar la sociedad, dejando atrás la ignorancia y los retrasos de las tradiciones de siglos pasados. La Ilustración es la razón que ilumina la oscuridad de la tradición.

Esta fe en la razón caracteriza el período de la Ilustración. A diferencia de tiempos pasados, se reivindica el uso en libertad de la razón, sin tener que seguir las pautas que marcan la Iglesia o las autoridades estatales. Se creía que la razón en libertad llevaría al ser humano al progreso y a la felicidad. La filosofía ilustrada se podría resumir en:

Características de la Ilustración:

Razón:

Ha de ser empírica, crítica y autónoma, y no debe temer contradecir a la tradición estatal o religiosa.

Naturaleza:

La Ilustración tiende a la naturaleza e intentará basar su moral, derecho, etc. en ella, dejando de lado el conocimiento divino y metafísico.

Libertad:

La razón ha de ser autónoma y libre para alcanzar el progreso.

Progreso:

El progreso científico marcó un punto de vista positivo sobre el mundo.

Sapere Aude: Atrévete a Pensar

Kant, como ilustrado, cree en el potencial de la razón para que el ser humano alcance el progreso. Para ello es necesario usar la razón de manera libre, sin la influencia de tutores que guíen nuestro pensamiento. Al decir esto, Kant tiene en mente especialmente a los guías religiosos que han coartado el libre pensamiento. Kant define su época no como una época ilustrada, sino como una en proceso de ilustración, en la que el ser humano está aprendiendo a pensar por sí mismo, lo que llama alcanzar la mayoría de edad. De lo contrario, la minoría de edad, dice que es culpable ya que todo ser humano, a no ser que tenga algún tipo de impedimento físico-psicológico, puede llegar a conocer y si no lo hace, es por cobardía o comodidad. Por todo esto, el lema de la Ilustración es Sapere Aude, que quiere decir en latín, atrévete a pensar. Atrévete a pensar sin la guía de otros.

No obstante, Kant defiende que esta libertad para usar la razón debe tener límites. El ciudadano tiene el deber de pensar por sí mismo, pero a la hora de cumplir la ley, ha de obedecer. Por eso, al final, Kant defenderá el siguiente lema para la Ilustración: Atrévete a pensar, pero obedece.