Hume: Sentimiento, Creencia, Causalidad y la Experiencia como Guía de Vida
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Análisis del Texto: Causalidad según Hume
El texto presenta un ejemplo concreto de la relación de causa y efecto utilizando el choque entre dos bolas de billar. El autor argumenta que la contigüidad en el tiempo y el espacio, la prioridad temporal de la causa sobre el efecto, y la conjunción constante entre la causa y el efecto son circunstancias fundamentales para entender la acción de cualquier causa. Además, sugiere que al realizar el mismo experimento con bolas de billar similares, siempre se obtiene el mismo resultado, lo que refuerza la idea de una relación constante entre la causa y el efecto. Este análisis se relaciona con la filosofía empirista y el enfoque en la observación y la experiencia sensorial para comprender las relaciones causales.
Problema de la Causalidad
El problema filosófico al que responde el texto es el de la causalidad, es decir, cómo se relacionan las causas y los efectos en el mundo. La tesis principal del autor es que la relación de causa y efecto se manifiesta a través de tres circunstancias fundamentales: la contigüidad en el tiempo y el espacio, la prioridad temporal de la causa sobre el efecto, y la conjunción constante entre la causa y el efecto. El autor emplea el ejemplo de dos bolas de billar chocando para ilustrar estas circunstancias. Argumenta que la causa (el choque entre las bolas) precede temporalmente al efecto (el movimiento de la bola inicialmente en reposo), y que este efecto siempre sigue a la misma causa en circunstancias similares. Por lo tanto, concluye que estas tres circunstancias son esenciales para entender y definir una causa.
Filosofía del Autor
El contenido del texto se relaciona estrechamente con la filosofía empirista y de la experiencia sensorial del autor, posiblemente David Hume. El autor utiliza un ejemplo concreto y observable, el choque entre dos bolas de billar, para ilustrar su argumento sobre la relación de causa y efecto. Este enfoque en la observación empírica y en la experiencia sensorial refleja la filosofía de Hume, quien enfatizó la importancia de la experiencia en la formación de nuestro conocimiento. Además, el autor analiza las circunstancias necesarias para establecer una relación causal, como la contigüidad en el tiempo y el espacio, la prioridad temporal de la causa sobre el efecto, y la conjunción constante entre la causa y el efecto. Estos elementos también son consistentes con la perspectiva de Hume, quien argumentó que nuestras ideas de causalidad se basan en la observación repetida de eventos que ocurren juntos de manera consistente en el tiempo y el espacio.
Conceptos Clave en la Filosofía de Hume
Sentimiento
Hume considera que el sentimiento es la clave de la moral: es decir, que son las emociones y no la razón quienes nos ayudan a distinguir lo que está bien de lo que está mal. De manera natural sentimos rechazo ante hechos que se nos presentan como crueles o despreciables. Según Hume, la valoración de los vicios y las virtudes es un problema que no puede resolverse mediante una demostración. Por el contrario, nuestras decisiones sobre asuntos morales son el resultado de percepciones que sentimos más que juzgamos. La virtud procede del placer o del sentimiento de satisfacción que nos proporciona la contemplación de cierto acto.
Creencia
Hume define así este concepto: “la creencia es un sentimiento que no depende de nuestra voluntad y que nos obliga a percibir un objeto de una manera diferente, anticipándonos al futuro o atribuyendo al objeto propiedades que no son directamente observables”. Esta definición que nos proporciona el propio Hume deja ya bien claro que la creencia es un conocimiento indemostrable y totalmente subjetivo: aunque no tengamos la certeza de que la realidad vaya a encajar con nuestras anticipaciones, las hacemos una y otra vez, llevados precisamente por esta creencia. Hume convierte la creencia en “la guía de la vida”, con lo que viene a afirmar la irracionalidad de nuestro comportamiento.
Causalidad
Es un concepto falso, sin correlato real alguno, que el ser humano se inventa y utiliza para creer que conoce la realidad. Hume critica el razonamiento causal que, en su opinión, no es una cuestión de hechos ni una relación de ideas, sino una universalización infundada a partir de la acumulación de experiencias particulares. El hábito nos lleva a formar la creencia de que el futuro repetirá el pasado, pero no podemos afirmar con certeza que sea así. Por si fuera poco, el concepto de causa es una abstracción inobservable en cualquier experiencia empírica. Nos basamos tan solo en la costumbre para establecer todo tipo de razonamientos causales.
Percepción
Hume llama percepciones a todo el contenido que esté presente en la mente y distingue dos tipos: las impresiones y las ideas. Hume define percepción como “todo lo que puede estar presente a la mente, sea que empleemos nuestros sentidos, o que estemos movidos por la pasión o que ejerzamos nuestro pensamiento y nuestra reflexión”. Como se ve, la definición del autor es muy amplia, e incluiría lo que podemos ver, oír o tocar, pero también lo que sentimos, o aquello que estamos pensando o razonando.
Experiencia
Hume es un autor empirista y, por lo tanto, considera que la experiencia es la fuente fundamental de conocimiento en las cuestiones de hecho, considerando que, en contra de la preferencia cartesiana por la razón, es la costumbre la guía de la vida. La experiencia nos proporciona las impresiones y, por lo tanto, nos informa acerca de la realidad externa. Gracias a ella somos capaces de inferir la existencia de un objeto a partir de otro, dado que nos muestra las conjunciones de objetos en el pasado (causalidad).
Hume y la Metafísica
El Yo, la Sustancia, el Mundo y Dios
- El Yo: Hume cuestiona la existencia de un"y" sustancial y permanente que persiste a través del tiempo. Argumenta que cuando intentamos buscar este"y" en nuestra experiencia, solo encontramos una sucesión de percepciones y sensaciones cambiantes, pero no una entidad sólida y permanente que las experimenta. Por lo tanto, concluye que la noción de un yo independiente es una construcción ficticia basada en la asociación de percepciones.
- La Sustancia: Hume critica la noción de sustancia como una entidad subyacente detrás de las cualidades observadas de los objetos. Argumenta que nuestras experiencias solo nos proporcionan información sobre las cualidades y relaciones de los objetos, pero no sobre una sustancia independiente que las sostiene. Por lo tanto, la idea de una sustancia detrás de las apariencias carece de fundamento empírico.
- El Mundo: Hume cuestiona la posibilidad de conocer el mundo externo más allá de nuestras percepciones. Argumenta que nuestras experiencias sensoriales son todo lo que podemos conocer directamente y que cualquier afirmación sobre la naturaleza del mundo externo es una inferencia basada en nuestras percepciones. Sin embargo, estas inferencias están sujetas a la duda y la incertidumbre, ya que no podemos garantizar que nuestras percepciones sean una representación precisa de la realidad externa.
- Dios: Hume aborda la noción de Dios desde una perspectiva crítica, argumentando que no hay evidencia empírica suficiente para justificar creencias en la existencia de un ser supremo. Además, cuestiona la validez de los argumentos metafísicos tradicionales para la existencia de Dios, como el argumento ontológico o el argumento cosmológico, señalando que se basan en presuposiciones que no están respaldadas por la experiencia.
Hume en Contexto Filosófico
Guillermo de Ockham
Ockham fue un filósofo y teólogo medieval, conocido por su nominalismo y su principio de economía, conocido como"Navaja de Ockha". A diferencia de Hume, Ockham creía en la existencia de entidades metafísicas, pero abogaba por la simplicidad en la explicación de fenómenos y rechazaba la necesidad de entidades innecesarias. Tanto Hume como Ockham compartían un escepticismo hacia las abstracciones innatas, pero diferían en el alcance de su empirismo y sus posturas respecto a la metafísica.
Francis Bacon
Bacon fue un filósofo y estadista del Renacimiento, conocido por promover el método inductivo en la investigación científica. A diferencia de Hume, Bacon creía en la posibilidad de descubrir leyes naturales a través de la observación y la experimentación, aunque también estaba interesado en evitar el error y el prejuicio en la investigación. Mientras que Hume cuestionaba la validez de la inducción como método para establecer verdades universales, Bacon la consideraba esencial para el progreso científico.
La Nueva Ciencia (Galileo Galilei e Isaac Newton)
: La Nueva Ciencia representó un cambio radical en la forma en que se entendía el universo, promoviendo un enfoque matemático y experimental en la investigación científica. Aunque Hume compartía el enfoque empírico de la Nueva Ciencia, difería en su escepticismo hacia la posibilidad de alcanzar verdades universales o leyes naturales absolutas. Mientras que la Nueva Ciencia buscaba establecer leyes universales y demostrables a través de la observación y la experimentación, Hume argumentaba que nuestras creencias están limitadas por la experiencia y la asociación de ideas, sin garantía de correspondencia con la realidad objetiva. Descartes es un racionalista que creía en la capacidad de la razón humana para descubrir verdades universales e innatas mediante el método deductivo. Hume, por otro lado, es un empirista radical que sostiene que todo nuestro conocimiento proviene de la experiencia sensorial y la observación. Rechaza la existencia de ideas innatas y argumenta que la mente no puede concebir conceptos que no hayan sido derivados de la experiencia.
Causalidad: Descartes postula la existencia de una causa primera, Dios, que garantiza la verdad y la realidad del mundo externo. Hume cuestiona la noción de causalidad, argumentando que nuestras percepciones de causa y efecto se basan en la mera observación de secuencias de eventos, sin evidencia de una conexión necesaria entre ellos. Niega la posibilidad de conocer la causa verdadera de cualquier fenómeno. Metafísica: Descartes era un dualista que creía en la existencia de dos sustancias distintas: la mente y el cuerpo. Hume adopta una postura más escéptica hacia las afirmaciones metafísicas. Rechaza la noción de sustancia y duda de la existencia de Dios, argumentando que tales conceptos están más allá del alcance de la experiencia humana y, por lo tanto, no pueden ser conocidos. Similitudes: Crítica al conocimiento tradicional: - Tanto Descartes como Hume cuestionan las creencias tradicionales y buscan fundamentar el conocimiento en una base más sólida y segura. Descartes lo hace a través del método de la duda metódica, mientras que Hume utiliza el análisis de la experiencia y la asociación de ideas.