Hitos Clave en la Legislación Ambiental Global y el Ecosistema de la Dehesa Española

Hitos Clave en la Legislación Ambiental Internacional

A lo largo de las últimas décadas, la comunidad internacional ha establecido una serie de acuerdos y convenciones fundamentales para la protección del medio ambiente y la promoción del desarrollo sostenible. A continuación, se detallan algunos de los más relevantes:

1985: Convención de Viena para la Protección de la Capa de Ozono

La Convención de Viena, adoptada en 1985, tuvo como finalidad principal “adoptar medidas apropiadas… para proteger la salud humana y el medio ambiente contra los efectos adversos resultantes o que puedan resultar de las actividades humanas que modifiquen o puedan modificar la Capa de Ozono”. Este acuerdo marcó un hito en la cooperación global para abordar un problema ambiental transfronterizo. Entró en vigor el 22 de septiembre de 1988.

1992: Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo

La Declaración de Río, compuesta por veintisiete principios, es un documento fundamental que establece las bases para el desarrollo sostenible. De sus principios, el número 15 es particularmente relevante, expresando lo siguiente: “Con el fin de proteger el medio ambiente, los Estados deberán aplicar ampliamente el criterio de precaución conforme a sus capacidades. No deberá utilizarse como excusa para aplazar la adopción de medidas eficaces en función de los costos para impedir la degradación del medio ambiente.”

1997: Protocolo de Kioto de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático

El Protocolo de Kioto fue suscrito el 11 de diciembre de 1997 por los Estados Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. Su objetivo principal fue agregar nuevas obligaciones a la Convención, entre otras, la de limitar las emisiones conjuntas de seis gases de efecto invernadero en un 5,2% para el conjunto de países industrializados durante el periodo 2008-2012. Este Protocolo entró en vigor el 16 de febrero de 2005.

2001: El Convenio de Estocolmo sobre Contaminantes Orgánicos Persistentes (COP)

El Convenio de Estocolmo fue firmado teniendo en cuenta el principio Nº 15 de la Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo (1992). Su finalidad es controlar y eliminar un grupo de doce compuestos peligrosos conocidos como “la Docena Sucia”, que son Contaminantes Orgánicos Persistentes (COP). Este convenio entró en vigor el 17 de mayo de 2004.

La Dehesa: Un Ecosistema Modelado por el Hombre

La dehesa es un ecosistema de creación humana, resultado de la transformación del bosque de encinas primitivas. Este proceso implica el aclareo de los árboles y el control del estrato arbustivo para estabilizar el pastizal. En este medio semi-natural, los árboles se desarrollan mejor y producen más frutos, mientras que la hierba, al incrementarse la radiación solar sobre el suelo debido al aclareo del arbolado y la ausencia de competencia con los arbustos, aumenta su presencia y mejora su composición.

Importancia y Distribución de la Dehesa en España

España cuenta con casi 4 millones de hectáreas de dehesa, de las cuales casi la mitad se encuentra en Andalucía. La explotación de la dehesa es una principal fuente de renta y empleo en amplias zonas del medio rural español, lo que contribuye a evitar el despoblamiento del territorio y a prevenir los incendios forestales.

Aprovechamientos Tradicionales y Nuevas Alternativas

El principal aprovechamiento de la dehesa es la ganadería extensiva. Diferentes especies, como el cerdo ibérico, el vacuno de carne, los toros de lidia y, en menor medida, ovejas y cabras, pastan por este ecosistema que ha sido moldeado por la mano del hombre a lo largo de los siglos.

Además de la ganadería extensiva, existen otros aprovechamientos tradicionales:

• El corcho
• La caza
• La miel

Recientemente, han surgido nuevas alternativas que buscan diversificar la economía de la dehesa y potenciar sus funciones ambientales:

• El agroturismo
• La puesta en marcha de funciones ambientales, como su papel de sumidero de CO2.