Historia de la Segunda República: Transformaciones y Reformas (1931-1933)

Enviado por alejandro y clasificado en Historia

Escrito el en español con un tamaño de 4,84 KB

La Proclamación de la Segunda República Española

Tras la dimisión de Berenguer, el rey Alfonso XIII encargó formar un nuevo gobierno al almirante Aznar, quien convocó unas elecciones municipales encargadas de elaborar los censos electorales que debían garantizar las elecciones generales constituyentes. El 12 de abril, los republicanos habían ganado en todas las capitales de provincia. Ante este resultado, Alfonso XIII dejaba el trono el 13 de abril.

La Segunda República fue proclamada de forma muy rápida el 14 de abril por un comité revolucionario en San Sebastián, presidido por Niceto Alcalá-Zamora. El mismo día, horas antes, Francesc Macià proclamó la República Catalana independiente, aunque se llegó a una solución inmediata cuando el gobierno se comprometió a respetar la autonomía catalana.

Contexto Internacional y Social

La República coincidió con un contexto internacional sumamente complicado debido a la crisis de los sistemas parlamentarios democráticos y el auge de los fascismos, además de las consecuencias de la Gran Depresión de 1929 y una oleada de conflictos sociales en toda Europa.

Las Cortes Constituyentes y la Constitución de 1931

En junio de 1931 se celebraron elecciones a Cortes Constituyentes por sufragio universal, en las que obtuvo la mayoría una coalición de republicanos y socialistas.

Principios de la Constitución de 1931

El texto constitucional reflejaba un pensamiento democrático avanzado y buscaba establecer un Estado del bienestar que alcanzara a toda la sociedad mediante una más justa redistribución de la riqueza. Estableció una república democrática bajo soberanía popular con una estricta separación de poderes. Sus puntos clave fueron:

  • Derechos Civiles: Reconocía todos los derechos civiles individuales, establecía el matrimonio civil, el divorcio y la equiparación de derechos para los hijos legítimos e ilegítimos.
  • Cuestión Religiosa: Se proclamó la aconfesionalidad del Estado y se reconoció la libertad de conciencia. Se suprimió cualquier ayuda económica a la Iglesia, se la obligó a pedir autorización para el uso de espacios públicos y se prohibió a las órdenes religiosas dedicarse a la enseñanza.
  • Organización Territorial: Establecía el derecho a la autonomía de las regiones.
  • Propiedad Privada: Se introdujo la limitación del derecho a la propiedad privada, reconociendo la posibilidad de que la República pudiera realizar expropiaciones siempre por el bien nacional.
  • Garantías: Se creaba un Tribunal de Garantías Constitucionales para velar por el cumplimiento de las normas y leyes que se aprobasen.

La Constitución fue aprobada en diciembre de 1931, formándose el primer gobierno constitucional presidido por Manuel Azaña, con la presidencia de la República a cargo de Niceto Alcalá-Zamora.

El Bienio Reformista (1931-1933)

Este periodo, constituido formalmente el 15 de diciembre de 1931, fue la etapa más activa políticamente de la República, destacando las siguientes reformas:

1. Reforma Laboral

Promovida por Largo Caballero, incluyó medidas pioneras como el seguro de enfermedad, las vacaciones pagadas, la jornada laboral de 8 horas y el salario mínimo. No obstante, la CNT, al considerarlas insuficientes, convocó violentas huelgas revolucionarias.

2. Reforma Agraria (1932-1933)

Buscaba atajar el problema histórico de la redistribución de la tierra, que había derivado en una situación de anarquía y violencia entre jornaleros. Sin embargo, no se abordó a fondo por temor a que la oposición acabase con la República. El Instituto de Reforma Agraria (IRA) solo expropió una pequeña parte de las tierras debido a que el Estado no disponía de recursos suficientes para las indemnizaciones. La reforma no solucionó el problema, sino que lo agravó, ya que los jornaleros empezaron a perder sus esperanzas en el régimen republicano.

3. Reforma Militar

Su objetivo era reducir el número excesivo de oficiales, potenciar un ejército moderno y asegurar la lealtad al nuevo régimen. Para ello, se ofreció a muchos militares la reserva activa manteniendo toda su paga y derechos. A pesar de esto, en agosto de 1932, el general Sanjurjo se pronunció en Sevilla (la Sanjurjada), aunque el golpe fracasó y el militar fue detenido y exiliado. Como complemento, se creó la Guardia de Asalto como un cuerpo de orden público fiel a la República.

Entradas relacionadas: