Hidrografía de España: Vertientes, Cuencas Fluviales y el Río Ebro
Geografía Fluvial de la Península Ibérica: Vertientes y Cuencas
1. Vertientes Hidrográficas
Una vertiente hidrográfica es el conjunto de cuencas cuyas aguas vierten en el mismo mar. En la Península Ibérica se observa una gran disimetría entre las vertientes Atlántica y Cantábrica, y la vertiente Mediterránea.
- Vertiente Cantábrica: Los ríos son cortos, ya que nacen en montañas cercanas a la costa. Presentan gran fuerza erosiva, son caudalosos y de régimen bastante regular.
- Vertiente Atlántica: Los ríos son largos, al nacer cerca del Mediterráneo y desembocar en el Atlántico. Poseen escasa fuerza erosiva, son caudalosos y de régimen irregular.
- Vertiente Mediterránea: Excepto el Ebro, los ríos son cortos, puesto que nacen en montañas próximas al mar. Tienen gran fuerza erosiva, escaso caudal y un régimen muy irregular.
2. Cuenca Hidrográfica
Una cuenca hidrográfica es el territorio cuyas aguas vierten a un río principal y a sus afluentes. Las cuencas se caracterizan por los siguientes rasgos:
- Se encuentran separadas por divisorias de aguas, formadas por las cumbres de los relieves montañosos que las delimitan.
- En la cuenca, los ríos circulan por un cauce o lecho y forman una red organizada jerárquicamente, desde los subafluentes y afluentes hasta llegar al río principal.
3. La Cuenca del Ebro
El río Ebro es el segundo río peninsular por su longitud (928 km), por la extensión de su cuenca (85.000 km²) y por su caudal (600 m³/seg). Se formó durante la orogénesis Alpina.
La cuenca del Ebro se encuentra encerrada entre la Cordillera Cantábrica, los Montes Vascos y los Pirineos por el norte; el Sistema Ibérico por el suroeste; y la Cordillera Costero-Catalana por el este. Esta configuración del relieve influye de manera muy notoria en la climatología que registra la cuenca, la cual se caracteriza por ser un clima mediterráneo continentalizado o de interior que, en algunos casos, resulta ser un clima semiárido. La falta de lluvias y también la escasa influencia moderadora del mar se deben precisamente a dicha configuración del relieve.
El río Ebro se encuentra sometido a diversos regímenes fluviales:
- En su cabecera y tramo superior, se encuentra sometido a un régimen fluvial atlántico.
- En la parte media de su recorrido, el río Ebro recibe grandes aportaciones de su margen izquierda: Aragón, Gállego, Cinca-Segre, cuyas aguas proceden de los Pirineos y, por lo tanto, su tipo de régimen es pluvio-nival.
- Tanto los afluentes de la margen derecha, procedentes del Sistema Ibérico, como los afluentes procedentes de la Cordillera Costero-Catalana, son de caudal escaso y del tipo pluvial mediterráneo (ej. Jalón). Son también ríos cortos por la proximidad de las montañas al cauce del Ebro.
Durante un tiempo de la Era Terciaria, la cuenca estuvo cubierta por el mar. Luego se cerró, formando un lago interior y, finalmente, al terminar la Era Terciaria, se abrió paso a través de la Cordillera Costero-Catalana y se comunicó con el mar Mediterráneo.