Heterocigotos y Nativos Digitales: Adaptabilidad y Supervivencia Tecnológica

La Ventaja de los Heterocigotos y su Paralelo con los Nativos Digitales

Muchas de nuestras características dependen de genes que proceden de ambos progenitores. Cada gen puede tener distintas variantes o alelos, y cada individuo tiene dos alelos para cada gen. Si ambos alelos son iguales para esa característica, el individuo es homocigoto; si son diferentes, es heterocigoto. En el caso de algunas enfermedades genéticas recesivas, estas se manifiestan clínicamente solo en los individuos homocigotos para el alelo defectuoso o mutado.

En los individuos heterocigotos, aunque uno de los alelos sea defectuoso, la enfermedad no se manifiesta. Además, en muchos casos, se ha encontrado que los heterocigotos tienen una ventaja adaptativa, no solo respecto a los homocigotos para el alelo que provoca la enfermedad, sino también respecto a aquellos que son homocigotos para el alelo considerado "normal". Como se cita, "Ventaja ambigua, bendición o maldición, depende del ambiente donde vivan y del azar de los cruzamientos" (1).

Un ejemplo claro es el de la anemia falciforme. Las personas heterocigotas para esta enfermedad (con un alelo mutado y un alelo normal) no solo no padecen la anemia, sino que también son resistentes a la malaria. En ambientes donde la malaria es común, ser heterocigoto es una ventaja, lo que explica la mayor abundancia de este alelo en esas regiones. Así opera la selección natural.

Analogía con la Educación y las TIC

¿Qué relación tiene esto con la educación y las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC)? Aunque las habilidades para acceder a la información y comunicarse no son características genéticas heredables, podemos establecer una analogía. Padres y docentes, que con mayor o menor esfuerzo hemos incorporado las TIC, seríamos los "heterocigotos". No padecemos la "enfermedad" de no poder usar estas tecnologías, pero podríamos sobrevivir en un ambiente sin ellas. Poseemos ambas habilidades, siendo resistentes tanto a la falta de medios tradicionales como a la de los digitales.

Aquellos que, por motivos socioeconómicos, culturales o generacionales, no pueden manejar las TIC, enfrentan serias dificultades en un entorno que cada vez más lo exige, quedando excluidos. Estos serían los "homocigotos del alelo mutado".

Nuestros hijos y alumnos, los "nativos digitales", serían los "homocigotos para el alelo normal". En un entorno mediado por las nuevas tecnologías, tienen una gran ventaja adaptativa.

El Desafío de la Sobreadaptación Tecnológica

Pero, ¿qué pasaría si los nativos digitales no pudieran utilizar esas tecnologías? ¿Podrían sobrevivir? Probablemente no, o al menos muchos de ellos no. Al igual que las poblaciones con baja variabilidad genética son más frágiles por su menor capacidad de adaptación, nuestros hijos, sobreadaptados a las nuevas tecnologías, son altamente vulnerables ante su ausencia.

• ¿Cuántos de nuestros jóvenes pueden prescindir de la computadora, Internet, el celular o la calculadora?
• ¿Cuántos podrían elaborar un buen trabajo sin un corrector ortográfico?
• ¿Cuántos podrían buscar información en una biblioteca o enciclopedia física?
• ¿Cuántos pueden hacer un gráfico sin Excel?
• ¿Cuántos pueden realizar cálculos básicos sin una calculadora?
• ¿Cuántos dominan tanto el lenguaje informal del chat como el formal?

Este es uno de los desafíos y riesgos que enfrentamos. ¿Qué estamos haciendo al respecto? ¿Qué podemos hacer? La reflexión queda abierta, y esperamos sus valiosos comentarios.