Guía Completa sobre Suelos: Tipos, Propiedades y Análisis Granulométrico

Tipos de Suelos y sus Características

Los suelos se clasifican en diversas categorías según su origen y propiedades. A continuación, se describen algunos de los tipos más comunes:

• Suelos Residuales

  Se forman por la descomposición de rocas preexistentes en el mismo lugar donde se originaron.

• Suelos Coluviales

  Se acumulan al pie de los sistemas montañosos en las etapas iniciales de los procesos de sedimentación.

• Suelos Aluviales

  Son suelos donde el exceso de agua limita la actividad biológica y produce fenómenos de reducción química (hidromórficos). Estos suelos ocupan los valles occidentales.

• Suelos Diatomáceos

  Acumulación de conchas de caracoles alrededor de la laguna; turbas: descomposición de la capa vegetal que queda atrapada entre dos capas de suelo.

• Suelos Finos

  También llamados cohesivos, no se pueden describir únicamente por la distribución granulométrica.

Estados Básicos del Suelo

El suelo se clasifica en cuatro estados básicos: sólido, semisólido, plástico y líquido.

Propiedades de los Suelos

• Plasticidad

  Es la propiedad de un material que le permite soportar deformaciones rápidas sin rebote elástico, sin variación volumétrica y sin desmoronarse o agrietarse.

• Suelos Granulares

  Se utiliza el análisis granulométrico para determinar la proporción de material por vía seca con partículas de tamaños superiores a 0.075 mm.

• Uniformidad

  Es el coeficiente que proporciona el rango de tamaño de las partículas.

• Compresibilidad

  Es el grado en que una masa de suelo disminuye su volumen bajo el efecto de una carga.

• Índice Plástico

  Es el rango de contenido de humedad para el cual el material se comporta plásticamente.

• Consistencia

  Se refiere al grado de cohesión de las partículas del suelo y su resistencia a las fuerzas exteriores que tienden a deformar o destruir su estructura, variando con la humedad.

• Límite Líquido

  Es el contenido de humedad expresado en porcentaje con respecto al peso seco de la muestra.

• Límite Plástico

  Es el mínimo contenido de humedad de un suelo que permite amasar a mano rollitos de 3 mm. Tiene importancia ya que en la construcción es más fácil trabajar el suelo en ese estado.

Determinación de Límites de Atterberg

Muestra para Límite Líquido

1. Se toma una muestra de 150 a 200 gramos en condición húmeda o seca que pase por el tamiz 40. Se prepara una muestra con agua destilada hasta lograr una condición suave y homogénea.
2. Se coloca una porción preparada en la copa de Casagrande con una espátula, dejando la superficie horizontal y paralela a la base. Con la espátula, marcar el meridiano que pasa por el centro del tacón. Se pasa el ranurador a través de la muestra, manteniéndolo normal a la superficie de la copa.
3. Se gira la manecilla de la copa y, al cerrarse la ranura 13 mm, se anota el número de golpes. Al realizar la primera anotación, se repite el mismo procedimiento, recomendando hacer por lo mínimo tres anotaciones.

Muestra para Límite Plástico

1. Se toma aproximadamente 1 cm³ de la muestra utilizada para el límite líquido. Se reduce el contenido de humedad extendiendo la masilla sobre la lámina de vidrio o amasándola en la palma de la mano.
2. Si estos cilindros alcanzan 3 mm de diámetro sin romperse, se doblan y se presionan formando una pastilla que vuelve a doblarse de la forma indicada.

Análisis Granulométrico por Vía Húmeda

Se realiza en suelos muy finos cuando el 98% pasa por el tamiz 200. Se realiza por vía húmeda, también llamado método del hidrómetro.

1. La muestra se deja sumergida 24 horas con un defloculante (aditivo que dispersa las moléculas de arcilla y evita que se unan).
2. El ensayo dura 3 días. El primero, se deja la muestra sumergida en el defloculante. El segundo, se toma el ensayo introduciendo el hidrómetro, y la última lectura se da al día siguiente.
3. En un tiempo determinado, se mide la lectura. Se toman 2 vasos precipitados de 250 ml, uno con agua y otro con agua y la muestra (ambos con defloculante).
4. Se sumerge el hidrómetro y se lee la lectura y la temperatura. Así sucesivamente. Al sacarlo, la muestra se coloca en el agua defloculante para que se estabilice.