Gestión de Riesgos Laborales: Carga Física y Mental en el Trabajo

Factores de Riesgo: Carga de Trabajo

Es imprescindible conocer las exigencias físicas y mentales de cada actividad laboral y planificar y diseñar el trabajo de manera que se adapte a las necesidades de cada trabajador.

La Carga de Trabajo

La carga de trabajo se podría definir como: el esfuerzo que supone desempeñar una actividad laboral.

La carga de trabajo es un factor de riesgo presente en todas las actividades profesionales. Tradicionalmente, el esfuerzo se relacionaba con la carga física o muscular. Sin embargo, hoy en día nos encontramos factores de riesgo ligados al aumento de la complejidad de la tarea, la aceleración del ritmo, etc. Por lo tanto, podemos encontrarnos con dos tipos de carga de trabajo:

• Carga física
• Carga mental

Carga Física

Se define como el conjunto de requerimientos físicos a los que se ve sometida la persona a lo largo de la jornada laboral.

Para estudiar la carga física hay que conocer:

• Esfuerzos físicos.
• Postura de trabajo.
• Manipulación de cargas:
  • La supresión del riesgo si puede evitarse.
  • La evaluación sistemática por parte del empresario.
  • Adopción de medidas técnicas y organizativas para reducirlo.
  • La información y formación sobre la forma correcta del manejo de cargas.

No se ha establecido un tope a la carga máxima por trabajador, pero se considera aceptable una masa máxima de 25 kilos.

La Fatiga

La fatiga puede ser producida por la carga física o la carga mental que requiere un trabajo. La consecuencia más directa de la carga de trabajo es lo que conocemos como fatiga. Se puede definir como: la disminución de la capacidad física y mental de un individuo, después de haber realizado un trabajo durante un periodo de tiempo determinado.

Los síntomas de la fatiga son:

• Irritabilidad.
• Depresión.
• Falta de energía y voluntad para trabajar.
• Salud más frágil.
• Dolores de cabeza.
• Mareos.
• Insomnio.
• Pérdida de apetito.

Carga Mental

Existen trabajos que requieren poca carga física, pero, sin embargo, implican esfuerzos mentales importantes de atención y memoria.

Definimos la carga mental como el nivel de actividad mental necesario para desarrollar el trabajo.

Será excesiva cuando las demandas de la tarea excedan la capacidad del individuo. Para poder evaluar la carga mental tendremos en cuenta:

1. Factores de carga del puesto: tipo de tarea y condiciones en que se realiza, mediante el nivel de atención exigido, el tiempo que debe mantenerse esa atención, el ritmo de trabajo y la repercusión de los errores cometidos.
2. Repercusiones sobre el individuo: como alteraciones fisiológicas, psicológicas y del comportamiento.

Los factores que inciden en la carga mental son:

• La cantidad de información que se recibe.
• La complejidad de la respuesta que se exige. (Estos dos factores condicionarán que las respuestas puedan ser automatizadas una vez superado el periodo de aprendizaje).
• El tiempo en que se ha de responder. Si el proceso estímulo-respuesta es continuo, la capacidad de respuesta del individuo puede verse saturada.
• Las capacidades individuales. Las personas tenemos una capacidad de respuesta limitada que está en función de la edad, el nivel de aprendizaje, el estado de fatiga, las características de personalidad, las actitudes hacia la tarea, etc.