Geografía Física de España: Relieve y Costas

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Situación de la Península Ibérica

Está situada en el punto más occidental de Europa. Es una de las tres penínsulas meridionales. Los Pirineos forman una barrera natural que resta facilidades al comercio con Europa. Por el sur, 14 km separan Gibraltar de África.

Características del relieve peninsular español

  1. Forma maciza: Determinada por la anchura y la extensión de las costas. Presenta un trazado rectilíneo.
  2. Elevada altitud media:
    • Existencia de un altiplano central.
    • Numerosas y diversas cordilleras que atraviesan el territorio.
    La altura media es de 660 m, duplica la de Francia y la media europea.
  3. La disposición periférica del relieve peninsular dificulta el acceso a la meseta.
  4. La diversidad del relieve de la península y la variedad de climas explican que el territorio presente unidades naturales bien diferenciadas.

La Meseta

Es la unidad principal del relieve español, representa el 45% de su superficie.

  • Submeseta norte: Tiene una altitud media de 800/850 m, aparece rodeada de montañas y es atravesada de este a oeste por el Duero.
  • Submeseta sur: Altitud media de 500/700 m y está formada por dos altiplanos separados por los Montes de Toledo (río Tajo y el Guadiana). Los ríos se escurren rápidamente hasta la desembocadura.

Unidades relacionadas con la meseta

  1. Antiguo zócalo paleozoico: Aflora una parte del zócalo en la parte occidental de la meseta, donde forma una penillanura de pendiente suave y estrecha que se hace más amplia en Extremadura hasta que llega a Portugal y al mar.
  2. Las cuencas sedimentarias: Por el lado oriental de la meseta, el antiguo zócalo se encuentra hundido y sepultado bajo enormes depósitos de materiales que forman las cuencas sedimentarias. Parte de los sedimentos son aportados por los ríos que bajan de las montañas y circulan por la meseta, formados en el período Terciario.
  3. Cordilleras interiores.
  4. Se formaron durante el movimiento alpino.

Cordilleras interiores de la meseta

  • Sistema Central: Divide la meseta en dos mitades. Formado por Somosierra, Guadarrama, Gredos, Gata. Pico más alto: Almanzor (2592 m, Gredos). Bloques hundidos forman valles y abren pasos de montaña altos y nevados que dificultan las comunicaciones en invierno. El puerto más importante es Somosierra.
  • Montes de Toledo: Dividen en dos la submeseta sur y hacen de divisoria entre las aguas que se escurren hacia la cuenca del río Tajo y las que afluyen al Guadiana. Destacan los Montes de Toledo y las sierras de Guadalupe, Montánchez y San Pedro.

Los bordes montañosos de la meseta

  • Macizo Galaico-Leonés: 200 km de lado, comprende Galicia, sierras del oeste de Asturias, montañas de León y las sierras de la Cabrera y la Segundera. La altitud media no llega a los 500 m. Teleno y Peña Trevinca alcanzan los 2000 m. Este macizo corresponde a un fragmento del relieve más antiguo de la península.
  • Cordillera Cantábrica: Cadena lineal que presenta formas muy energéticas y grandes desniveles en la fachada cantábrica y menos acentuadas en la vertiente interior.
    • Parte occidental: Macizo Asturiano: da lugar a una serie de bloques paleozoicos dislocados. Se encuentran los yacimientos más grandes de España.
    • Parte oriental o Montaña Cantábrica: las cimas pierden altitud. Los Picos de Europa ofrecen la altitud más grande de la Cordillera Cantábrica (2648 m, Torre Cerredo). Otras partes importantes: Peña Ubiña, Peña Labra y Peña Prieta, Peña Gorbea, Aralar.
  • Sistema Ibérico: Limita la meseta de noroeste a suroeste. Esta cordillera está formada por materiales de los zócalos hercinianos y materiales secundarios que el mar fue depositando en el borde oriental de la meseta.
    • Sector norte: Compuesto por un sistema de fallas con horst elevados que forman macizos de más de 2000 m (Demanda, Picos de Urbión, Sierra de Moncayo).
    • Sector sur: Formado por un intrincado juego de sierras y depresiones surcadas por ríos. Se distinguen dos conjuntos montañosos: conjunto interior (Montes Universales, Serranía de Cuenca, Albarracín) y el conjunto exterior (Javalambre, Gúdar, Maestrazgo).
  • Sierra Morena: Constituye el borde meridional de la meseta. El nombre de Sierra Morena le viene del color de sus materiales. En Sierra Morena se explotaban importantes yacimientos mineros, actualmente cerrados. El relieve escarpado de las sierras hace muy difíciles las comunicaciones. Las sierras son más bajas en la zona de Huelva y Sevilla. El único paso que comunica la submeseta sur con Andalucía a través de Sierra Morena es Despeñaperros.

Las cordilleras exteriores a la meseta

  • Los Pirineos: Forman una alineación continua de montañas de unos 440 km de longitud que se extiende desde el golfo de Vizcaya hasta el cabo de Creus, dibujando el límite de la península con el resto de Europa. La cordillera forma una serie de alineaciones paralelas que descienden en forma de escalones colosales.
    • Pirineos axiales o centrales: Es donde se encuentran las altitudes más notables. Debido a su altitud, los puertos de montaña son escasos y de paso difícil (Somport). La parte central está formada básicamente por materiales hercinianos que dan lugar a macizos elevados y crestas.
    • Los Prepirineos: Los forman dos alineaciones montañosas paralelas a la zona axial y de materiales secundarios calcáreos: las sierras interiores (Guara y Peña) y exteriores (Cadí, Montsec), entre las dos, la depresión media pirenaica.
  • Cordilleras Litorales Catalanas: Están separadas de los Pirineos por una serie de fallas y de terrenos volcánicos.
    • Cordillera Prelitoral: Presenta algunas altitudes considerables como la del Turó de l'Home (1706 m).
    • Cordillera Litoral: Tiene un desarrollo escaso. La parte norte muestra materiales paleozoicos, el cual también emerge en la sierra situada al norte de la isla de Menorca.
  • Cordilleras Béticas: Se formaron a lo largo del movimiento alpino. El Sistema Bético lo forman la Cordillera Penibética y la Cordillera Subbética, separadas por discontinuas hoyas (Baza, Guadix, Granada y Antequera).
    • Cordillera Penibética: Cerca de la costa, encontramos Sierra Nevada, con los picos Veleta y Mulhacén.
    • Cordillera Subbética: Forma un arco de materiales plegados, que se extiende desde el peñón de Gibraltar hasta el cabo de la Nao.

El relieve del litoral peninsular

Las costas atlánticas

  • Costa cantábrica: Predominan las formas altas y rectilíneas. Las playas y las llanuras litorales son escasas, como resultado del rápido hundimiento de la Cordillera Cantábrica en el mar. Los acantilados se encuentran allí donde las pendientes de la montaña llegan a la costa. Las olas y las mareas socavan el acantilado. Cuando el roquedal es de dureza desigual, la fuerza del oleaje desgasta las partes menos resistentes y forma entrantes y cuevas hasta que una parte del acantilado se hunde y retrocede de manera desigual. Las rías del Cantábrico son en general cortas y estrechas. Son el resultado de valles excavados por la erosión fluvial en los estratos de rocas blandas, que han sido invadidas por el mar.
  • Costa gallega: Se extiende desde la punta de la Estaca de Bares y el cabo Ortegal, que son los puntos más septentrionales de la península, hasta la frontera de Portugal. El rasgo más característico de la costa gallega son las rías (valles de ríos antiguos, hoy inundados e invadidos por las aguas marinas debido a un hundimiento de la costa).
  • Costa atlántica andaluza: Entre la frontera portuguesa y el peñón de Gibraltar se extiende el golfo de Cádiz. Los aluviones de los ríos han construido llanuras costeras más o menos anchas que forman costas bajas y arenosas, con poco oleaje, donde el viento forma dunas. La acción de las corrientes marinas puede acumular arena en lugares determinados hasta formar flechas litorales.

Las costas mediterráneas

Constituidas por una serie de costas bajas y rectilíneas que se disponen formando amplios arcos, separados por las colinas rocosas de los cabos de Creus, la Nao, Palos y Gata.

  • Litoral catalán: Ofrece relieves muy contrastados como deltas, llanuras litorales, costas acantiladas y costas abruptas. El delta del Ebro es el más grande de la península y uno de los más notables del mar Mediterráneo. Otros deltas menores son el del Llobregat, el Besós y la Tordera.
  • Golfo de Valencia: Desde el cabo de la Nao hasta el delta del Ebro se extiende una llanura litoral de unos 400 km de longitud. Es una llanura costera. El golfo de Valencia forma un arco mucho más pronunciado y en sus aguas se han ido depositando sedimentos marinos y terrestres hasta conformar la llanura actual.
  • Costa mediterránea andaluza y Murcia (Costa Bética): Desde el estrecho de Gibraltar hasta el cabo de la Nao. Costa recortada, determinada por los relieves montañosos de las Cordilleras Béticas, algunos campos de dunas y albuferas como la del Mar Menor en Murcia.

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