Géneros Literarios de la Antigua Grecia: Lírica, Drama e Historiografía

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Lírica Griega

La poesía lírica es una poesía personal y subjetiva que surge en Grecia en el siglo VII a. C. Se trata de una poesía cantada con acompañamiento musical. En sus inicios tenemos la lírica popular, en la que el autor se limita a repetir los poemas transmitidos de forma oral. Más tarde se desarrolla la lírica culta en la que el poeta se sirve de la escritura y se convierte en creador. En esta época la épica había entrado en crisis, hecho que favoreció la consolidación del individualismo y de esta lírica.

Características de la Lírica

  • Se desarrolló en el ambiente de los 'agones' (competiciones poéticas).
  • El mito pierde importancia a favor de la expresión de los sentimientos.
  • Poesía esencialmente cantada y acompañada musicalmente.
  • Se abandonó el hexámetro dactílico.
  • Cada género lírico utilizará el dialecto en el que se compuso por primera vez.

Clasificación de la Lírica

  • Lírica monódica: Cantada por una sola persona, según el verso y contenido puede ser elegíaca, yámbica o mélica.
    • a) Elegíaca: Solón, ateniense que usó la elegía como arma política. Su obra se ha perdido mayormente. Su pensamiento se resume en la Elegía a las Musas. Teognis escribió toda su obra en el exilio, 600 dísticos elegíacos, contenido variado, carácter moral e invitaciones a aprovechar el día a día.
    • b) Yámbica: De origen jonio y contenido satírico y burlesco, principal representante: Arquíloco. Conservamos su obra de forma fragmentaria, escrita en verso yámbico y temas variados como el amor, odio, vino.
    • c) Mélica: La poetisa Safo creó una especie de círculo para rendir culto a las Musas. De su obra conservamos fragmentos en los que el tema principal es el amor y la expresión de los sentimientos.
  • Lírica coral: Cantada por un coro con motivo de alguna fiesta o acontecimiento colectivo. Escritos en dorio y destacan el himno, dirigido a una divinidad y dedicado a los hombres (el epinicio) o encomio.

La poesía coral se desarrolló en las fiestas cívicas o religiosas de las polis. Los miembros del coro eran ciudadanos de cualquier sexo o edad que recitaban acompañados de la cítara, la lira o la flauta y danzaban. De la obra de Píndaro solo nos han llegado 4 libros correspondientes a los Epinicios y están ordenados según la importancia de los juegos para los que se crearon: Olímpicos, Píticas, Nemeas e Ístmicas. El epinicio fue creación de Píndaro, un poema cantado por un coro con música de flauta y lira. La lírica griega fue recogida por el romano Horacio, quien aclimató los temas y metros griegos en Roma. Se encuentra la huella de Píndaro en Fray Luis de León, Goethe y Hölderlin. Horacio se refiere a Safo en varias ocasiones, Ovidio le dedicó una de sus Heroidas y Catulo imitó sus epitalamios. Safo es el ejemplo eximio de la mujer escritora.

El Drama Ático

Síntesis de la lírica y épica. Compuesto en verso. Destaca la imitación, ya que reproduce la vida de personas a través de la interpretación. Mientras en las tragedias se enseña cómo es el mundo, en las comedias, se enseña que, frente a este mundo en que vivimos, podría haber otro mundo disparatado, pero probablemente mucho más feliz. Hunden sus raíces en la Antigua Grecia, surgió como depuración de ritos y ceremonias en honor al Dios Dionisio.

Características del Drama Ático

  • Elementos escénicos. Destaca la orquesta, espacio circular donde se desarrollan los movimientos del coro; el proscenio, donde realizaban la acción los actores; y la escena para los cambios de atuendo.
  • Seguía una estructura fija, que contribuía a la narrativa y al desarrollo de la obra.
  • El coro desempeña un papel crucial en la representación, subrayando la acción doméstica y aportando comentarios sobre la trama.
  • Abordan temas relevantes para la sociedad griega, como el destino humano, la grandeza moral y problemas sociales.

Géneros del Drama Ático

  • Tragedia: Tiene su origen en los antiguos rituales dionisíacos, particularmente en el ditirambo, canto coral en honor a Dionisio, en el que los participantes se disfrazaban de machos cabríos. Estos cantos evolucionaron hasta convertirse en una forma elevada de representación teatral. Presenta acciones serias protagonizadas por dioses o héroes mitológicos sometidos a un destino inevitable. Aborda temas como la libertad, la justicia.

    Principales Autores Trágicos

    • Esquilo: Padre de la tragedia literaria. Introdujo un segundo actor, reforzó el papel del coro y abordó temas como el orden divino, destino y justicia. Su trilogía Orestíada trata sobre la culpa, venganza y restablecimiento de orden moral.
    • Sófocles: Aumentó el número de actores a tres y redujo el protagonismo del coro. Obras destacadas: Edipo Rey, Antígona, Electra.
    • Eurípides: Innovador y polémico, dio voz a los conflictos internos del ser humano, especialmente de las mujeres. Usó el lenguaje claro y personajes complejos. Destaca: Medea, Las Bacantes, Troyanas.
  • Comedia: Surge del 'komodía', una fiesta con cantos y bailes, y combina elementos dramáticos y líricos con el objetivo de provocar la risa. Abordaba temas políticos con fuerte crítica social, más tarde evolucionó hacia asuntos personales y amorosos. Su estilo oscilaba entre lo poético y lo vulgar, con amplia libertad de expresión y uso frecuente del humor, la ironía y los juegos de palabras. Seguía una estructura similar a la tragedia y el coro, más numeroso, tenía un papel destacado aunque más decorativo.

    Representantes de la Comedia

    • Aristófanes: Representante de la Comedia Antigua, mezclaba sátira, política con fantasía y humor en obras como Lisístrata o Las Nubes.
    • Menandro: En la Comedia Nueva, centró sus tramas en conflictos amorosos con personajes estereotipados y festiva representada tras las tragedias, como El cíclope de Eurípides.

La influencia del teatro clásico es evidente en autores como Shakespeare y Lope de Vega, quienes retoman temas y personajes típicos de la comedia antigua, con un teatro que combina lo lúdico y lo didáctico. La tragedia clásica resurge con Calderón de la Barca en el Siglo de Oro Español y más tarde en el siglo XX con Ibsen, Chéjov, Brecht o Lorca, quienes adaptan el mito y la fatalidad a contextos contemporáneos y denuncias sociales. En España, Lorca y Valle-Inclán reinterpretan la tragedia clásica desde lo andaluz y el esperpento. Aunque Aristófanes tuvo escasa influencia en el teatro español, hoy es muy valorado por su crítica moderna. La tragicomedia, como mezcla de elementos trágicos y cómicos, nace con fuerza en obras como La Celestina y se consolida con Lope y Shakespeare.

La Historiografía Griega

La historiografía es un género literario en prosa que tiene como objetivo narrar y analizar hechos históricos. El término historia proviene del griego ιστορία, que significa "investigación" o "relato de lo que se ha visto". Nació en Jonia a finales del siglo VI a. C., en un contexto de desarrollo filosófico y pensamiento racional. En esta época, los griegos comenzaron a interpretar el pasado de manera lógica, alejándose de las explicaciones mitológicas. Los primeros en recopilar y narrar hechos fueron los logógrafos, quienes escribían sobre sus viajes y experiencias. Sin embargo, su método carecía de rigor crítico, ya que mezclaban historia con anécdotas, geografía, etnografía e incluso mitología. A diferencia de la épica, en la historiografía hay una preocupación por la verosimilitud, además del criterio de la racionalidad: el historiador da cabida a otros testimonios tras haberlos sometidos a una crítica racional.

Como todo género literario, la historiografía responde a unas reglas literarias. Así pues, presentará siempre estas:

Características Indispensables de la Historiografía

  1. Proemio. En este, el autor expone la temática de su obra, la explicación de su elección y su metodología.
  2. Excursos y discursos. Gracias a estos, el autor retrata a sus personajes.

Además, el género, sobre todo a partir de Tucídides, tiene carácter científico y como tal, sigue unos principios:

Principios Científicos de la Historiografía

  • αὐτοψία: verificación personal de los hechos.
  • ἀκοή: obtención de noticias a través de fuentes orales o escritas.
  • γνώμη: deducción personal.

La historiografía griega puede dividirse claramente en:

Dos Grandes Etapas y Autores Fundamentales

Los autores fundamentales de la época clásica son Heródoto, Tucídides y Jenofonte, aunque siguió escribiéndose historiografía durante la época helenística y romana, con autores como Polibio y Plutarco (Vidas paralelas).

Heródoto

HERÓDOTO, conocido como el "Padre de la Historia", en el siglo V a. C., es considerado el primer historiador griego, ya que con su obra se inaugura la historiografía. Su obra principal, Historias, se centra en las Guerras Médicas, el conflicto entre griegos y persas, y se organiza en nueve libros, cada uno con el nombre de una Musa. Una de sus principales características es la combinación de historia, etnografía y anécdotas, lo que hace su narración más entretenida. No se limita a relatar los hechos bélicos, sino que también describe en detalle las costumbres y culturas de los distintos pueblos, incluyendo tanto a los griegos como a los llamados "bárbaros". Su método de investigación se basa en la observación personal y la recopilación de información a través de fuentes orales y escritas, aunque no aplica un análisis crítico riguroso, lo que a veces lo lleva a incluir relatos poco verificables. Además, en su narración aún concede un gran protagonismo a los dioses, sin profundizar en explicaciones políticas sobre los acontecimientos. En cuanto a su estilo, su obra está escrita en dialecto jonio y presenta influencias de Homero, con repeticiones, catálogos de fuerzas y tópicos épicos. Su léxico y sintaxis son sencillos, lo que facilitó su difusión y reconocimiento.

Tucídides

Tras Heródoto, la historiografía griega dio un gran avance con TUCÍDIDES, quien escribió Historia de la Guerra del Peloponeso en ocho libros. A diferencia de su predecesor, su enfoque es más riguroso y analítico, centrado en un conflicto contemporáneo de su propia ciudad en lugar de narrar la historia universal. Tucídides abandona los mitos y solo incluye información verificada, descartando relatos dudosos. Su objetivo no es entretener, sino ofrecer un análisis profundo y útil para comprender el presente y el futuro a través del pasado. Su estilo es conciso y directo, escrito en dialecto ático, aunque con arcaísmos y términos poéticos. Su sintaxis es compleja, con frases largas y muchas expresiones abstractas.

Jenofonte

JENOFONTE escribió obras históricas, filosóficas y didácticas. Su Anábasis narra una expedición militar con detalles geográficos y bélicos, mientras que en Helénicas intenta continuar con la obra de Tucídides, pero con menor calidad literaria. Entre sus obras didácticas, la Ciropedia es una historia novelada con reflexiones políticas y morales. A diferencia de Tucídides, Jenofonte no analiza causas ni consecuencias, sino que se enfoca en la narrativa cronológica con un estilo sencillo y claro. Destaca su interés por la psicología individual, dando protagonismo a personajes concretos.

Historiadores Helenísticos: Polibio y Plutarco

De la época helenística, mencionada con anterioridad, destacan dos importantes historiadores griegos: Polibio y Plutarco.

Polibio

El primero de ellos, POLIBIO, fue considerado el último gran historiador griego. Escribió una historia universal centrada en el ascenso de Roma, abarcando desde la Primera Guerra Púnica hasta su hegemonía. Viajó extensamente, estudiando geografía, cultura y costumbres.

Plutarco

Por otro lado, PLUTARCO, con una formación filosófica y amplia erudición, fundó una academia y escribió Vidas paralelas, donde comparó biografías de griegos y romanos ilustres, destacando sus virtudes y defectos.

Influencia de la Historiografía Griega

La influencia de la historiografía griega es de especial interés, pues asentó las bases de la narrativa histórica en Occidente, combinando relato cronológico, análisis político y elementos literarios. Heródoto, considerado el "Padre de la Historia", ofreció la primera visión global del mundo antiguo y promovió un pensamiento pluralista, resaltando la diversidad cultural y la necesidad de comprender las diferencias entre civilizaciones. Tucídides, más riguroso y analítico, fue el primer historiador serio de Europa, influyendo en autores romanos como Salustio y Tácito. Jenofonte continuó esta tradición con un estilo más accesible, enfatizando el papel de los individuos en la historia. Su influencia se percibe en Cicerón y Séneca, y su visión del gobernante ideal en la Ciropedia influyó en Maquiavelo al escribir El Príncipe.

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