Fundamentos de la Psicomotricidad: Trastornos, Desarrollo de la Lateralidad y Modelos de Intervención

Trastornos y Desórdenes en la Realización Psicomotora

Desórdenes en la Realización Psicomotora (Dispaxias)

Alteraciones de movimientos voluntarios (dispraxias o alteraciones para realizar movimientos coordinados) que dificultan aprendizajes escolares, como la escritura o hábitos cotidianos.

Inestabilidad Psicomotora

Un cuadro que preocupa mucho a padres y educadores/as y que, por falta de comprensión, puede llevar al niño/a al fracaso escolar. Se asocia al “Síndrome Hipercinético” y en él se encuentran asociados síntomas intelectuales, motóricos, conductuales y emocionales.

Debilidad Motriz

Insuficiencia general de las actitudes motoras y de sus diversas coordinaciones corporales. Se describe como “torpeza para estar en su cuerpo”, para ocupar el espacio y moverse por él. La debilidad motriz, como síntoma, se puede encontrar en niños/as con trastornos afectivos, asociada a perturbaciones del esquema corporal.

Problemas de Lateralización

Ocurren cuando no hay homogeneidad en la lateralidad del ojo, mano y pie.

Trastornos Tónico-Emocionales o de Relación

Incluyen ritmias motoras, onicofagias (comerse las uñas), tricotilomanía (arrancarse el pelo), tics, etc.

Fases de Adaptación Espacial y Desarrollo Psicomotor

Fases para ayudar al niño/a a pasar de su espacio corporal más próximo a un espacio mayor que le permita ir adaptándose al mundo:

1. Trabajar la organización del yo corporal: Se enfoca en las partes del cuerpo (“partes de mi cuerpo que tengo delante, detrás, arriba, abajo...”) y en ayudarle a organizar temporalmente sus actos (se levanta, va al colegio, come, etc.).
2. Aprender a situar los objetos con respecto al yo: Por ejemplo, “la pelota está detrás de mí”.
3. Situarse yo con respecto a los objetos:
   • En primer lugar, situación respecto a un objeto orientado (una silla, me pongo delante, un coche...).
   • En segundo lugar, situarse respecto a objetos no orientados (detrás de la pelota).
4. Situar los objetos entre sí: Por ejemplo, “la pelota delante del taco”.
5. Ayudar al niño a pasar del espacio de la sala al espacio gráfico: (Esto no es posible en la etapa infantil).

Desarrollo de la Lateralidad: Etapas y Adquisición Conceptual

Para describir la lateralidad se examina preferentemente el predominio de la mano, del ojo y del pie.

Evolución de la Lateralidad

1. Tiempo de indefinición o manifestación no precisa: Entre los 0 y 24 meses.
2. Tiempo de definición: La alternancia de las dos manos en los actos que requieren habilidad motriz es una característica común, entre los 2 y 4 años.
3. Período de automatización o preferencia instrumental expresa: Para la mayoría de los niños o niñas, entre los 4 y 7 años.

Adquisición de la Noción Espacial

• Aproximadamente a los 6 años, el niño/a puede representarse su propia derecha e izquierda, adquiriendo su propia noción conceptual.
• A los 8 o 9 años se puede representar la derecha e izquierda desde la posición de la persona que tiene frente a él.

La Psicomotricidad y su Enfoque Integral

La originalidad de la psicomotricidad respecto a otras ciencias afines radica en que recoge y trata de integrar los datos aportados por la Psicología, la Pedagogía y otras ciencias. Sin embargo, concede más importancia a la educación desde lo corporal, y parte siempre de la unidad y de la totalidad de la persona que se va a educar, a fin de potenciar y mejorar lo cognitivo, lo motriz y lo socio-afectivo.

Modelos de Intervención Psicomotriz: Clásica vs. Vivenciada

Psicomotricidad Clásica (Analítica)

• Tiene ideas preconcebidas, mediante evaluaciones.
• La acción se dirige a mecanizar los gestos eficazmente.
• Propone programas de adiestramiento.
• Pretende lograr un manejo de las nociones témporo-espaciales.
• Los contenidos motrices son un fin.

Psicomotricidad Vivenciada (Global)

• No tiene ideas preconcebidas; se deja al niño actuar para reconocer necesidades más profundas.
• La acción es de carácter expresivo del movimiento.
• Propone situaciones al niño y a la niña, y él o ella debe descubrir sus potencialidades corporales, ser capaz de concebir nuevos gestos y expresar sus sentimientos y emociones.
• Extiende estas nociones hacia la construcción de nociones más abstractas y trascendentes.
• Los contenidos motrices son un medio para lograr un desarrollo en la comunicación, pensamiento y creatividad.