Fundamentos de la Explicación Científica: Modelos Nomológico-Deductivos y Teleológicos
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Modelos de Explicación Científica
Una explicación se concibe habitualmente como un argumento o razonamiento en el cual las premisas ofrecen fundamento total o parcial de la conclusión, la cual describe el hecho que se quiere explicar. Así, los criterios de clasificación suelen apoyarse, por una parte, en la inclusión o ausencia de leyes científicas entre las premisas y, por otra parte, en las diferencias que surgen del carácter deductivo o probabilístico de la conexión inferencial que vincula los componentes de la explicación.
Explicar algo es facilitar su comprensión; debe ser inteligible y convincente.
El Debate Metodológico: Monismo vs. Pluralismo
Las discusiones generadas en torno a la explicación se inscriben en el debate suscitado a propósito del problema del monismo y del pluralismo metodológico (la cuestión de si existe un método compartido por todas las ciencias fácticas o si los métodos varían conforme a la naturaleza de las distintas disciplinas).
Los pluralistas afirman que determinadas disciplinas se caracterizan por proporcionar explicaciones de tipos especiales que las distinguen de otras ciencias.
El Modelo de Cobertura Legal de Carl Hempel
Las teorías clásicas privilegiaron las concepciones globales acerca de la ciencia y dejaron de lado algunos aspectos propios de la noción intuitiva, como es el caso del “modelo de cobertura legal” de Carl Hempel.
El modelo de cobertura legal distingue dos clases de explicaciones:
- Las nomológico-deductivas
- Las inductivas
Modelo Nomológico-Deductivo (N-D)
De acuerdo con el modelo nomológico-deductivo, explicar un hecho individual consiste en deducir el enunciado que lo describe, el explanandum, de un conjunto de enunciados denominado explanans, integrado por una o más leyes científicas.
Una explicación de este tipo es un razonamiento deductivo, en el cual las premisas están constituidas por leyes y por enunciados singulares que señalan algunas características de cierta situación y cuya verdad garantiza completamente la verdad de la conclusión.
Este modelo exige el cumplimiento de varias condiciones de carácter lógico y empírico, entre ellas el requisito de que todas las proposiciones que integran la explicación sean verdaderas. Pero la imposibilidad de verificar concluyentemente los enunciados universales hace que se mantenga un carácter hipotético.
Explicación Inductivo-Estadística (I-E)
La explicación inductivo-estadística se caracteriza por el hecho de que el explanans incluye al menos una ley de carácter estadístico y, además, porque el explanandum se infiere inductivamente del explanans, en lugar de deducirse de él.
En ausencia de leyes universales apropiadas, pueden invocarse leyes estadísticas para explicar un hecho particular.
Se ha procedido a mostrar que lo que los físicos suelen llamar explicaciones causales constituyen una forma específica del modelo nomológico-deductivo.
Modelos de Explicación Teleológica y Funcional
Las explicaciones que indican la finalidad que lo motiva, que se refieren a un hecho aún no realizado, un fenómeno que además podría no llegar a producirse, suelen ser llamadas teleológicas.
Estas explicaciones resultan apropiadas para entender el comportamiento individual de los seres humanos. Es preferible:
- Considerar teleológicas las explicaciones de la conducta intencional.
- Reservar la denominación de funcionales para las que corresponden a otros casos, como las características morfológicas o los órganos de un ser animado para la preservación de su vida.
Simetría entre Explicación y Predicción (Tesis de Hempel)
La reconstrucción hempeliana de la explicación incluye una tesis, por ejemplo, de que la explicación y la predicción comparten la misma estructura. En ambos casos lo que se brinda es un razonamiento cuyas premisas y conclusión guardan simetría.
Lo único que distingue una explicación de la predicción que sería paralela a ella es la circunstancia de que la ocurrencia del hecho descrito por la conclusión sea previamente conocido o no.