Fray Luis de León: Naturaleza, Silencio y Espiritualidad en su Obra Poética

Enviado por Programa Chuletas y clasificado en Griego

Escrito el en español con un tamaño de 3,28 KB

La Naturaleza y el Silencio en la Obra de Fray Luis de León

Hay en Fray Luis de León un ardiente deseo de refugiarse en la naturaleza, de esconderse tras el silencio. En su jardín, de largos caminos blancos, de arboledas altas, acariciadoras, suavemente mojado de la finca del poeta, donde habita el silencio. Un silencio ondulado, donde resbalan valles y ecos y pasa de puntillas el viento. Un silencio donde yace la guitarra y donde está sepultado el llanto.

El Humanista y su Búsqueda Espiritual

En ese profundo silencio se encuentra el gran humanista de inteligencia profunda y creadora, que pasó casi cinco años en una celda oscura del Santo Oficio, angustiado por no saber de qué se le acusaba y quiénes eran sus acusadores.

En la poesía de Fray Luis de León se ve el deseo de ascender a los cielos, el deseo de escapar de este mundo para encontrar alivio a los sufrimientos que la vida le había causado. Fray Luis no viajó por el “Camino de Perfección”, un largo trecho como San Juan de la Cruz, pero encontró su propio camino y uno reservado para su alma en el silencio. Huyendo del ruido, se hizo voz para decirnos en las noches oscuras la palabra infinita sin aliento y sin labios. Su deseo de evasión y la angustia de no poder satisfacer plenamente ese deseo, lo hace más humano, más comprensible que a otros místicos. Su Dios es el que todos buscamos y el que nunca terminamos de encontrar.

Fray Luis de León, pura voz de la lírica castellana, el prodigioso mágico de la palabra, de la palabra nacida de la plenitud del silencio. Autor de una poesía que brota de esa morada misteriosa donde habita el silencio, con música de corazón y de estrellas.

La Naturaleza como Fuente de Purificación y Sabiduría

La naturaleza para Fray Luis es una profunda purificación, es un motivo de asombro, de paz y una maestra inagotable.

Destaca y distingue el paisaje diurno y terrestre por un lado, y por el otro, el paisaje nocturno del firmamento. Ambos sirven para la belleza y la metáfora purificadora. El agua es un elemento vital, el agua como modelo y emblema de la palabra sabia. El agua es vida que simboliza lo uno y lo plural; es invitación a dejarse llevar por el viento, porque tratar de Dios es navegar por mares nuevos y sin fin. En esta atmósfera nos parece que el autor hace suyas las formas de tradición intuitiva que prefiere el poema al sistema, sin renunciar por ello al argumento claro y oportuno. Las preciosas escenas naturales que describe el autor no son meramente decorativas; las describe minuciosamente, recoge la plenitud de la naturaleza como paz y saber.

El Vínculo Divino a Través de la Naturaleza

Fray Luis, al contemplar la naturaleza, dice de ella que en ella tenemos una prueba de la existencia de Dios y la perfección de su Creador.

En Fray Luis, la naturaleza es un camino que nos hace llegar hacia Dios, ya que es un eslabón que se une con Dios.

Fray Luis se evade de este mundo en busca de lo eterno, en busca de Dios por medio de la naturaleza, afirmando que esta experiencia no la podría vivir en un mundo corrompido.

Conclusión

Como conclusión, decir que en toda su obra, el autor nos quiere transmitir la sensación de paz y tranquilidad que a él le transmite la naturaleza.

Entradas relacionadas: